Daylight | Loki Laufeyson

Capítulo 13: cuando el cielo se parte en dos

Cuando cae la lluvia, Tony no quiere hacer demasiado. Yo tampoco. Nos encerramos a fingir que somos dos adolescentes, y escuchamos música. Siempre iniciamos con alguna canción de las buenas de AC/DC, y siempre terminamos con alguna canción de alguna de las innumerables series de Disney Channel. Siempre pasa igual. Siempre Tony termina contándome cosas sobre Pepper, siempre le digo que ambos son un matrimonio que todavía no está casado, y siempre él termina preguntándome qué está pasando en mi vida. 

Es quizás el ciclo más fiel que he tenido en toda mi vida, quizás más que jugar a "el mundo del revés" con Yelena. Sin embargo, cuando Tony me pregunta esta vez qué está ocurriendo en  mi vida, no puedo responder. 

No puedo responder porque no puedo, no me atrevo, a decirle que no dejo de pensar en Loki. Porque es algo que no estoy preparada para admitir. Porque Loki en su primer día en tierra parecía una amenaza, lo hacían ver como una amenaza. Sin embago ahora, había encontrado cierta amabilidad en él, cierta dulzura. Y no estaba preparada para dejar atrás esa dulzura. Ni estaba preparada para ventilar al mundo ese pequeño recuerdito que tan preciadamente guardaba de sus ojos mirándome fijamente ese día en la sala de entrenamientos. 

Su tono de voz se me había guardado en la mente. Su respiración y su agite cuando se colocó delante de mí hacía que me tiemblen las rodillas. No podía pensar en otra cosa así quisiera. Así que le mentí a Tony Stark. Y le dije que nada estaba ocurriendo en mi vida, pero que si quería, me hablara de él. 

"Si quería" Hablamos por dos horas sobre por qué había elegido el quinto piso de la torre para que sea su despacho, a pesar de que lo había movido a los pocos meses.

Y por hablamos, me refiero a que yo solamente pude pensar en esos ojos observándome. 

─Entonces, el Dios. ─ me dijo mi encantadora Kate mientras se lanzaba a mi cama. Yo estaba entre sábanas. Mi idea principal era encerrarnos a ver películas en esa tarde torrencial. Sin embargo, ella tenía los peores planes que se me podrían haber ocurrido: Hablar sobre mi vida. Y yo, que estaba cansada de intentar no pensar en Loki, entontré en ella una aliada para contarle todo. 

─¡En tu cabeza! ¿Es decir...- espera. ¿Cuénta como que han tenido sexo? O solamente fue algo cósmico. 

─Es extraño. Porque sí lo recuerdo. Es como si hubiera ocurrido, solo que no lo ha hecho. Es decir... pasó, pero en el mundo de mi imaginación. ¡Eso es lo peor! No sé si él lo.. siente. Solo envió el pensamiento a mi cerebro, y jamás volvimos a hablar de eso. No tengo su punto de vista, simplemente... tengo una mitad. ¿entiendes? 

─¿Y cómo se sintió?

─¿En el momento? Muy incómodo, porque estaba junto a mi padre, y con tu tía en el intercomuicador. Te imaginarás que no es un escenario ideal. 

─¿Y cuando te alejaste de María, y de tu padre? 

─No sé qué pretendes que diga. No me ocurre nada. 

─Hasta que él se ha planteado eso de mirarte con intensidad por el resto de tus días. 

─No. Quizás es algo que despertó en mí por lo que dijo. Es cierto. Antes de él jamás me había planteado la existencia real de los dioses. Thor para mí era algo así como un personaje sin demasiadas vueltas. Pero Loki me genera demasiado misterio... Con él es como si los dioses sí existieran. Y a la vez, no tiene sentido alguno. Ha dicho que conocía a Zeus, por amor a Dios. 

─Tal vez... ¿lo hace?

─¿Eres quién decía que todo eso eran cuentos de niños?

─¡Avery! ¿Alguna vez has pensado que quizás la vida no es como la creíamos?

─Todo el tiempo. De ahí, a creer que estoy a una persona de Zeus... es muchísimo.

─¿Y si lo que realmente te cuestionas no es la existencia de los dioses, sino tu capacidad de... querer a uno?

─¿Querer a uno?

─Loki no es un tipo feo, eso es lo único que voy a decir aquí y ahora. 

─¿En serio estás preguntando ésto? 

─Solo digo, ¿esto no era una introspección para tí?

─¡No! ¡Yo solo quería ver películas! 

─Pues entonces veamos películas. ¿Cuál quieres ver? ¿Hércules? 

─¡Kate Bishop!