Recuerda que te amo

Capítulo 18: Hola mamá.

Catalina cruza la puerta principal y se dirige a la sala.

—Acasia, hija ya llegué ¿dónde estás? — pasa el lumbar de la puerta y me ve parada en medio de la cocina y sala.

Todas mis cosas estaban fuera, Emiliano junto con mis amigos se las llevaron no tenía nada en esa casa, enfrentaría a mi madre de una vez por todas.

Me mira de manera extraña — hija ¿Estás bien? — su mirada era confundida — ¿no me darás un abrazo de bienvenida?

—Hola mamá, tenemos mucho de que hablar.

—¿Sobre?

—¿Qué sucedió con mi padre?

—Ya te lo dije falleció.

Me acerco un poco.

—¿Cómo?

—Un infarto.

—¿Un infarto? ¿O murió envenenado?

Lo tomo por sorpresa, abrió los ojos como platos.

—¿Por qué dices eso? No es cierto.

—Mamá, mataste a papá porque te iba a dejar te volviste completamente loca, lo acosabas y  perseguías por todos lados, se iba a ir conmigo ya no soportaba más tu compañía — camino de un lugar a otro. Su rostro se transformó en uno de molestia total.

—Pues si, él tenía una aventura con su estúpida asistente tenía que morir, era un infiel que no servía para nada — levanta la voz.

—No es lo único que me ocultaste, el asesinato que hubo en el curro sabias de eso, tu misma planeaste todo te uniste con la hija del Sr Foster para matarlo, sólo Dios sabrá que más has matado para salirte con la tuya. Manejas al Sr Foster a tu antojo al igual que Natalie

—Ellos son unos títeres para mi, no pueden ir en mi contra Foster es un asesino al igual que yo y Natalie sólo quiere ser millonaria y está detrás de tu novio.

—¿Cómo sabes de Emiliano? — sonríe un poco.

—Siempre te tuve vigilada, se todo y cada uno de tus pasos por eso vine antes te estabas acercando mucho a la verdad, admito que me agarro de sorpresa que supieras.

—¡Estas demente! ¿Cómo pudiste matar a tantas personas y estar tan tranquila?

—Acasia hija, en este pueblo hay más secretos enterrados de lo que crees, te encontraste una lista ¿no? Son cada una de las personas que me hicieron daño, todas ellas sabían de la aventura de tu padre y no me dijeron nada, me voy a deshacer de todas ellas — abro los ojos como platos.

—¿Qué? No puedes hacer eso — alzó la voz.

—Claro que puedo y lo hare — Se me pone enfrente — borraré todas esa personas una por una así como hice con tu padre y tus abuelos.

—¿Mis abuelos? — le doy la espalda.

—¿No supiste? Fue muy fácil, sólo corté su vía de respiración y listo.

—¿Por qué lo hiciste? — me pongo cara a cara con ella.

—Porque me molestaba verlos, era como revivir lo que tu padre me hizo.

Pongo mis manos sobre mi cabeza — Estas enferma y loca, me iré de aquí para siempre.

Corro a la puerta principal pero algo me detiene un golpe en la cabeza y caigo al suelo.

—Nos divertiremos mucho hija mía — fue lo último que escuche antes de cerrar los ojos.
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Notas de la autora: estamos en los capítulos finales :)