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El aroma a café y facturas inundó sus fosas nasales en cuanto puso un pie dentro del local. Pero extrañamente, el lugar estaba vacío.

Jungkook paseó la vista por cada rincón mientras avanzaba, un poco temeroso por tanta soledad. El piso estaba reluciente, igual que las mesas y sillas.

Se sentó en una banqueta junto a la barra, a la espera de que alguien apareciera. Y no alguien, él quería ver a Taehyung en especial. Luego de prácticamente haber huído de él hace cuatro días, se mantuvo alejado para pensar.

Necesitaba decirle la verdad. Ya no importaba si de repente Kim lo odiaba, por qué así era la única manera que dejaría de ser doloroso para ambos. Jungkook había intentado con toda su fuerza de voluntad borrar aquél sentimiento, quería poder arrancarlo del pecho y de la mente.

Pero aún si intentaba matar aquellas mariposas que revolotean en su interior, volvían a nacer con tan solo recordar la cálida sonrisa cuadrada de Taehyung.

Estaba enamorado, lo tenía claro desde el momento en que subió al tren años atrás. Lo amaba, cada parte de él. Jungkook amaba a Taehyung aún si este no lo recordaba por completo luego de cinco años sin verlo, o aún si todo había ocurrido de manera precipitada entre ellos.

Y podía aceptar su odio si él quería dárselo.

-¡Hey! Chico lindo

Aquella voz borró todo pensamiento en la mente del peli-negro que observaba un cartel fijamente, pero a la vez, no lo hacía, y se puso de pie de inn

Felix se acercó a la barra, secándose las manos en un trapo celeste.

-H-hola, yo... ¿Porqué no hay gente?

Con rapidez, Jungkook se avergonzó por sus propias palabras. Sus sentidos estaban alerta a causa de los nervios, y ver a una persona que no esperaba lo había asustado un poco.

Felix, por suerte, le regaló una pequeña sonrisa antes de hablar.

-Hoy nos tocó cerrar tras el primer turno porque cierta persona pidió faltar, así que me dejaron a cargo del cierre-explicó, apoyando los codos sobre la barra-. Supongo que no era a mí a quien esperabas ver.

El peli-negro le regaló una pequeña sonrisa, avergonzado, mientras negaba con la cabeza.

El peli-negro le regaló una pequeña sonrisa, avergonzado, mientras negaba con la cabeza

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Según por dichos de Félix, Taehyung se había tomado el día para estar en su casa. Al menos era lo que el chico sabía, pero a Jeon la información le era útil de todas formas.

Tras darle aviso a su vecina -con quién estaría viviendo por tiempo indefinido-, de que se dirigía a la casa de su amigo, Jungkook caminó sin mucho apuro hasta dicho lugar.

No notó que había llegado hasta que se encontró parado frente a la puerta, durante el camino su mente se mantuvo en blanco y sus pies se movían como Ai fuera por inercia. Estaba en «modo automático», y odiaba cuando le pasaba eso porque no recordaba muy bien nada de lo que había ocurrido durante el tiempo que le duraba aquello.

𝐋𝐨𝐮𝐝𝐞𝐫 ² | 𝐉𝐣𝐤+𝐊𝐭𝐡 (𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora