Juego de tronos de una joven

Capitulo 15

Era hora de reunirse con padre y madre y asegurarse de que no hubiera malentendidos. Cuando llegara el momento de negociar mi compromiso, tendría la posibilidad de elegir entre varios candidatos válidos. Mi madre estuvo de acuerdo y, como parte de nuestro trato, me respaldaría aquí. Mi padre era un hombre difícil de acorralar para mantener conversaciones serias, pero ya estaba hecho y ahora estaba en la habitación de mi padre con mi madre.

"¿Qué es esto que escuché? ¿Quieres elegir con quién te casarás? ¿En quién tienes la mira puesta?"

Contuve un suspiro. "Nadie todavía es padre, sin embargo, deseo tener voz y voto en mi eventual matrimonio. Cuando esté más cerca de mi madurez, quiero tener la opción de elegir entre una lista corta de candidatos adecuados y no casarme sin tener voz y voto".

La madre habló como habíamos acordado. "Creo que ella debería tener voz y voto".

Robert tomó un gran trago de vino. "Sabes que realmente no había pensado en eso."

Es increíblemente impactante que un Rey tan sabio y previsor...

"¡Siendo tan pequeño, pensé que faltaba al menos una década!" Dejó escapar una risa estruendosa.

Realmente no fue justo. Ser X me había jodido de alguna manera. Solo era una fracción más alto de lo que era en mi segunda vida y tenía suficiente comida para todos. ¿Por qué seguía siendo tan enano?

"Esto es serio." Cersei le espetó a Robert.

Me las arreglé para calmar el tic en mis rasgos faciales. ¿Por qué debes enojarlo innecesariamente, madre?

Robert resopló. "Sé que es serio, estoy hablando con ustedes dos, ¿no? Todavía no sé de qué se trata esta charla, faltan años".

Presioné de nuevo. "Me gustaría tener algunas garantías, dado que todo mi destino y mi fortuna estarán ligados a quien elijas para mí. No estoy pidiendo que me permitan casarme con quien quiera, solo que tengo un poco de agencia. aquí."

Padre me miró trabajando en las palabras que usé. "Ehh, si eso es todo, parece bastante razonable. Se lo diré a Ned y él me lo recordará si lo olvido. Ja, ¿feliz ahora Myrcella?"
Bueno, sí, lo estaba. Simplemente no me gustó la actitud arrogante que tenía sobre mi futuro. Pero esto era exactamente lo que quería, así que estaría satisfecho. Sonreí con gracia.

"Gracias, padre, lo aprecio mucho".

Robert asintió y sospecho que se sintió un poco orgulloso de una tarea bien hecha.

"Ahora que ya está hecho, ¿a quién le estás echando el ojo?"

"¡Padre! No tengo a nadie; ni siquiera he tenido la sangre de mi primera luna".

El rey se rió. "Bien, no hables de eso. Me sorprende que encuentres a alguien impresionante. Tienes la altivez de tu madre, es bueno ver que un fuego arde en ti, incluso el tipo femenino".

Puaj. ¿Cómo puede alguien ir por la vida con malentendidos tan ridículos? Bueno, ya tenía lo que vine a buscar, así que le agradecí a mi padre nuevamente y me fui.

***

Jaime Lannister había escuchado la misma perorata, o lo suficientemente cerca por tercera vez esta semana. Su bella amante, su hermana, Cersei Lannister, simplemente no lo dejaría pasar.