Capítulo 37

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# Incidente del mundo Shinobi (Arco) 12/22

Minato estába en la salida de Konoha, a pesar de la infiltración de Naruto, ellos aún tenían que partir a Suna para los exámenes de ascenso a Chūnin.

El equipo siete, conformado por Sarutobi Konohamaru, Moegi Kazamatsuri y Udon Ise, su Jōnin-sensei es Ebisu pero por ciertas razones y órdenes del Hokage, quien acompañaba al equipo es Asuma Sarutobi.

En cambio el llevaba como guardaespaldas a Sakura y Mito, dos Kunoichis que estaban en igual de condiciones en poder y cerca o incluso superior a su propio poder.

Jiraiya era quien quedaba al mando de la aldea con Shikaku y Shikamaru como sus asesores, el rubio Hokage ya había dejado unas muy claras instrucciones al Sannin.

"Bien, nosotros nos retiramos" dijo el Hokage y el Sannin solo asintió, todos podían notar el ambiente apagado, como si una tragedia fuera a caer sobre Konoha.

Lo que nadie sabía es que en este momento, una charla se llevaba en otro lugar pero dentro de Konoha.

..... Complejo Senju .....

El complejo Senju no era grande, después del pasar de los años, el complejo se fue reduciendo, donando sus terrenos para distintos usos para el bien de Konoha.

Tsunade agradecía estar aquí, el complejo era hermoso sin duda alguna, su clan técnicamente era uno con la naturaleza misma, y quizás por ese motivo el complejo era el más hermoso y mejor cuidado de toda Konoha.

La Senju estaba en el jardín, un estanque lleno de peces Kois de diferentes colores, dándole una hermosa vista al estanque, pero en el lugar habían distintos árboles de cerezo que le daban una vista aún mejor y habían varias extenciones de flores por todo el jardín con el césped bien cortado.

La Senju veía el lugar y respiro con tranquilidad, hace un mes había tenido a sus hijos, unos hermosos gemelos que estaban en una gran cuna de madera de roble oscuro con un paño sobre ella para cubrirlos de los bichos.

Jamás pensó estar al lado de su compañero pervertido, cuando se enteró que Jiraiya sabía la verdad de Minato y Kushina, le dió una paliza de la que jamás olvidará, el Sannin tardo un mes completo en el hospital.

Pero después de eso, el Sannin hizo todo lo posible por ganarse se confianza nuevamente, pero se ganó su corazón y tres meses después decidió casarse con el Sannin, y ahora tenía a dos hermosos bebés por los que daría la vida.

Un fuerte viento soplo en el jardín, desprendiendo una cantidad considerable de hojas de cerezo como varios pétalos de flores, dando una vista hermosa a la Senju.

"Sin duda unos bebés preciosos" la Senju rápidamente se levantó al escuchar esas palabras, el que fuera que estuviera al lado de la cuna de sus bebés, tendría la peor de la muertes, pero se paralizó cuando vio a esa persona.

"Naruto" fue lo que dijo la Senju, aún tenía los recuerdos de ese mocoso idiota que la hizo convertirse en Hokage, pero aquí y ahora lo veía, aquel mocoso ya había crecido.

"Hola, como has estado vieja bruja" dijo con una sonrisa, la Senju pronto comenzó a soltar lágrimas, Naruto solo veía esto con diversión.

Pero abrió los ojos de dolor, cuando la Sannin lo golpeó en el estómago, el escupió sangre y callo de rodillas ante el golpe de la Senju.

"Cómo pudiste irte haci sin más, sabes lo mucho que me dolió tu partida, maldito mocoso" dijo llorando y enojada la Senju, Naruto se levantó y se limpio la línea de sangre que escurría por la comisura de sus labios.

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