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Chico bajito, pelo rizado.

Lunar cerca de la boca, es inteligente y le gusta la ciencia.

Típica persona que se cree el mejor en todo y que pone las ciencias como la única cosa existente. ¿Letras? Vas a vivir debajo de un puente, ¿sociales? Eso no existe, ¿artes? Pringado. 
Pasa de todas las clases y hace dibujos ofensivos, ahora mismo tengo uno de ellos en mi mochila. Uno que quieren colgar en la clase del 4ºC para reírse un rato y que les echen la culpa.

Típica persona que mira solo por sí mismo, no es capaz de tener empatía. Y si realmente consigue un poco, la va a usar en tu contra contándole a todo el mundo tus secretos más oscuros. Qué buen primer comienzo, ¿verdad?

Lo conozco desde cuarto de primaria, fue mi mejor amigo en primero de la ESO.

Bienvenido, UNO.

Qué decir de ti, realmente no sé como empezar. Aún recuerdo cómo empezamos a hablar, te sentabas a mi lado y hablábamos todos los días, literalmente. Recuerdo cuando tocaba elegir delegado y nosotros votamos a la Heather de pelo negro, pensando que iba a ganar. Ganó el que era nuestro amigo y tú dijiste que si alguien preguntaba, nosotros lo habíamos votado a él. Fuiste una gran persona, y muy importante en mi vida. Confiaba en ti, de verdad que lo hacía, te contaba todo. Te conté lo de las pintadas, te conté mis problemas, me insistías en hacerlo y yo lo hacía porque confiaba en ti, me lo pasaba en grande contigo. Intenté que DOS te aceptase por muy mal que le cayeses, y resulta que después de todo lo único que hacías era sonsacarme cosas para contárselas a tu grupo, nuestro grupo. También eran mis amigos, eran, porque son gilipollas. Todos lo son, y pensaba que tú eras diferente, pensaba que podía confiar en ti, que no te ibas a portar mal conmigo como otros lo han hecho, pensaba que me entendías o por lo menos que lo intentabas. Eso pensaba hasta que me enteré que ese grupo sabía todo, y que lo habías dicho porque te encanta cotillear. Porque te gusta ser así.

Recuerdo que en primero le quitabas los libros a GRU porque te caía mal. También me acuerdo que te reías cuando decía que quería ser psicóloga porque no me veías capaz. Me acuerdo que te reías de mi, a malas, porque decía que no quería fumar porque olía mal. Recuerdo que te reías de mi junto a él, que os burlabais y que no me dejabais en paz.

Y es que todos los días de mi existencia me arrepiento de haber sido tu amiga, me arrepiento de confiarte cosas, me arrepiento de llevarme contigo y cada palabra que te mencioné o confesé. Cada cosa, cada hora, minuto o segundo invertido en ti fue lo peor que pude hacer. Te odio, te odio con todo mi ser, lo peor es que crees que lo haces bien. Crees que todos son inferiores a ti y que eres el más inteligente, crees que lo sabes todo y no es así, no sabes nada, no sabes absolutamente nada. Y de verdad que te deseo todo lo malo, absolutamente todo. Ojalá te la devuelvan, ojalá te des cuenta de la mierda que eres, porque yo te quise, te quise con todo mi ser. No de manera romántica, si no de manera amistosa, adoraba ser tu amiga, de verdad que lo hacía y a ti solo se te ocurrió contarle todo a tus amigos, a tus jodidos amigos. Todo. Absolutamente todo. Y es que si estás leyendo esto es porque eres uno de los culpables. Lo eres. Y siempre lo vas a ser. Culpable de que yo sea así, culpable de que yo haya decidido hacer esto, culpable de que me quede sola, culpable de todos los putos cambios que tuve que vivir. Decías que me encerraba en mi burbuja junto a DOS, que eramos él y yo contra el mundo. Y efectivamente, pero me cerraba a gente como tú, porque eres un gilipollas, porque eres un bocachancla y un puto cabrón. Igual que todo tu grupito... E incluso el mismísimo DOS, sois todos jodidamente iguales y tú eres de los peores. Ojalá te pase todo lo que yo he tenido que pasar por tu puta culpa.

Algo que agradezco es aquella última quedada que hicimos donde me dejaste claro, indirectamente, que ibas a dejar de joderme. Que no ibas a decir nada más y simplemente te ibas a alejar. Me lo dejaste claro borrando todo el chat que teníamos. Todos mis ataques de ansiedad o mis desahogos se fueron a una basura digital, cosa que me alegra demasiado. Es de lo que más me alegro, esa muestra de: "ya no me importas, me voy a alejar." Es la puta mejor muestra de abandono que me han mostrado.

[***]

Este año, cuarto de la eso, estamos en la misma clase, por desgracia. No hemos intercambiado ninguna oración y eso me alegra. Lo que no aguanto es el hecho de que mis amigas quieran quedar con vosotros y vosotros no queráis. PELOTA ya ha dicho que no es por nosotras, que es que os caemos mal y ya. No sabe, supuestamente, el porqué, dice que sois unos antisociales y que vuestro contacto femenino está más hondo que el núcleo terrestre. Y es verdad, pero yo sé la razón real y es porque yo no os caigo bien. Porque llevo toda mi vida siendo una repelente, porque te conté cosas que no debería haber contado, porque las contaste, porque soy inútil, porque solo quiero atención, porque soy tonta, porque soy friki, porque me odiáis. Porque me odiáis todos.

Mis amigas no tienen la culpa, ellas están emocionadas por tener un grupo mixto y vosotros aguáis todo. ¿Por qué decís que no queréis quedar con tías y luego quedáis con OCHO? ¿Por qué no le decís nada a GRU? ¿Por qué a PELOTA sí le decís algo si preguntamos? ¿Por qué que preguntemos está mal y luego aguantáis que OCHO se acople? ¿Por qué? ¿Por qué pensáis solo con los testículos? ¿Por qué sois así? ¿Tan mal os caigo? ¿Tan mal lo he hecho? ¿Por qué siempre lo hago tan mal? ¿Por qué siempre gano más enemigos que amigos? ¿Por qué estoy tan sola? ¿Eh? ¿Por qué decidiste que contar todas mis mierdas era buena idea? ¿Por qué no simplemente te alejaste? ¿Por qué tuviste que ir a joder?

Aún recuerdo cuando, en segundo, venías con DOS y conmigo porque tus amigos no te hacían caso. Y venías a enterarte de cosas, venías a cotillear, porque es lo único que podías hacer para que luego ellos te hiciesen caso. Venías, escuchabas y te ibas. Simple, ¿quién se iba a dar cuenta?

"Solo quiero ayudar", "Yo no me voy a ir", " Estoy aquí para ayudarte", "Quiero que estés bien" ¿te acuerdas? Porque yo me acuerdo como si hubiese sido ayer de ese curso. Ese bendito curso.
Y es que intento cambiar, intento mejorar pero no puedo. No paro de hundirme, no paro de pensar y de actuar de forma torpe, no paro. Ya no sé quien soy, ya no sé si he mejorado, no lo sé. No paro de cagarla con todos, con DOS, con CINCO, con SIETE, TRECE, DIECIOCHO, contigo... No puedo parar de soltar cosas inútiles e infantiles, no puedo parar.

Lo siento por todo, siento ser una repelente. Siento ser así, siento molestar a esa mierda de mente que tienes. Siento joder tanto la vida. Y desde luego siento haberte conocido, porque sé que ahora mismo eres capaz de estar riendote de esto y compartiéndolo con tu grupo. Por eso no hay nombres, cada quien que se sienta aludido con el capítulo que quiera. Ya me da igual.

Al fin y al cabo no sois vosotros los que habéis puesto un punto final a vuestra historia.

Rabietas adolescentes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora