triplets // norenmin.

04; no sé qué hacer

— ¡Qué flojera! — RenJun se levantó de la cama y bosteza.

Se había despertado de su siesta de dos horas simplemente porque le dió hambre. Se puso sus pantuflas y arregló su suéter para salir y entrar a la cocina.

Claro que no esperaba ver tal sucia escena.

— ¡Por Dios! ¡Sepárense! — gritó y se cubrió la boca.

Jeno y RenJun número tres se alejaron rápidamente del susto, ambos acomodándose la ropa y el menor se secaba los labios con el brazo.

— Son un par de degenerados, ¿qué pasa si entraba Jisung? ¿Qué habría dicho él? — se cruzó de brazos.

— Eeeh, ¿viva el amor? — Jeno preguntó.

Ambos RenJuns rodaron los ojos.

— Bien, me aburrí. — la copia quiso salir de la cocina, pero el RenJun original lo tomó del brazo.

— No, tú te vas a la habitación, hablaremos en un par de minutos. —.

— Ajá. — fué lo único que respondió antes de marcharse.

A penas se quedaron solos, RenJun enfrentó al menor.

— ¿Me puedes explicar que mierda acabo de ver? —.

— Creo que es muy obvio, ¿no? —.

— No te hagas el chistoso ahora, Jeno Lee, ¿qué te ocurre? ¿piensas que es normal estar besando las copias de otros? —.

— A ver, en mi defensa, creí que eras tú. —.

— Pues que pendejo eres, yo no soy tan fácil como piensas. —.

— Nunca he dicho eso. — suspiró — Debí haberlo pensado mejor, es imposible que me veas de otra forma, ¿verdad? —.

— ¿A parte de un idiota que piensa con el pene? Por favor, y si quiera habrás pensado en pedir permiso para tocar a mi copia, eres hombre, no me sorprende. —.

Sin esperar respuesta, abrió un cajón en donde escondía galletas y sacó un paquete cerrado, salió y se encontró con Daegal dando vueltas por el pasillo.

— ¿Tu papá te abandonó por cigarros? —.

El perro no ladró pero si que comenzó a llorar para ser levantado, RenJun rió levemente y lo hizo, la cargó hasta el sofá y allí se quedaron.

— ¿Debería llamar a Chenle o a protección animal? —.

Daegal soltó un pequeño ladrido que encontró adorable, entonces la abrazó.

— Eres muy bonita y suave, no como tu papá, que es ruidoso y para nada cariñoso... bueno, conmigo sí, pero Jisung siempre lo mira con cara de "quiéreme, por favor", jaja. —.

La pequeña perrita se acomodó en el regazo del chino y éste decidió prender la tele, estaban dando una película la cuál no pudo reconocer, pero aún así la dejó.

— Mmmh, ¿crees que Jisung y Chenle serían buena pareja? Yo digo que sí, se complementan mucho. —.

Daegal soltó un ladrido con mucha energía.

— Que bueno que estemos de acuerdo, seguramente Jisung te da mucho cariño y por eso lo quieres, ¿no? — le sonrió a la nada — Si a mí me dieran la atención que a tí te dan, estaría muy feliz... aunque no dejaría que tú papá me corte el cabello, primero muerto. —.

La perrita volvió a ladrar, y esta vez volteó para mirarlo.

— ¿Porqué mencionas a Jeno y Jaemin? Ellos no tienen nada que ver aquí. —.