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Se dice que Kaguya fue el primer ser en aprender, controlar y utilizar el Chakra, debido a que consumió el fruto del Dios Árbol, para detener las guerras que había en el mundo.

Pero nadie sabía que en el momento que consumió la fruta, al momento de arrojar la semilla al suelo está se fusionó con la misma tierra. El tiempo fluía, la guerra era constante y la diosa Kaguya cada día más y más caía ante la locura. Perdiendo cada día más la fe en los humanos y el poder corrompiendola día a día.

El día que Kaguya fue derrotada y sellada por sus hijos Hagoromo y Haruma. En en ese mismo momento de la semilla del fruto del Dios Árbol creció un pequeño retoño. El cual día a día crecía, hasta crecer de un enorme árbol de cerezo. El árbol empezó a tomar conciencia, a pesar de no poder hablar no moverse podía controlar el chakra y monitorear a su alrededor. Vió como unos de los hijos de Kaguya se quedó en la tierra, enseñándole a la humanidad a controlar el Ninshū que con el tiempo lo llamaron chakra. Conocido y alabado por la humanidad. En cambio el otro hijo, Haruma decidió junto a los invasores y resguardar en la luna a su madre.

El día que los hijos de Hagoromo nació, Indra y Ashura el árbol tomo la forma humana. Obteniendo la forma de una niña con un exótico cabello rosado, piel tan blanca como la porcelana y hermosos ojos verdes que brillan como si fueran jade. La niña era singular, a pesar de estar muchos años observando al hombre era como un papel en blanco, desconocía mucho sobre la humanidad.

Con el tiempo el arbol se nombró, decidió llamarse Sakura como los árboles de cerezo que vio por el mundo. Sakura en ese entonces no comprendía que tan oscuro eran los corazones humanos, porque ante sus ojos eran los más llamativos y deslumbrantes.

Un día al descubrir que su sangre tenía un poder curativo, sin ningún deseo empezó a utilizarlo en los aldeanos heridos.

Con el tiempo su nombre empezó a circular por el mundo, las personas por cada rincón del mundo venían por una gota de su sangre. Exigían día a día que los curará, explotando cada parte de su cuerpo sin siquiera tomar en consideración la opinión de la pobre Sakura.

Pero la niña sin importar cuánto daño le hacía la humanidad aún con una sonrisa le daba una gota de su sangre, sin importar cuánto mal hizo las personas no podía negar cuánto los amaba. Sus raíces día a día empezó a secarse, aún con el cuerpo marchito daba su sangre.

Poco sabía la niña que el corazón humano era aún más oscuro, sabiendo que la niña era la cura para cualquier enfermedad se está muriendo no dudaron en usar un método despreciable. Un Daimyō se ofreció a cuidar a la niña, obtendría muchos más niños con su linaje para exprimirles más sangre.

Fue entonces que empezó el cautiverio del Árbol Sakura, vivir bajo rejas mientras todos los días el Daimyō junto a varios hombres la abusan sexualmente para dejarla embarazada y obtener más niños con su mismo don. Los brillantes ojos de la niña se empezó a opacar, el amor incondicional por la humanidad empezó a volverse más que rencor y odio.

El brillante alma del cerezo se volvió negro, día a día su odio por los humano se intensifica más y más. Lamentablemente el árbol a pesar de usar el chakra para observar, jamás supo pelear ni defenderse. Era un árbol pacifista, jamás nadie le enseño a utilizar el chakra para derramar sangre. El día que nació su hija, por primera vez sintió la necesidad de acabar con su vida. Sintió que era un pecado traer más niños al mundo para ser utilizados y explotados.

El día que acabo con su vida solo dejo un mensaje manchado de sangre: maldigo a toda la humanidad!!! Que de sus sangre torno la tierra de rojo y nunca haya un día de paz!!!

Pocos días después empezó una guerra entre los Daimyō para tener el cuerpo muerto de Sakura, una guerra para ver quién consume cada fibra y parte de su ser. Poco sabían que sin el consentimiento de esa niña, cada parte de su cuerpo en vez de cura se volvía veneno. Cada persona que comió alguna parte de su cuerpo murieron de una manera espantosa, y lo que alguna vez desearon con todas sus fuerzas lo odiaron.

La bebé recién nacida del árbol Sakura fue desterrada, arrojada en pleno bosque sin ninguna piedad. Lo que una vez desearon no fue más que un odio infinito, el rencor que sintieron por Sakura por ser la causante de la muerte de muchos hombres se descargaron en el bebé recién nacido.

El bebé arrojado en el bosque fue rescatada por los hijos de Hagoromo, adoptada como la hermana menor. El tiempo que transcurría fue pacífico. Las personas se olvidaron de esa mujer mágica que dió todo por salvarlos, dónde con un deseo egoísta la llevo a la muerte.

El día que Hagoromo murió, el día que decidió a su hijo Ashura como su heredero, Indra lleno de celos inicio una guerra interminable que serían transmitidos de generación en generación. La bebé ya adulta decidió marcharse, no deseando estar de por medio en la rivalidad entre hermanos. Creo un clan secreto (Ceiba), escondiéndose con su hijo y esposo. Permaneciendo ocultos del mundo, como si jamás hubieran existido.

En la actualidad el único descendiente vivo es Sakura Haruno. Son reconocidos por si exótico cabello rosado y sus ojos verdes.

El Florecimiento De Un Cerezo Marchito Donde viven las historias. Descúbrelo ahora