Cap 41 Capilla

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¿Qué más podría ocurrir en este día?, bueno.... Pensando mucho después de ser secuestrado supuse que mi vida iba a terminar, pero la verdadera cuestión era si sería rápida o de forma realmente dolorosa. El saco que me mantenía segado de mi alrededor no hacia mas que incrementar mis expectativas de lo que me ocurriría, siendo mas bien lo que lograba distinguir en ese preciso momento, el cuerpo alargado y desnudo que se enrollaba en mi cuerpo impidiéndome moverme mientras sus garras se mantenían sujetas a mis hombros al igual que podía percibir sus dientes atentando contra mi cara, el piso retumbaba con el paso del asfalto mientras mi cuerpo comenzaba a sudar ante lo que me iba a deparar y lo peor de todo, seria que Fangs no había llegado para ayudarme, aunque no le culparía, todo paso tan rápido que apenas podría haber hecho algo para salvarme.

Solo espero que lograra seguir la camioneta.

Con el paso de las horas y mientras la criatura me sostenía mi cuerpo no aguantaba la fuerza con la cual me retenía, el Synx apretó mas su cuerpo con el mío a tal punto que el aire comenzaba a escapar de mis pulmones, quería que se detuviera pero sabría que no me entendería ni quisiera responderme, en un punto pensé que este era la forma en que estas personas mataban a sus víctimas, pero pronto estaría seguro de que no sería así, si es por ellos por lo cual desaparecen las personas estoy seguro que me querrían para algo más.

Desperté de mi larga inconsciencia, me había desmayado durante el camino, podía percibir un gran moretón marcado en mi cuello, mi cabeza daba vueltas mientras intentaba orientarme y allí me percaté del lugar donde me encontraba. Una celda a oscuras, con barrotes oxidados y una luz tenue que se mantenía sobre el cuarto, la pequeña litera donde me encontraba yacía sin colchón y solo los resortes me sostenían, era tan incomodo que prefería haber despertado en el suelo.

-maldita sea, que demonios me harán- me preguntaba a mi mismo mientras escuchaba pasos a la lejanía del pasillo

Pensaba en quedarme callado por un muy largo tiempo, no sabría del porque pensaba en eso, parecía el hecho de que intentara que no me oyeran y se olvidaran de mi o que simplemente no quería decirles nada si es que llegaran a interrogarme de alguna manera. Los pasos se acercaban y mi mente me pedía esconderme en donde sea, sabría que era imposible y que no había nada mas que hacer, los hombres en túnicas llegaron a mi celda, la abrieron y me pidieron que salga, al principio me negué, pero bajando la mirada note que tenían un Synx con una correa amarrada a su cuello, como si se tratase de un canino siendo una imagen bastante hilarante de lo que aquella cosa era capaz de hacer, siendo que ni una correa seria suficiente como para mantenerlo seguro, pero aquellas personas parecían haberlas domesticado de tal manera que ya era una mascota para ellos.

-¿Creen que pueden asustarme con eso?- dije

El synx se abalanzo a la celda e intento morderme, yo retrocedí hasta la pared mientras la cuerda parecía hacer que evitara despellejarme.

-Ya sabes que debes hacer, sal de la celda y acompáñanos- uno de ellos respondió

Temblando y al punto de sudar avance con cautela a lado del Synx grisáceo que yacía al lado mío, con forme caminaba note su cuerpo alargado y que parecía tener las mismas características de un Synx común, llegando a medir casi 3 metros de largo y con la única diferencia que tenia mucho menos pelos que Fangs.

En un camino el cual me parecía eterno por fin había habíamos logrando llegar a lo que parecía ser una capilla totalmente improvisada, que se extendía en hectáreas hasta al otro lado donde se encontraban sillas y un altar enorme hasta al final donde predominaba una figura de cabra, esculpida a base de vigas, metales y trapos sostenidos con cuerdas deterioradas, una el cual era imposible no saber de quien se trataba. Los synx se esparcían por los techos escalando entre pilares y a lo largo de una gran alfombra carmesí que predominaba un camino directo al altar, los hombres de túnicas me sostenían y me forzaban a avanzar hasta allá, donde sabría lo que me depararía.

-Suéltenme malditos! - grite

No salió respuesta alguna

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En cuanto ví el vehículo llevándose a Anthony clame para que no se lo llevarán, el Coche avanzo y yo no hice más que perseguirlo, saltando entre tejados mientras podía notar como varias personas se percataban de mi presencia, mi forma sigilosa de moverme ya no me importaba, solo quería llegar a aquel vehículo y sacar a Anthony de allí. No sé cuánto más pude perseguirlo pero el edor que emanaba lo podía reconocer a kilómetros de distancia, al final me detuve viendo con este se alejaba mientras no podía hacer nada, cansado y poco a poco rendido lo único que podía limitarme era ocultarme mientras intentaba mantener el olor para reconocerlo después. Me abulte en mi mismo arriba de una azotea desconocida mientras pedía por comida, eso era lo que necesitaba.... Pero no ahora.

- No puede ser, porque carajos tenía que ocurrir esto?- dije

El cielo se oscurecia, seguía el rastro del olor el cual poco a poco me había llevado a kilómetros y kilómetros de un camino asfaltado entre los bosques, los coches pasaban a gran velocidad de manera inesperada y con ello me limitaba a moverme entre los árboles para evitar ser visto, mi cuerpo se llenaba de tierra mientras seguía avanzando en un camino que parecía interminable.

-Anthony.... que te estará ocurriendo ahora?-

Me arrastre hasta un tramo en dónde pude lucidar a lo lejos una especie de mamífero de 4 patas, con huesos alargados en la cabeza el cual parecía avanzar a tal velocidad que sin siquiera verlo llegar un auto paso sobre este y lo mando volar hasta los árboles, el animal cayó y el vehículo no se detuvo, siendo así lo que me reflejaba el porque los humanos no les importa a los seres vivos más debiles. Mirando a ambos lados cruce al otro lado del asfalto mientras me acercaba al animal el cual parecía seguir respirando, pero su cuerpo parecía haberse quebrado por completo, dándome la idea de lo frágil que es la fauna de este mundo.

- perdóname pequeño, pero necesito comer- respondí antes de acabar con su vida mientras mordía su cuello para posteriormente terminar de comer sus entrañas.

Al cabo de los minutos me sentía fortalecido de nuevo, entrelamiendome los labios continúe con mi camino hasta varios kilómetros más está vez con una fuerza de voluntad por los aires

-anthony, voy en camino- dije mientras me arrastraba e impulsaba a la luz de la luna.

El olor me había llegado más cercano, este se hacía más intenso conforme me acercaba a un pequeño edificio entre los árboles, a lo lejos no parecía nada más que una cabaña común que podía reconocer, salvó que el hedor provenía adentro de la misma, parecía abandonada y no me traía la expectativa de encontrar a Anthony.  Me arrastre hasta este mismo y al entrar note que la misma parecía estar.

"Atormentado por un demonio"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora