Rabietas adolescentes.

³

Chico rubio teñido.

Pelo largo hasta hace relativamente poco.

No tan alto. Le gusta el anime y toca la guitarra.

Definitivamente arruina mis ganas de escuchar depresión sonora. Es un chico... especial, no tiene muchos amigos y hasta hace poco a la única que tenía era a CUATRO, su novia.

EX novia.

Bienvenido, TRES.

¿Por dónde empezar? Definitivamente puedo decir que te conozco desde hace relativamente poco. De verdad que al principio de todo pensaba que eras guay, me aceptaste en el grupo e incluso me invitabas a tu casa. No sé si lo escuchabas pero yo sí decía gracias, de todos modos no creo que sea necesario que mi abuela te escriba para darte las gracias por estar conmigo, como tú bien mencionaste en aquel texto que mandaste vomitando la mierda que llevabas toda la noche tragando. Recuerdo esa noche a la perfección y el alivio que sentí al recibir aquel mensaje...

Habíamos quedado para ver una procesión todo el grupo menos tú, porque estabas de viaje. La verdad es que llevaba ahí toda la semana santa y no habíamos quedado ni un solo día, nadie excepto CUATRO y tú podíais, realmente nunca me diste esa buena vibra que necesitaba, así que pasé de quedar.

Dio la casualidad de que cuando CUATRO dijo de quedar fue cuando tú no estabas, fuimos a la procesión y después propuse ir a cenar al kebab. CUATRO estuvo literalmente toda la noche fuera hablando contigo porque, resulta que no eras capaz de hablar las cosas bien y querías que ella nos mandase a la mierda, tanto a ONCE como a mi. Esa misma tarde no paraba de replantearme si realmente estaba cómoda con vosotros, si valía la pena seguir quedando con gente como tú. Me acuerdo que después de la cena llegué bastante bien a casa, diciéndome a mi misma que debería darle una oportunidad al grupo. Fue entonces cuando mandaste ese bendito testamento. Fue entonces cuando decidiste soltar todo y enfadarte por cenar sin ti, cuando empezaste a llorar como un bebé. En el momento que mandaste ese mensaje, que comenzaba con un: "CERO y ONCE, sobre todo CERO, me vais a comer los huevos." Honestamente, tenía 0 ganas de hacerlo, en su momento lo pasé mal con ese mensaje. Llevo toda mi vida de un lado a otro, y cuando por fin decidí dar una oportunidad de asentarme pasó eso.

Me arruinaste la puta vida, literalmente no paraste de criticar a CINCO por salir conmigo hasta el último minuto, no parabas de meter mierda mía porque me llevaba más con ONCE que tú. Tío, espabila, que ONCE y yo nos conocemos desde que llevamos pañales, pero es que no es solo eso, no. También tratabas a CUATRO como una puta mierda, e incluso te atreves a decir que estuviste con ella solo porque querías novia, solo eres un típico hombre español rubio heterosexual más, eso eres. Y es que te parece normal meter mierda de alguien solo porque se lleva con la que te gusta, ¿qué estabas pensando?

"¡Oh! Ella tiene novia, y yo también, pero como CERO es igual que yo seguro me quiere robar a ONCE a pesar de que tenga novia, ¡pues claro!" No. Yo quería a CINCO con todo mi ser, que tú no seas capaz de querer a alguien no es mi problema, lo único que estás haciendo es usar y tirar, ¡sorpresa! Como cualquier hombre. Y es que luego vas diciendo que tú no eres como los demás, pero eres exactamente la misma mierda que el resto, solo sabes llorar y cuando te quedas sin argumentos empiezas a usar emojis de payaso o varios insultos porque así te sientes mucho mejor. Te gusta llevar las cosas al extremo y joder a la gente como el niñito que eres.

A veces me recordabas a UNO, porque te encanta entrar en debates por cualquier tontería y crees que siempre tienes la razón aunque sueltes la cosa con menos sentido del mundo. Te encanta tenerla, de hecho. Eres capaz de abrir un debate solo para demostrar lo inteligente que eres, cuando tienes una mente promedio proveniente de un pueblo el cual está tan deshabitado y tan poco actualizado que no has sido capaz de expandirla y abrirla. Porque no has sido capaz de aceptar que no siempre se puede tener la razón, que no es todo como yo opine. Porque no has sido capaz de ser sincero con personas que te querían, personas las cuales has alejado de sus amigos, aislándolas, sin pensar en cómo se sienten. Personas a las cuales has prohibido, de forma brusca, el hacer cosas nocivas porque no eres capaz de buscar una solución de forma pacífica que no agobie a la otra persona, pues son temas serios, temas que pueden crear adicción, temas que con un: "Como hagas algo de eso te dejo." U oraciones peores no pueden solucionar. Temas donde las personas necesitan amor, cariño y apoyo. No palabras o actos abusivos.

Recuerdo cuando me tocó estar indirectamente detrás de ti mediante ONCE pues tú habías decidido intimar con otra persona antes de dejar a tu novia actual. Cuando te estuve ignorando un día entero en la piscina, dándote la espalda porque ese día habías decidido acoplarte. También recuerdo la de veces que le dije a ONCE que tenías que hablar con CUATRO porque lo que estabas haciendo no estaba bien, que al final le ibas a hacer más daño del que querías, supuestamente, hacer. Todas las noches comiéndome la cabeza porque a ti no te daba la gana hablar con ella, porque manda cojones que tú duermas tan tranquilo mientras yo estoy sin poder dormir, pensando en si debería meterme o no. Recuerdo todos esos mensajes diciendo que "no querías hacerle daño, que ibas a esperar a que su cumpleaños pasase." Tan machito vas por la vida y tan bien finges, porque tienes un complejo de salvador increíble, un complejo el cual se basa en sabotear a la gente y luego aparecer como un mesías para guiarlos, cuando en verdad estás arruinando todo aún más.

Cuando por fin te digas a hablar las cosas, ves que en el grupo no es lo mismo, y ves que la gente está en contra tuya, por razones obvias, y decides volver con CUATRO. Después de haberle hecho tantas putadas y de haberle jodido la existencia, básicamente. Diciendo que había sido "por presión", que te habían presionado entre todos, cuando en verdad lo que no querías era estar solo. Y esto lo demuestra el hecho de que, cuando volvisteis a romper, cuando CUATRO y CINCO empezaron a estar juntas, tú decidiste no dejar de quejarte hasta el último momento. Momento donde te saliste de aquel grupo del cual me echaste, te saliste para después desbloquearme en WhatsApp y decirle a ONCE que quieres quedar. Los cuatro. ONCE, DOCE, tú y yo.

¿Perdón? ¿Y tú crees que yo quiero? ¿O que DOCE quiere? Después de ver claramente que nos quieres utilizar, ¿pretendes que quedemos contigo? Encima, vas a ONCE y le dices que no tienes ningún mal rollo conmigo, pues que pena TRES. Yo sí tengo malos rollos contigo, y unos malos rollos increíbles.

Te defendía de cualquiera que me decían. Te defendía de los que decían que eras un gorrillas raro, que parecías autista yendo con los cascos para no saludar a nadie, que eras un machista, cosa que es verdad... ¿Y qué recibo a cambio? Que no pares de meter mierda de mi. Eso es lo que recibo.

Te considero muy mala persona, y ya no es por malos rollos que hemos generado, es porque no dejas en paz a la gente que aprecio. Eres un idiota con ONCE, no sabes como tratar a un ser humano, y desde luego que no estás hecho para eso. ONCE no está bien contigo, y a ti lo único que se te ocurre hacer es enfurruñarte por diversas cosas como el hecho de que salga más con nosotros que contigo, además diste por hecho que estabas con ONCE cuando ella realmente te rechazó, te dijo que no estaba preparada y que quería un poco de tiempo.

En vez de fijarte un poco en su bienestar, haces cosas que la incomodan. Siempre que ella intentaba decir que no le gustaban ciertas cosas, tú te ponías triste, estar en una "relación" no solo se basa en liarse y cosas derivadas. Se basa en la confianza y el respeto, y tú de eso desde luego que no tienes.

Tú fuiste una de las principales razones de porque no voy a olvidar este año. Este horrible año. Tú fuiste una de las razones por las cuales, mi miedo a quedarme sola aumentó.

Y es que por culpa tuya y de tus horribles celos he estado sola, he recibido castigos de mis padres por no salir, me he pasado días enteros sobrepasando encerrada en casa. Por culpa tuya, yo aún no puedo dormir bien por las noches, por culpa tuya me he vuelto más distante y más seria y es más, por culpa tuya aún tengo miedo a salir con el grupo actual. Miedo a que la historia se repita, miedo a que vuelvas a hacerle daño a alguien que me importa, miedo a aquellas noches enteras sin dormir leyendo aquellos testamentos que enviaste tan emocionado, ese miedo.

Y es que por tú culpa me he alejado de gente que ha sido un mundo entero para mí, gente que me ha ayudado a sobrellevar este año, gente con la que, aún estando presente en mi vida, apenas hablo.

Tú culpa que no pueda parar de pensar en lo que sucedió, no poder parar ese sentimiento que dice que podría haber sido mejor, o ese pensamiento que no para de repetirme que en verdad sí me merecía estar sola.

Tú culpa, no la de CUATRO ni ONCE.

La tuya.

Tú culpa.