XXXI

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Megan*

11.02.2021 _ 10:15hr

Si el Juicio ya me habia puesto los pelos de punta, en este momento todo mi cuerpo lo tenía completamente alterado.
Un Daniel demasiado furioso a mi parecer acababa de entrar interrumpiendo nuestra pequeña discusión.

-¿Y ahora con me vas salir?- a pesar de su furia, casi de manera tranquila se dirigió a Emilia  -que escuche mal y confundo las cosas o tal vez estoy loco y me las imagino-

-Ella a ti- me meto, señalandolo -no te debe ninguna explicación-

!Bien hecho¡, como siempre yo abriendo mi bocotá cuando menos debería hacerlo.

Si antes sólo me pareció que estaba furioso, ahora que tenía su mirada sobre mi, no me quedaba duda alguna -Tu- la forma en la que me apunto con el dedo; me lleno de escalofríos -va ser mejor que te vayas, que contigo no es el problema-

No quería hacerlo pero obedecí; tomé mi mochila que estaba tirada en el suelo, la puse sobre mi hombro y con la cabeza agachada me disponía a salir cuando de repente.

-Tu te quedas- Emilia me toma del brazo deteniéndome -lo que me quieras decir a mi- se dirige nuevamente a el -se lo puedes decir a ella también-

Jamás había visto a una persona enrojecer de rabia  de esa manera o por lo menos no en la vida real.

-Es mejor que termines con esto- sisea furioso; apuntándonos a ambas.

En respuesta a eso; Emilia me pega más a ella de una manera un poco brusca pero no me quejo -Búscate una vida Daniel y déjame a mi vivir la mía-

-¿ESTAS LOCA?- si no fuera por que Emilia me tenia fuertemente sujetada por la cintura, su grito me habría hecho caer de espaldas -No seas estúpida; no vez que estas arriesgando demasiado con esta ridiculez-

-Lo que yo haga o deje de hacer, no es de tu incumbencia Daniel- La tranquilidad con la que Emilia se expresa era de admirar -encárgate de tus asuntos y deja de meterte en los míos por favor-

Con rabia nos señala a ambas -Esto no se va quedar así-

Yo me rio, burlándome a mas no poder de el y sus patéticas amenazas, se que si el  podría; ya me habría molido a golpes pero a pesar de que no me cayera bien, no parecía ser un hombre del tipo que golpea mujeres.

-Lárgate de una vez y por favor llévate contigo tus amenazas-
Emilia no podría haberlo dicho más fuerte y claro.

Nunca antes la había visto actuar de una manera semejante pero vaya que me gustaba verla así.

-Te vas arrepentir- amenaza antes de salir del baño dando un portazo.

Mi corazón late tan fuertemente; casi con agresividad, temiéndome lo peor mientras que Emilia por el contrario parecía estar mucho más relajada que yo, lo cual me parece extraño.

-Bueno será mejor que me vaya acostumbrado a estar desempleada- dice como si nada, tratando de hacerse la graciosa.

-¿Como es posible que puedas bromear en esta situación?-

Emilia no parece entender a lo me refiero -¿Y que quieres que haga?- El sarcasmo era evidente en voz -¿que lloré?-

-Yo no quería que esto pasara- susurro tragándome mis ganas de llorar -no es mi culpa-

Nuevas Direcciones (ND#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora