Mejor que Conmigo (Taejin Kookjin)

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Eran las 7:40 de la noche. Jin no pudo ir a ver a Taehyung por la mañana así que se apresuró a terminar con sus pedidos en el local para encaminarse al hospital cuánto antes.

Entro está vez por la puerta principal del edificio y se dirigió al mostrador de información para preguntar por alguna novedad del rubio. Ya que prácticamente le había dejado por casi dos días, los días que él médico le dijo que estaría aquí.
Pero solo le dijeron que lo habían cambiado a la habitación 207 y que su estado de salud era estable.

Al llegar a la habitación, respiró profundo antes de entrar.

Taehyung estaba reclinado en la cama, con una bandeja de comida colocada encima de sus piernas y una enfermera a su lado le revisaba el goteo del suero.

—Hola —Hablo con voz suave, Taehyung lo miro enseguida con una expresión en el rostro de cierto alivio.

—Que bueno que llega sr Kim —hablo la enfermera—. Su esposo no ha querido probar alimento en todo el día —le dió la queja, Jin lo miro incómodo y Taehyung aparto la mirada—. Él doctor le dijo que debe seguir la dieta, pero ya que vino, hágalo usted mismo.

Él castaño parpadeo.

—¿Qué...?

La enfermera suspiro con cansancio.

—Que le de usted de comer —dijo con un resoplido y salió del cuarto.

Una ves a solas, Jin se sintió un poco más cómodo y se paró justo donde estaba antes la enfermera con Taehyung.

—¿Te sientes mejor? —le pregunto.

Él rubio le miro y asíntio.

—Algo... —respondió con la voz ronca, se le quedó viendo al emparedado y gruñó— Llévatelo, no me gusta el emparedado

—Ya lo se —lo agarro y le quitó la servilleta— pero tienes que comer Taehyung, ya oíste a la enfermera...

Taehyung hizo un gesto de desagradó negándose a abrir la boca. Pero Jin no le iba a permitir eso.

—Abre la boca Taehyung, ¿Que tengo que darte de comer como a un niño, entonces?

Taehyung chasqueo la lengua.

—No quiero, no tengo hambre. Mejor cómetelo tu —le dijo alejando la mano del castaño con el emparedado de su cara.

—Taehyung... solo una mordida —insistió pero el rubio apretaba los labios negándose a probar ese insípido alimento—. ¡Bien! —exclamo partiendolo a la mitad—. Me comeré la mitad si tú te comes la otra, ¿Está bien?

Taehyung no se mostró complacido con eso tampoco pero al ver la expresión de advertencia del castaño, no tuvo de otra y agarro la mitad del emparedado.

Jin suspiro en cuanto lo vio empezar a comer con recelo. Sonrió cuando lo termino en dos bocados.

—Ya tenías hambre Taehyung —se burló— no me puedes engañar —él rubio rodó los ojos— ¿Quieres probar la gelatina? —le pregunto revisando la charola de comida—. Esto me parece que es, natilla y ah, también te dieron fruta y un poco de leche... ¿Con que quieres seguir?

—Con nada, ya no tengo hambre —protesto.

Jin negó soltando un suspiro. Taehyung es un cabezota. Bien, entonces ese no era su problema si no quería comer, el daño era para él. Pensó, pero viéndole como se ve todavía débil y pálido, con ojeras opacando el azul de sus ojos, es que se vuelve a preocupar. Su ex es un idiota pero Jin no puede dejarlo a su suerte.