Maldita Foto | Peso Pluma x Nicki Nicole | TERMINADA

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Mire a mi alrededor, el jardín del salón estaba perfectamente arreglado con flores color blancas y rojas, mis manos no dejaban de sudar, estaba temblando, temblando de los nervios

Todos los invitados estaban en sus sillas, Natanael me tomo del hombro

-No estés nervioso, parce que te vas a desmayar -Dijo él y yo solo le di una sonrisa, la banda sonora comenzó a tocar la marcha nupcial y ví como mi mujer y Sergio venían caminando hacia el altar, mi esposa traía un bonito vestido y un velo transparentoso en su rostro, al llegar a mi, su padre unió la mano de Nicole con la mía

-Cuidala bien -Me dijo y yo asentí feliz, coloque a lentamente alcé el velo, ella me dió una leve sonrisa y sus ojos verdes me miraban

-Te ves muy hermosa -Dije felizmente, ella sonrió y el padre comenzó con la boda

(...)

Sermón tras sermón, hasta pasar a la parte definitiva

-Hassan, ¿Aceptas a Nicole como tu legítima esposa, para amarla y respetarla hasta que la muerte los separe? -Dijo él

-Si, claro que acepto -Dije sin dudar

-Nicole, ¿Aceptas a Hassan como tú legítimo esposo para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe? -Dijo el padre de nuevo, ella miró a su alrededor, a los invitados, a sus padres, a Isabela y por último a mi, se miraba incómoda, la miré fijamente, ¿Que pasaba?

-No, no acepto -Dijo ella antes de soltar mis manos y salir corriendo, sentí mi corazón hacerse añicos, ¿Que? ¡¿Que?!

La gente a mi alrededor comenzó a murmurar y a mirarme con gracia, salí corriendo en la dirección que ella se había ido, la ví subirse en el asiento del copiloto de un auto e irse, me deje caer de rodillas al suelo y comencé a llorar

-¿Enserio creíste que ella, tan perfecta, se quedaría contigo?

-¡Hassan! ¡Hassan! -Escuche esos llamados lejanos, pero simplemente me dediqué a llorar -¡Hassan! -Dijo la voz de Nicole y abrí los ojos

Estaba en nuestra habitación, me sentía sudado y mi respiración acelerada, mi mujer me miraba muy asustada y confundida

-Amor, ¿Que fue eso? ¿Que paso? -Dijo ella mirándome un poco preocupada

-Por favor, dime qué estás segura de casarte conmigo -Dije mirándola a los ojos

-¿Que? Pero que...

-Responde, ¿Estás segura de que quieres casarte conmigo? -Dije asustado, ella me miró a los ojos y asintió

-Amor, es claro que sí quiero casarme contigo, ¿Por qué lo dudas? -Dijo ella mirándome un poco confundida, la abracé con fuerza y le di un beso en la mejilla

-Soñé que me dejabas en el altar, que me decías que no -Dije asustado, sentí como ella me miraba con ternura y se dedico a abrazarme

-Es totalmente válido que estés nervioso, en unas horas nos vamos a casar, son nervios de novios -Dijo ella, mire el reloj de la mesita de noche, las 2:58 am

-Perdón por despertarte, se que tienes que dormir bien para que no tengas ojeras, pero...

-Ya, tranquilo amor, está bien -Dijo ella, ambos nos acostamos y me pegue a ella, recosté mi cabeza sobre su pecho y es abracé por la cintura, ella me abrazo y tratamos de dormir lo mejor que se puede, era obvio que estaba nervioso, pero no creí que tanto

(...)

-Bueno amor, me voy -Dijo ella mientras tomaba sus cosas y hacia que Isabela y su madre las subieran al auto

-Te veo en la boda, te amo -Dije, ella se iría a arreglar a la casa de sus padres, Natanael y yo nos cambiariamos aqui en mi casa

-Yo también te amo -Dijo ella antes de salir, tomé mis cosas y me metí a la ducha, me bañé con rapidez y al salir me coleque el fastidioso traje que había mandado a hacer para la boda

-¿Usarás moño? -Dijo Natanael mirando el moño sobre la cama

-Si, según el sastre es lo que va en las bodas, yo pensé que ni siquiera te ponías algo -Dije encogiéndome de hombros

-Bueno, apresúrate debemos ir a ver qué este todo listo en el salón, Isabela me dió una lista sobre lo que tenemos que checar para que esté listo -Dijo él, yo me apresuré a arreglarme, me coloque el traje, me peine el cabello con cera, me coloque mi colonia y cuando estuve listo, me mire frente al espejo, hoy era mi gran día

-¡Oh oh! ¡Hassan no encuentro las sortijas! -Dijo Natanael asustado, me gire y lo ví preocupado

¡Demonios!