CAP 3 el demonio

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- ¡¿Dónde está el bebé?!- exclamo la criatura

- ¡No lo sé! – exclame asustado

-Si no me dices dónde está no dudare en cortarte la garganta- dijo mientras puso una de sus largas garras afiladas en mi garganta. No había escapatoria alguna ya que mi cuerpo estaba enrollado por su cuerpo cartílagos el cual me enrollaba y presionaba como el de una serpiente, es por eso por lo que al reconocer su capacidad de pensar y hablar supe que debía inventar una mentira o algo para sacármelo de encima.

-Sabes que yo te he estado vigilando por muy largo tiempo, se todo lo que haces con ese cachorro, pero nunca supe donde lo escondes-

¡Es que no es mi hermanito, es del vecino!

- ¿Por eso es por lo que querías ser niñero no? -

¡Si por eso, ahora suéltame! - respondí con ira

- ¿Puedo saber dónde vive? - pregunto

- ¡No sé dónde! - exclame mientras mi cuerpo seguía inmóvil al igual que intentaba sacar uno de mis brazos

-Eres tan inútil- respondió mientras me estrangulaba con su cuerpo

Rápidamente cerré uno de mis puños y le di un golpe a un costado de su cabeza de este, en cuanto impacto la bestia retrocedió y me soltó, corrí de prisa lejos de él y recogí el cuchillo.

-Como te atreves hijo de perra! – grito mientras con una sonrisa de oreja a oreja tapaba su cabeza con sus dedos intentando contener el dolor, por lo que se veía. Es así que empecé a correr hacia la salida, logré voltear hacia atrás y este me perseguía con unos movimientos indescriptibles, como si estuviera desorientado a la par que chocaba con todo lo que se le atravesaba incluyendo las paredes.

-Vuelve aquí - grito mientras intentaba seguirme el paso

-¿¡Porque quieres al bebé!?- grite después de tropezar con uno de los escalones en dirección a la primera planta

-Por sentido común soy un monstruo como tú puedes reconocer y debo alimentarme no!? – respondió con cierto sarcasmo y burla hacia mi

Déjame en paz.

La bestia se abalanzo sobre mí y me vuelve a inmovilizar, pero esta vez boca abajo.

-Ahora dejemos de jugar- dijo mientras Inmovilizaba aún más mis brazos y después me quito el cuchillo de las manos.

Ahora déjame hacerte unas preguntas- dijo mientras lamia el cuchillo con su larga y asquerosa lengua-

- ¿Conoces el nombre del bebé verdad? -

- ¡No! -

- ¿Sabes quién es su padre o madre? -

- ¡Si, pero no me sé sus nombres! -

-¿Bien ahora dime, odias al bebé?-

-¿Que?-

-¡Que si odias al bebé!-

-¡¡Desde que nació lo odio así que por favor déjame! - grite mientras lloraba en el suelo asustado y sin esperanza de escapar hasta que la bestia inserto el cuchillo con brutalidad en el suelo dejando una grieta en frente de mí.

-Muy bien es suficiente, desearía comerte a ti, pero prefiero mejor el sabor del otro así que ahora sé que si es tu hermanito-

¿¡Pero como...- pregunte mientras me mantenía en estado de shock

"Atormentado por un demonio"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora