Seven days floating ~ BkDk

Sin Anestesia

El departamento del peliverde era aun más pequeño qué el qué conoció en su infancia pero era cálido como el pecoso, observó el espacio intuyendo el solo haber dos habitaciones, sala comedor, un baño y un pequeño balcón, solo eso.

El peliverde lo guio a una habitación, pudo ver dos camas y un montón de juguetes, un closet rebosante y tan poco espacio para moverse - ¿Puedes recostarlo ahí? - El pequeño se había quedado dormido a poco de iniciar el viaje a casa, al parecer estar en brazos de un héroe lo hizo sentir tan seguro que le venció todo el cansancio y estrés acumulado.

Por su parte Katsuki obedeció recostado al pequeñito suavemente y cubriéndolo con una mantita qué correspondía a su mercancía de héroe, sonrió decidiendo mentalmente todo lo que le daría a su pequeño, si, aunque Izuku no había hablado del tema él ya tenía claro que ese pequeñito era suyo.

Observó nuevamente la habitación, definitivamente el nerd no había cambiado mucho en dar todo de si, ya no estaban esas obsesivas colecciones de AllMight, todo dejaba ver una habitación infantil donde el peliverde solo era un agregado.

Giro buscándolo dándose cuenta de que ya no estaba, salió de la habitación y se guio por el ruido llegando a la pequeña cocina, se sentó frente a la barra qué dividía la sala de la cocina y que parecía funcionar como el comedor, noto solo 3 bancos, justo para el número de personas que, supuso, vivían ahí.

- ¿Y como has estado? - Izuku quería evitar tocar el tema o al menos no ir tan directo, no solo por miedo sino porque jamás creyó qué sucedería.

- Bien - Katsuki reconoció lo cortante de su tono pero no era su prioridad ahondar en una platica convencional, él necesitaba respuestas.

- Bien... Supongo que tengo que explicar todo - Suspiro el pecoso tratando de acomodar todo lo más comprensible - ¿Sabes que es un doncel? - Katsuki había escuchado hace años al respecto pero no lo recordaba del todo, negó - Básicamente es un hombre capaz de gestar, tiene un útero funcional aun cuando en apariencia es un hombre - Acerco una taza con te al cenizo y dio un trago al propio - Yo lo soy, uno de los pocos que actualmente existen, al parecer la sociedad ama los "poderes" pero lo mío es una abominación - Volvió a dar un trago - No lo sabia, mamá tan poco y solo nos dimos cuenta por Katsu - Sonrió al recordar a su bebé recién nacido - Justamente a los seis meses cuando el comenzó a dar pataditas, me asuste y fui al medico, la expresión del médico cuando me hicieron un ultrasonido fue de terror, salí corriendo del Hospital pues tenia miedo de lo que podría pasar...

- ¿Por qué no me buscaste? - Katsuki interrumpió, no iba a dudar de la palabra de Izuku, el chico siempre fue honorable y un feroz protector de la verdad.

- Si fui... Después de que nació, tome todo el valor qué tenia, fui a la UA y conocí a Erasedhead - Ahí estaba, ese brillo qué tenia cuando eran niños y hablaban de héroes - Me dejo pasar y fui a los dormitorios pero - El peliverde dudo en continuar pero sabia que era el momento de ser honesto - Supongo que era lógico, apenas había sucedido lo de tú... Ya sabes... Secuestro - La mueca qué se dibujo en el rostro pecoso causó curiosidad en Katsuki, parecía molesto - Bueno, me encontré con un chico y pregunte por ti, él desconfío preguntándome muchas cosas, me puse nervioso pues no se conformo con un "somos amigos de la infancia", más por que al parecer tú y él eran... - Mordió su labio - Novios o algo así y nunca me habías mencionado - Katsuki siempre omitió esa parte de su historia personal, no por querer ocultar a Izuku sino por que le avergonzaba lo cretino qué fue con el pobre chico - Así que me puse aun más nervioso y me fui, Kacchan tú tenias la vida que soñamos de niños, rodeado de gente igual de talentosa qué tú... Pude ver que te querían y sobre todo te cuidaban, tú perteneces ahí y bueno... - La sonrisa que se dibujo en Izuku le dolió a Katsuki, era una sonrisa forzada tratando de ocultar algo más - Pues yo no soy parte de eso - Izuku desvío la mirada hacia sus manos comenzando a jugar con el borde de sus mangas - Así que seguí mi camino muy alejado al tuyo, como siempre debió ser y - Respiro profundo - Ambos estamos bien, nos hemos amoldado y mi bebé tiene todo, es muy listo y respetuoso, mamá me ayuda a cuidarlo por las tardes... Estamos bien, estaremos bien...

