愛、それは何ですか？(Amor, ¿qué es eso?)
Es lo que se preguntaba el joven Dazai Osamu, un joven que a su corta vida ya había sufrido más de lo que se podían imaginar. Obligado a vivir una vida que odia a causa de malas decisiones guiadas por sus sentimientos...
- ¿Qué?, Dazai, ¿por qué no? -no podía creer lo que estaba escuchando, ¿cómo me puede pedir algo como esto?- Ese maldito merece pagar por todo lo que ha hecho, ¿enserio crees que puedo dejar que siga con vida?
- Chi-chibi
- Chūya, no es el mejor momento para esto -intervino Yosano-sensei, dándome una mirada dura, guarde silencio y asentí- Voy a darle los primeros auxilios, tú sigue con tu misión
No estaba muy seguro de dejar a Dazai en este estado, pero confío en Yosano por lo que, aún con cierta inseguridad, me fui hasta el centro de la ciudad, donde parece ser que se encuentra la mayor actividad y seguro también el jefe de la Port-mafia.
Al llegar al lugar pude notar que era un desastre, varios edificios estaban destruidos y había un montón de gente herida, los agentes de la policía estaban tratando de resguardar a la mayor cantidad posible de ciudadanos, además de Fukuzawa-san y los demás miembros de la agencia que estaban enfrentando a los soldados de la Port-mafia. Centré mi ataque en el jefe, deshaciendome de cualquiera que intentara detenerme hacia mi objetivo.
- ¡Mori-san! -exclamé, atrayendo su atención hacia mi, activando mi habilidad- A llegado tu momento
- Chūya-kun, que inesperada sorpresa -con una sonrisa maliciosa- Supongo que tendré que encargarme yo mismo -en eso sale una chica de brillo anormal, supondré que esa es su habilidad- Elise-chan, ya sabes que hacer
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- Parece ser una herida profunda, espero que no haya sido de gravedad -escuché murmurar a la doctora, la verdad es que no me sentía con fuerzas de responderle- ¿Cómo se te ocurre interponerte?, Chūya hubiera podido esquivarlo, o en caso contrario, mi habilidad hubiera podido salvarlo
- Fue...un impulso -traté de hacer una broma, pero no podía reírme sin aumentar mi dolor- Ahora el chibi...me debe su vida
- Una deuda de vida, ¿eh? -sentí que presionaba una gasa contra la herida, tratando de frenar el sangrado- No tengo duda de eso, ahora ese enano hará cualquier cosa por ti -noté que mascullaba enojada- Esto no está funcionando, lo mejor será tratar de llevarte a mi enfermería, o bueno, lo que queda de ella
- No... -me negaba a ser movido del lugar, no creo que pueda llegar hasta ese lugar, además de que solo sería una pérdida de tiempo- Es inútil
- Oi, no seas pesimista -me regaña, dándome una mirada severa- Soy la mejor doctora de la ciudad, con mi equipo necesario te pondré de pie en poco tiempo
- No,...es lo que *ugh* me merezco -sentí un horrible sabor metálico en mi boca, por lo que me vi obligado a expulsar esa sangre atorada- Solo evita que...la babosa mate al jefe
- ¡¿Por qué diablos te preocupas tanto por ese monstruo?! -estaba furiosa, siendo consciente de su pasado no puedo culparla, hasta yo odio el tener que pedir esto- ¡¿Tan leal le eres?!
