La chica del Grupo B

1.11

Nota: ¡Holaa! ¿Qué tal? Espero que os guste el capítulo de hoy, subiré el siguiente en cuanto lo acabe. Por favor comentad y votad si os gusta! Disfrutad de la lectura. ;)

Narrador omnisciente.

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{ Una oportunidad }

Los ojos de Noah se abrieron de golpe, jadeando por la falta de aire y casi levantándose si no hubiera sido por la persona que la miraba.

Unos ojos azul profundo brillaron cuando notó a la chica despierta, pequeños hoyuelos marcándose en la blanca piel cuando una sonrisa decoró los labios de la otra persona. Enseguida reconoció el rostro de Teresa.

Teresa tenía la cabeza de Noah apoyada en su regazo, mientras le acariciaba la frente y el pelo. A su otro lado, Thomas despertó de golpe también. Ambos habían recordado muchas cosas, casi todo.

—¿T-Teresa...? —Noah murmuró, confundida y mirando a la chica.

La voz de Noah pareció llamar la atención de las dos personas que estaban fuera del hoyo. Newt y Chuck se giraron de inmediato, abriendo los ojos, el suero había funcionado de verdad.

—Hola —la saludó Teresa, girándose a mirar también a Thomas, quien estaba un poco más orientado.

—¡¿Estáis locos o qué?! —exclamó de repente Chuck, interrumpiendo las palabras de Noah—. No, ¡estáis mal de la cabeza!

—¡Minho! ¡Ella ha despertado! —gritó Newt, mirando hacia atrás.

Teresa se apartó cuando oyó aquello, manteniéndose a su lado.

—¿Estáis bien? —Newt habló después, mirando a Thomas y a su hermana.

De repente, Chuck se apartó, dejando ver a Minho. Este sonrió al ver a Noah despierta y se arrodilló para abrir el hoyo. Recibió una fulminante mirada por parte del Segundo la mandó, pero no pudo importarle menos, solo entró al hoyo.

Thomas se apartó y dejó que Minho se pusiera de rodillas, abrazando con fuerza a Noah, quien correspondió el abrazo algo desorientada.

—Newt —Thomas por fin pudo aclararse con el alboroto de sus nuevos recuerdos y miró al rubio que estaba junto a Chuck, ahora con la verja del hoyo cerrada.

El rubio alargó su mano hacia el menor, quien se acercó a tomarla, sonriendo al sentir su tacto. Había recordado todo, todos sus sentimientos hacia Newt, todo aclarado en su cabeza.

—¿Cómo se te ocurre picarte? Estás loca —Minho habló, separándola del abrazo y acariciando sus mejillas—. ¿Y si no teníamos más suero? ¿Qué hubiera pasado entonces? Dios mío —suspiró antes de abrazarla de nuevo por un breve momento.

—Minho..., me dejas sin aire.

—Te aguantas. —Dijo en respuesta.

—¿Y bien? ¿Qué habéis recordado? —preguntó Chuck, rompiendo el momento.

Newt pareció bufar ante aquello, pero separó su mano de la de Thomas y prestó atención a su hermana y al castaño.