PRÓLOGO
Crecí siendo una niña mimada, criada en la alta sociedad, escogida a los 15 años para ser la prometida de un joven caballero cual familia era poderosa influyente y abundaba en riqueza, mi compromiso con él fue a distancia, incluso no lo co...
" El apuesto joven empresario Jared Grimaldi de 24 años apareció con una bella joven misteriosa en un evento de su prestigiada empresa donde se le vio muy cariñoso con la joven, será su actual pareja? Qué pasó con la señorita Catherine Lésper? Le sería infiel?"
POV: Margaret
Avente una de las tres revistas que Keith me había dado donde Jared y yo salíamos en la portada, habían publicado varios artículos como este preguntando quién era la "Nueva amiguita" "El nuevo juguete" o peor aún "La Amante"
Me ponía malhumorada el leer esta clase de primicias y más aún ver las fotos donde salíamos Jared y yo tomados de las manos, o Jared tomando mi cintura y quede sin aliento al ver la foto de la portada donde capturaba el momento cuando Jared daba un pequeño beso en mi nariz, Osh! Pero como pude permitirlo!!!
Lo que más me molestaba era ser juzgada y peor aún ser considerada un amante! "Pobre señorita Catherine, debe de estar devastada por la infidelidad de su novio el Señor Grimaldi" Pum! volví aventar otra de la revistas de chismes
En la universidad no llegue pasando desapercibida como siempre, esta vez mis compañeros me preguntabas sobre la relación que tenía con Jared, algunos preguntaban curiosos, otros me miraban con desaprobación y tuve que escuchar comentarios como, "Como fuiste capaz de separar una pareja tan linda" Si supieran que mi relación con él a sido desde hace más de cinco años!
Me asuste al escuchar el sonido de mi móvil anunciando un WhatsApp, eche un vistazo era Jared deseándome un buen día, si supiera que estos días han sido un infierno para mi, pero agradezco que haya salido de viaje en estos días y más que se llevará con él a Andrew y Lombardi aunque hoy se terminará su viaje
Fastidiada, cansada y con un terrible dolor de cabeza llegamos a la mansión Grimaldi, Keith y yo quedamos en ayudar a Adelaida y mi madre para preparar algunos detalles que hacía falta para una ceremonia que se le daría a mi Padre y al Señor Froylan Grimaldi
Flores blancas por aquí, flores blancas por aya y orquídeas por todo el lugar mis favoritas y las de mi padre, un suspiro, un dolor sordo y un sentimiento de culpa me invadió totalmente, cuánta falta me hacia mi padre, pero hoy como todos los días lo recordaría con gran amor
Mi madre era el motor de mi vida, por ella estaba resuelta hacer muchos cambios y soportar infinidad de obstáculos para poder lograrlos
Me tranquilice al verlas reír, Keith, Adelaida y mi mamá reían sin parar por alguna torpeza que hacían, lo cierto era que desde mi llegada a Inglaterra y con la relación que mantenía con Jared mi madre se mejoraba notablemente de su enfermedad y eso tranquilizaba mi corazón y mis remordimientos
Volví a sobresaltar cuando escuché mi móvil sonar nuevamente anunciando un WhatsApp de Jared
"Mi vuelo acaba de salir, te veo en la Ceremonia"
No se porque comencé a tensarme y sentí un nerviosismo en mi cuerpo, no lo había visto en unos días y no teníamos mucha comunicación no le respondía las llamadas pero ahora si contestaba sus WhatsApp con un "Si" "No" "Igual" "Estoy bien" y con un "Ok" como ahorita y es que no es que no quisiera hablar con él pero me sentía tan tonta, no sabía cómo contestarle o sentía que lo iba a molestar si tenía alguna junta o estaba ocupado y es que Jared siempre está trabajando no quería interrumpirlo
-Astrid? Estás bien? Porque estás sonrojada?-
-Estoy bien- Conteste un poco apenada y escondiendo mi celular
-Niñas, vayan alistarse ya está todo listo- Dijo mi madre
-Carlota lleva los vestidos de las niñas a sus habitaciones- Ordenó Adelaida
-No es necesario traemos nuestros vestidos- Protesto Keith
-No aceptamos negativas así que obedezcan y alístense-
Con la última orden de Adelaida subimos a las que antes eran nuestras habitaciones, miraba a Keith nerviosa era la primera vez que asistía a una celebración de la alta sociedad y me decía que no sabía cómo compórtese a lo que le dije que sólo tenía que ser ella misma y que no me separaría de ella a lo cual se tranquilizó un poco
Carlota y otra empleada llevaban las cajas con nuestros vestidos, a Carlota se le miraba irritada con nosotras como era su costumbre pero aprendimos a ignorarla, aún no sabía porque le caía tan mal, llegamos hasta nuestras antiguas habitaciones y simplemente les agradecimos
Me bañe rápido, quería estar presente antes de que llegaran los invitados, agradecía que la habitación seguía igual a como la dejé al parecer no tenían la intención de que pasara a habitaciones de huéspedes y era algo que en cierto modo me gustaba ya que sentía que tenía un rinconcito en esta gran mansión
Al abrir la caja, mire mi vestido y trague duro, parecía que las damas tenían mejor gusto que Keith y yo ya que nuestros vestidos no se comparaban para nada a estos, sin querer por mi mente pasó la reacción que Jared iba a tener al verme pero como rechazar el regalo de su madre? Esta vez no sería mi culpa
Toc toc escuché la puerta tocar, salí rápido sabía que era Keith, al abrir mire a mi amiga sonrojada y nerviosa mientras mi sonrisa se extendía, estaba hermosa y estaba segura que robaría un par de miradas
-Dude en ponerme este vestido- Dijo apenada
-Estás loca? Te ves bellísima además las señoras se hubieran ofendido - Dije llevándola hacia donde se celebraba la ceremonia
Mi madre y Adelaida estaban muy elegantes recibiendo a los invitados mientras nosotras bajábamos las escaleras para integrarnos, mire a los invitados llegar, también vi de mala gana a la prensa presente ya que comenzaban a tomarnos fotos, hice poco caso y seguí bajando las escaleras, mi amiga jugaba mi mano señal de nerviosismo y su toque era frío y tembloroso
-Tranquila- Susurre
Mire nuevamente a mi alrededor cuando me percaté en una mirada intensa dedicada a mi bella amiga, el joven trago duro al verla parece que se ahogaba con el trago que le dio a su Champagne, parecía que sus ojos esmeraldas querían salir de su lugar como si estuviese viendo una galaxia o algo inusual y mi amiga parecía darse cuenta del impacto que este tuvo al verla
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Por supuesto que Alexa su prometida también lo notaba Charles no disimulaba ni un poco lo embelesado que estaba con Keith
-Podemos sentarnos ya por favor?- Dijo mi amiga bajando el último escalón
-Si, vamos a nuestra mesa- Dije señalando la mesa
-Es la de enfrente?!-
-Pues que querías somos anfitriones-
Mi amiga resignada asintió, estaba apunto de dar un paso cuando me detuve al sentir un cálido tacto en mi cintura desnuda y al ver al dueño de la mano que me sujetaba, mi cuerpo sintió un bajón de energía que su mirada provocaba
