El siguiente miércoles por la tarde, Draco y Hermione estaban en la cocina de Sunserley House preparando un strudel de manzana para el postre de esa noche. Ella había insistido en prepararlo juntos a pesar de las quejas de Cavell y la renuencia de Draco a involucrarse en esas labores, pero nuevamente Hermione lo había convencido, y transfigurando un pequeño limpión en un delantal, se lo había colocado sobre su impecable ropa negra; luego habían ido paso a paso siguiendo un antiguo cuaderno de recetas de su madre para elaborar la pasta al ritmo de una música que sonaba en alguna parte de la estancia gracias al reproductor de CD portátil con altavoces integrado que trabajaba con baterías y que Hermione había llevado para amenizar la tarde con música de Enya.
El inconfundible aroma de la canela mezclado con la manzana llenaba todo el ambiente; ambos jóvenes cubiertos de harina y absortos en la preparación del relleno, reían y disfrutaban del momento compartido en pareja cuando de repente la música cesó, una estela de humo salía en el sitio donde segundos antes había estado el dispositivo. La sorpresiva presencia de los señores Malfoy en la casa, específicamente a pocos metros de donde se encontraban envolviendo el relleno con la delgada masa pusieron los nervios de punta a la joven pareja al verse descubiertos juntos en esas condiciones, además, con la cocina hecha un caos.
—¿Qué hace esta mujer acá, Draco, y desde cuándo te comportas como un elfo doméstico? —preguntó Lucius varita en mano, la desilusión escrita en su rostro y mirada.
—Padre, madre —respondió el aludido con tensa calma. Sus ojos prácticamente sin brillo dejaron claro que estaba usando la Oclumancia para controlar sus emociones—, no los esperaba.
—¡Evidentemente! —repuso Narcissa, el horror y la indignación reflejados en su rostro.
Hermione había empezado a limpiar el lugar con su varita con el nerviosismo reflejado en la torpedad de sus hechizos no verbales.
—Y seguimos sin saber por qué una sangre sucia mancilla nuestra casa —masculló Lucius.
—Mi casa, padre. Y le exijo que no se atreva a insultar a Hermione de ninguna forma, porque no lo voy a permitir.
—¿Cómo dices?
La furia era tan palpable en los ojos grises de Lucius que parecían lanzar fuego, el puño izquierdo en ristre, blandiendo su varita con la derecha de manera que reflejaba su duda entre atacar a su hijo o a Hermione. Narcissa, muy sabiamente, se acercó a su esposo e intentó calmarlo, tocando suavemente el brazo que sostenía la varita.
—Draco... —intervino Hermione al fin—. Creo que es mejor si yo...
Pero Draco no le permitió continuar. La había abrazado por la cintura y pegado a un lado de su cuerpo, y mantenía la actitud desafiante sin quitar la mirada de su padre.
—Queríamos sorprenderte... Pero los sorprendidos fuimos nosotros —comentó la señora Malfoy quien tampoco daba crédito a lo que veían sus ojos. Draco se preguntaba qué le molestaría más: ver a su hijo cocinando, el desorden en la cocina, a Hermione a su lado, o todo el conjunto.
—No suelen venir sin avisar —observó arrastrando las palabras más de lo usual; después, señaló a su derecha—. Estoy seguro que recuerdan a Hermione Granger.
—Lo que no sabemos es por qué...
—Tenemos una relación romántica, padre —interrumpió manteniendo la actitud desafiante, una mirada fría como el hielo. Hermione se sentía extraña ante la formalidad con que Draco hablaba con su familia.
—Eso es imposible, Draco —balbuceó Narcissa, quien parecía al borde de un colapso nervioso.
—Draco... —volvió a murmurar Hermione a su lado, intentando apaciguar la situación.
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Dulce sufrimiento
FanfictionDraco Malfoy, sabiendo que su amor por Hermione Granger es imposible, decide buscar nuevos rumbos, esperando con eso olvidarla. EWE. Segundo fic de la Serie «Camino dentro de tu ausencia». #1 dramionefic: 06-10-23~02-12-23/14-12-12 ~30-12-23/ 04-01...