🍂El dolor del casi algo🍂

V - Te encontre

| James |

Salí de bañarme y me dirigí a la habitación, Sky estaba allí sentado mirando hacia un punto, camine hacia él despacio, lo abrace fuerte, se asustó y me empujó a un lado. — ¡Qué haces!, — grito sorprendido. —Solo quería que huelas mi aroma, ¿ahora puedo dormir en tu cama junto a ti?, — pregunté sorprendido por su reacción.

— Si, acuéstate y duerme, no me gusta el ruido.

— ¿No dormirás?

— No, tengo que escribir algo.

—  Está bien, buenas noches.

|Sky|

Estuve pensando en James, me pregunté en qué tipo de relación que teníamos antes, ¿Cómo fue que nos conocimos?, ¿Qué me pasó exactamente como para olvidar todo? Hasta ahora no me había cuestionado sobre ese accidente, quiero saber cómo era yo hace años. El me acaba de mirar nostálgico, debe ser difícil vivir con una familia tan disfuncional, ¿Qué debo hacer para hacerlo sentir bien?, será bueno si me acerco un poco.

Termine de escribir lo que había pensado acerca del amor, algo que solo se da y no se espera algo a cambio, algo que no se puede explicar porque no hay palabras que lo expliquen; el amor más que felicidad y locura, es dolor, porque el que ama más siempre termina dando hasta lo que no tiene, mientras que la otra parte solo recibe.

Me acerque hacia James, él ya estaba dormido, me acosté a su lado y lo mire por unos minutos, era exactamente igual a mi personaje, sus facciones eran perfectas, aunque tenía rastros de lágrimas, seguía siendo el ser más hermoso que había visto eh imaginado. Estiré mi mano hasta su cabello, lo acaricie por un momento, luego me di cuenta de lo que estaba haciendo, no era correcto, me cuestione a mí mismo, ¡cómo puedo estar con alguien acompañado, se supone que no quiero amigos! De pronto James se acercó a mí y me abrazo fuerte, me moví para soltarme, pero fue inútil, tenía mucha fuerza, así que me quedé quieto hasta que logré dormir con su aroma fresco.

Siguiente día.

|James|

Los pequeños rayos de sol que entraban por la ventana entre abierta me despertaron, pero eso no me eclipso como el hecho de ver a Sky durmiendo como un ángel, ¡Te encontré!, no te dejare ir jamás. Lo mire por un instante, algo en mi hizo que me sonrojara y sintiera rayos de electricidad en mi cuerpo. Me moví y él despertó, pensé que me iba a regañar, pero solo sonrió y me dijo buenos días, luego salió de la habitación.

—  James, cámbiate y baja a desayunar con nosotros, mi papá se fue a una reunión y ya le dije a mamá que te quedaste haciendo una tarea conmigo.

Me quedé anonadado, ¿por qué de pronto se comporta tan amable? Baje un poco nervioso, hace mucho que no veo a los padres de White. 

— Buenos días. — Saludé dirigiéndome a la puerta.

—  ¡Hey muchacho!, espera, mi hijo dijo que se quedaron hasta tarde haciendo tareas, debes estar cansado, ven toma desayuno con nosotros. Sky fue por tu comida.

— Está bien, muchas gracias.

— ¿Cuál es tú nombre, muchacho?

— Soy James.

—  Cof, coff, coff, —  ¡Eres James, el amigo de secundaria de mi hijo!

— Si señora.

— ¡Él te recuerda!

— No, quiero hablar con usted sobre eso, necesito saber qué le pasó exactamente.

***

— ¿De que hablan?, ten James.

— Hijo, le preguntaba a James si terminaron su tarea, me es raro que el primer día de clases dejen tarea.

— Entiendo, si, ya terminamos. Iré a traer mi mochila, espérame James.

Asentí sonriendo, la señora me pidió que vaya a su despacho, cerró la puerta y llorando me dijo todo. Salí impotente de aquel lugar,  lleno de furia, apreté mis puños con fuerza, ¡nunca debí venir!, quería tener a esos tres en frente. Golpeé la pared con fuerza hasta que él de pronto apareció gritándome.

— ¡Hey!, ¡qué haces!, ¡por qué golpeas la pared de mi casa!, ¡estas loco!

— ¿Estás bien?— pregunté con la voz entrecortada. — Él extrañado dijo que sí. Camine hasta tenerlo en frente y lo abrace. — ¡Perdóname!, ¡nunca debí dejarte allí!, ¡perdóname White!

— ¡Suéltame!, ¡Qué te pasa!, ¡no entiendo tu comportamiento!, ¡por qué actúas como si me conocieras!

— Yo... "No le digas nada de lo que te acabo de contar a mi hijo, no quiero que se odie a si mismo por lo que paso" 

***

— Cariño, hoy llegaré tarde, tu papá también, así que pides que comer para tu cena ¿de acuerdo?

— Señora, ¿puedo invitar a cenar a su hijo?

— Am, ... Si, por favor cuida de mi hijo. Sky, compórtate con tu amigo, no lo trates mal.

— ¡Pero, mamá!

— Adiós.

— ¡Mamá!

— Tranquilo, ¿Tanto miedo me tienes?

— ¡Por qué mi madre de repente te tiene tanta confianza!, ¿de qué hablaron?

— Nada, solo me dijo que soy un buen chico para cuidarte. ¿No estás de acuerdo con eso?

— ¡Estás loco!

— ¡Hey!, ¡qué dijiste! Espera, iremos juntos a la universidad.

— ¿Acaso no irás a cambiarte a tu casa?

— Cierto, entonces nos vemos en clase, Cuídate.