Cuando la magia vuelve - Hyungki

Capítulo 7 - Falla

El baile fue un éxito en todos los sentidos, Kihyun y Hyungwon estuvieron un rato más hablando sobre ellos y de vez en cuando robándose un beso hasta que Kihyun le pidió a Hyungwon regresar el tiempo a la normalidad.

El baile era un inicio para el tratamiento que utilizarían con Jooheon y, saltándose un poco el protocolo comenzarían con el Rey Son, Él sería uno de los últimos pero por algunos imprevistos tuvo que cortar su estancia en Valerian.
Nerviosamente Jooheon estaba sentado en una de las sillas de su habitación con los puños hechos bola y mordiendo ansiosamente su labio, Kihyun al ver esto quiso ir a socorrerlo pero Changkyun ya se le había adelantado, tomando la mano del príncipe susurró unas palabras dulces en su oído y Jooheon se veía notoriamente más tranquilo.
Kihyun seguía viendo demasiado extraña esta relación que tenía su hermano con el sirviente, si bien, Jooheon era un hombre de naturaleza amable y cordial nunca antes había tenido esa actitud con alguien de la corte, parecía algo platónico incluso.
Kihyun vio interrumpido el tren de sus pensamientos cuando escuchó unos suaves golpes en la puerta así que levantándose de la cama de Jooheon fue a atender.

Su alteza estaba frente a él; el Rey Son de Emberlyn.
La noche anterior no lo había visto ya que para él fue su primera aparición pública después de mucho tiempo así que no era de extrañarse que todos los reporteros quisieran atracarlo en preguntas sobre su recién nacido primogénito.
El rey se veía rádiate, parecía que ese hombre no envejecía ni una pizca, su piel morena seguía brillando con la misma vitalidad y virilidad, un Rey siempre sería un Rey.

¡Kihyun! —Saludó cariñosamente Hyunwoo, tomando el rostro de Kihyun susurró ese típico saludo que se usaba en Emberlyn: "Que la luz del día te guíe, y un ósculo sea el comienzo de un nuevo amanecer." para después plantar un suave beso en los labios de Kihyun.

En el pasado, Kihyun solía disfrutar bastante los besos del Rey... ahora era un poco diferente, incluso se sintió un poco culpable, realmente no tenía por qué sentirse así, básicamente no era nada con Hyungwon, el cortejo no significaba que siempre terminaría en una relación, Kihyun era la prueba de ello. Todos les decían que sería el hermano quedado y si tenía suerte Jooheon lo acogería en su familia.
Kihyun se había quedado en el marco de la puerta solamente pensando, no se dio cuenta que el Rey Son ya estaba frente a Jooheon, tomando sus manos y besándolas suavemente, susurrándole mil y un halagos, Jooheon se veía divertido, quien lucia como si estuviera el un funeral era Changkyun, estaba parado en un rincón lejos en la habitación y sus profundos ojos negros se veían tristes e incómodos al igual que su lenguaje corporal.
Kihyun se acercó a su hermano mientras sacudía sus pensamientos para llevar a cabo todo eso.

Jooheon retiró la venda, revelando sus ojos a Hyunwoo quien hizo una mueca de tristeza, se veía que el rey también lo lamentaba.

Hyunwoo acarició el rostro del príncipe y giró su mirada a Kihyun.— Hubiera sido mejor si tú hubieras tomado su lugar. —susurró para Kihyun.

Tragando el pesado nudo que tenía en su garganta solo asintió con la cabeza y quiso salir corriendo de ahí... pero no lo hizo, se tenía que quedar con su hermano sin importar nada, no le importaba que lo descalificaran o que desearan que Kihyun estuviera ciego, solo hacía eso por su hermano pero, Dios, dolía tanto por más acostumbrado que se sintiera.

El ritual continuó con normalidad, en Emberlyn utilizaban las gemas como proyección de magia.
Con un anillo de ópalo en su dedo el rey hizo que Jooheon lo besara para después poner la gema en medio de la frente del príncipe, un leve destello iluminó el anillo y los ojos de Jooheon sacaron lágrimas las cuales el Rey limpió.

¿Puedes ver algo, Jooheon? —Preguntó Hyunwoo mientras seguía limpiando las lágrimas del príncipe.

Jooheon negó con la cabeza y el corazón de Kihyun se hundió, tontamente creyó que a la primera todo se había solucionado pero no.