triplets // norenmin.

06; con sinceridad

Jeno salió de su habitación y Jaemin de la propia, ambos se quedaron mirando por unos segundos antes de suspirar.

Sabían que era el momento de tener ESA conversación.

Sin decir nada, ambos se dirigieron al sofá y se acomodaron allí, apagando la televisión de pasada.

No tenía sentido seguir evadiendo lo obvio, estaban en una clase de competencia desde hace unos meses pero ninguno parecía ir ganando, o al menos era así hasta que su hyung favorito se clonó en dos versiones más.

Lo cuál aún no tiene explicación.

— ¿Cuál había sido tu deseo? Ya no lo recuerdo pero lo mencionaste hace unos días atrás. — Jaemin preguntó, su semblante era totalmente serio.

— Deseé que hubiera más de un RenJun, para que no pelearamos más por su atención... — agachó la cabeza.

— Y... ¿Lo dijiste por los miembros? ¿O solo por nosotros dos? —.

— Agh, obviamente la segunda. — se cruzó de brazos — A ambos nos gusta mucho, eso está claro. —.

— Sé que no tendrías una mala intención, pero aún así no tiene sentido, ¿cómo se supone que podríamos salir con las copias? Es... raro. —.

— Ay, Nana, ya de por sí es raro que hayan tres RenJuns rondando por la casa, ¿no crees? — rió sarcásticamente — Y lo peor es que ninguno parece quererme. —.

— Ah no, no digas eso, RenJun te quiere, y mucho. — lo apuntó con el dedo — No vuelvas a decir algo como eso, no te dejes llevar por sus insultos, si no te quisiera, ni te hablaría. —.

— Pero... yo lo amo... mi cariño va mucho más allá... pero él no siente lo mismo... —.

— ¿Cómo estás tan seguro? Tal vez sí le gustas y yo soy el que está perdiendo el tiempo, he visto sus ojos cuando te observa, se ven brillitos... tan adorable. — sonrió con tristeza — Ojalá le pasara eso conmigo. —.

— Nana, es así contigo también, ¿o porqué crees que te trata tan bien? A tí no te insulta, empecemos por ahí. —.

— Pero Nono, yo también lo amo, y sé que él no siente igual porque, si fuera así, ¿porqué lo ocultaría? Solíamos hablar de todo, y eso incluía cada pensamiento, no importaba si era bueno o malo, nos escuchábamos siempre, pero ahora... se distanció. —.

Jeno notó el cambio drástico de humor en su amigo y compañero de grupo, así que se cambió de lugar para sentarse junto a él y tomar su mano.

— RenJun te adora muchísimo, Nana, no estés triste, no la está pasando bien así que tenemos que ayudarlo. —.

— ¿Y todo estará bien después de que esto pase, Nono? —.

— Yo... no lo sé, me encantaría decirte que sí, pero... si uno se arriesga, el otro va a sufrir. —.

— Si es esa la única forma de solucionar esto, entonces hagámoslo, por él. —.

Jeno juntó sus frentes y acarició la cara de Jaemin con mucho cuidado, ninguno sabía que iba a pasar, pero era necesario ser honestos con sus sentimientos.

— Por él. —.

Y claro, entre los tres siempre se han querido, eso era verdad, pero a RenJun le dolía pensar que podía lastimar a alguien con sus decisiones.

Porque el haberlos espiado le hizo más mierda la cabeza, pero ahora tenía el punto de vista de ellos sobre la situación y, puede ser que eso lo oriente.

Ya no es culpa del deseo de Jeno o de las palabras de Jaemin.

Esto se trata de RenJun. Y él mismo sabe que tiene que resolverlo.