Día 22: Casa del árbol

745 68 11
                                    

- Ve a explorar un poco Viktor, los de la mudanza tardaran un rato en bajar las cosas - sacudió su cabello su padre antes de ir a ayudar a los trabajadores a bajar algunos muebles.

No objetó al respecto, el tentativo bosque detrás de la casa era muy tentador para no ir a explorar.

Detrás del patio trasero había un sendero marcado entre el pasto que sin dudar siguió. El lugar era muy pacifico, el aire era tan limpio y la brisa fresca a diferencia de la ciudad, el constante ajetreo y ruido, la suciedad por todas partes y el aire húmedo y maloliente. Le alegró mucho que se mudaran a este lugar.

Siempre había amado el bosque. Tras terminar el sendero encontró un pequeño puente de madera que cruzaba un estrecho río, el agua cristalina corría cuesta abajo por el camino. Esto realmente era lindo, pensó mientras seguía caminando ansioso por donde lo llevaría el sendero.

Tras girar por una curva en el camino una construcción se hizo ver entre los árboles. Era grande, bastante, muy bien construida y maravillosa. Como las que había visto en algún programa de televisión. Una gran casa del árbol sostenida por tres grandes troncos de árboles.

- Pero que... - susurro para sí mismo acercándose al lugar

Un pequeño letrero le llamó la atención a lo lejos, en un árbol colgado a su altura un letrero escrito con una pésima caligrafía decía "Propiedad de Jayce Talis"

Es la casa del árbol de un niño, concluyó de inmediato ¿Por qué tendría su casa del árbol en medio del bosque en lugar de más cerca de su casa? Se preguntó a sí mismo mientras se acercaba.

La escalera de caracol le llamaba tentativamente, siempre había querido una casa del árbol como cualquier otro niño y en este momento su niño interior le gritaba que entraran. No había nadie cerca y nada le aseguraba que no estuviera abandonada.

Subió lentamente por las escaleras probando la fuerza de cada escalón y cuidando apoyar su bastón con firmeza. Una vez arriba miro la bella vista desde el balcón, podría ver su casa incluso.

Sonrió maravillado. Se giró y entró por la puerta cerrada sin llave. Tal vez si estaba abandonada después de todo, pensó, una vez dentro se dijo que tal vez no lo estaba.

Había algunos puff en la esquina de la pequeña habitación, estantes y estantes de libros, un escritorio lleno de papeles, una silla, una guitarra a un lado y algunas baratijas adornando como posters del espacio, un globo terráqueo y un enorme tapiz del sistema solar colgado en el techo.

"Así que es de los niños que les gusta el espacio" pensó mientras se acercaba al escritorio. Había un libro marcado con un lápiz sobre geología. Empezó a hojearlo mirando las incontables notas que había en cada una con una mejor caligrafía que la del cartel de abajo.

El ruido de unos rápidos pasos llamaron su atención de repente, se giró justo en el momento en el que el dueño de dichos pasos entraba a paso veloz al lugar.

Ambos saltaron del susto, Viktor dejó caer el libro y el chico, no tan niño como pensaba Viktor, tropezaba con sus propios pies.

- ¡Q-qué carajos! ¿Quién eres y qué haces en mi casa del árbol? - reclamo el chico moreno levantándose del suelo tras haber caído de la impresión.

- L-lo siento mucho -

El chico le miró molesto antes de notar el libro en el suelo, corrió hacía él recogiendo algunas de las notas que se habían caído. Viktor también se agacho sin pensarlo para ayudarlo.

- Lo siento otra vez, no debí entrar pero no pude resistirme, e-es maravillosa tu.. casa - tragó con fuerza al mirar al chico delante suyo. Jayce había dicho el cartel.

We Love Flufflytober 2023 [JayVik]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora