No hace falta que te confiese que puedes buscarte entre las lineas de este poema. Pues tuvimos la suerte de conocernos lo suficiente para entendernos más que de sobra, para reconocernos el uno al otro entre la bruma. Para asumir, que no podría extrañar una llamada que no fuese la tuya.
por tanto, no hace falta que te diga;
que si algún día volviese a salir tu nombre en la pantalla de mi teléfono, lejos de volver a hacerme daño, escucharías mi voz al otro lado de la linea.
Puede que pasáramos horas intercambiando únicamente una forzosa respiración tras otra. Esperando que uno de los dos reunámos el valor suficiente para confesar que detrás de la coraza que hemos construido;
ambos nos seguimos queriendo.
Y no hay tiempo que cure
porque nunca nos hicimos herida.
Pues comprender que todos fallamos en una ciencia tan inexacta como el amor, nos ayuda a sanar. Y ahí entiendes que nunca hubo llaga donde creímos haber apuñalado.
Sabes que nuestro encuentro detendría el mundo ahí fuera y nosotros terminaríamos con él, y yo sigo sin encontrar un final mejor, enganchada a la música que crean unas cuerdas vocales al suspirar.
Pero hasta que esa llamada no llegue y el universo siga su curso, me torturaré sin poder preguntarte;
¿𝙫𝙚𝙣𝙙𝙧í𝙖𝙨 𝙨𝙞 𝙚𝙡 𝙢𝙪𝙣𝙙𝙤 𝙨𝙚 𝙖𝙘𝙖𝙗𝙖𝙨𝙚?
Si solo nos separaran unas horas del fin;
¿vendrías y rozarías mis labios con los tuyos? ¿me abrazarías ajeno a todo el desastre?
Pero hasta que esa llamada no llegue; Creeré que tus manos nunca volverán a rozar las mías, y el recuerdo de nuestro tacto se perderá en la piel de otras personas.
Y si algún día esa llamada llega, y mis manos son incapaces de alcanzar el teléfono a tiempo, quedará entre nosotros tan solo una llamada perdida y una mera posibilidad de empezar de cero.
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Otras maneras de utilizar la valentía que el alma aguarda.
PoetryTodas las cosas que un día no me atreví a decir. Todas esas cosas que un día me ahogaron las escribiré para que en un futuro mis propias palabras me sirvan de salvavidas, y quizás ¿Por qué no? también te puedan ayudar un poco a ti. Este libro te sum...
