Lavandas Y Rosas (the hunger games)

3. Mentora de los mentores

Me pongo el uniforme de la academia; camisa, chaqueta roja y falda roja. Cuando llego a clase me siento en mi silla y llega una Clemensia, sus notas son impecables.

—¿vendrás esta tarde a la ceremonia?

—puede, no lo sé.

La ceremonia sirve para entregar un premio, dinero, a quien tenga mejores notas de toda la academia.

—deberias venir, será divertido —dice Clemensia y se sienta en su pupitre.

Dos chicos entran a clase y se sientan a mi lado, un rubio y un castaño.

—¿te han pasado de curso? No te había visto antes —me pregunta el rubio, está a mi derecha.

—tengo una beca... asta ahora no terminé de firmar y rellenar todo para venir.

—soy Corionalus, él es Sejanus.

—yo soy Nia.

—¿La ganadora de los 9° juegos? —pregunta el castaño, Sejanus.

—exacto.

Casca entra a clase y comienza a explicar la lección de hoy.

—para terminar, recuerdo que esta tarde será la gran ceremonia y todos estáis invitados.

[...]

Busco por todo mi armario hasta encontrar el vestido perfecto para esta tarde.

[...]

—¿estáis nerviosos?

—mucho, necesito ganar ese dinero para la universidad —me responde Corionalus.

—yo no quiero decepcionar a mi padre... —comenta Sejanus.

—¿y tú Nia?

—al ganar los juegos me prometieron terminar el curso y pasar a la universidad con todo pagado, hice un buen show que provocó que el capitolio ganase mucho dinero... Si gano donaré el dinero a mi distrito.

Nos sentamos en nuestras sillas y Casca se acerca al micrófono para hablar.

—este año será distinto.... mañana es el día de la cosecha y ahí comenzará la prueba final. Seréis mentores de los tributos y el ganador se llevará el dinero.

Algunos cuchicheos des del fondo de la sala rompen el silencio, el ambiente es muy tenso.

—Nia, nuestra valiosa alumna ganadora, brindará apoyo a todos los mentores.

Me hace una seña para que vaya con él y me susurra solo una frase al oído.

Tú también tendrás dinero como recompensa... Di algunas palabras para los alumnos de la academia.

—los juegos no son nada faciles para los tributos, os aconsejo no hacer estupideces con ellos... No temen a matar  a nadie, por muy rico que sea, por que saben lo que les ocurrirá en la arena.

Me alejo del micrófono y salgo de la sala en dirección al laboratorio.