- ¿Eso que mierda significa? - El cenizo frunció el ceño

- Significa que puedes seguir con tú vida si así quieres... Perdón por nunca decírtelo pero lo que decidas a partir de ahora, yo lo respetare... Tomé una decisión egoísta al quedarme callado... No te voy a obligar a nada y aceptaré lo que tú decidas... - Izuku alzó la mirada llena de lágrimas - Solo no lo alejes de mi, se que lo merezco pero por favor, es mi bebé y me muero sin él - Las lágrimas recorrieron sus mejillas, tenia miedo, sabia que Kacchan tenia todo a la mano y él, en esa sociedad, era una abominación en todo sentido, cualquier juez dejaría en claro que no era apto para cuidar a su pequeño y sobre todo si era el héroe número 1 el padre.

- ¿Por qué mierda crees que te lo quitaría? - Katsuki más que enojarse de sentía confundido, si bien él fue despreciable con el menor durante sus años de adolescencia pero jamás haría algo así, inclusive podría aceptar que Izuku había hecho lo correcto pues llegar al punto emocional donde actualmente se encuentra fue un trabajo de años tanto de terapia como de vivencias, se conoce bien al asegurar que su yo de hace años habría sido cruel con el pecoso hiriéndolos a ambos pues sabe, que aun con todo ese talento nato su inteligencia emocional era una mierda en ese época y aunque ahora lamenta no ser parte de la vida del pequeñito qué yace dormido en la otra habitación, tan poco era lo suficientemente capaz de serlo en ese entonces, agradece profundamente el esfuerzo y amor qué Izuku dio a su pequeño, aunque no era precisamente un favor hacia él sino el enorme corazón qué el pecoso siempre ha tenido y que espera que su hijo heredara - ¡Mierda no Deku! Tú eres todo su mundo y no soy el mismo idiota de hace años...

- ¿De verdad? ¡Oh dios! - El peliverde le interrumpió levantándose y abrazando al cenizo sin parar su llanto - Yo tenía tanto miedo... ¡Gracias! Pero... - Izuku se alejo un poco de Katsuki sin romper el abrazo, el contrario lo sujeto de la cintura en un intento de mantenerlo cerca - ¿Quieres ser parte de su vida? - Sabia que no lo iba a obligar a nada, si antes no tomo en cuenta su opinión ahora tendría que hacerlo.

- ¡Joder si! Es mi hijo Deku, quiero estar en su vida y que me vea como lo que soy, hiciste un buen trabajo, no tengo duda de eso pero es mi hijo.

- Me alegro... Así será y dado qué yo decidí los últimos seis años, ahora se hará lo que tu digas - Katsuki sonrió malicioso, el nerd siempre fue tan confiado y ahora lo estaba siendo nuevamente, no iba a desaprovechar, si antes no había estado listo ahora si.

- ¿Estas seguro de lo que estas diciendo nerd? - Cuestionó al menor, no lo iba a obligar a nada pero el pobre chico se estaba poniendo en bandeja de plata, por su parte Izuku asintió sin dudas - ¿Seguro? - Su sonrisa creció aun más cuando nuevamente recibió una afirmación. Izuku le estaba dando una oportunidad qué no iba a desaprovechar, les daría todo lo que no les dio, no recuperaría el tiempo perdido con ambos pero si qué haría qué de ahora adelante el tiempo compartido valiera oro puro - ¡Bien! Entonces se irán a vivir conmigo.