La Hermana De Bucky (Wyatt Lekensey)

Noche juntos

No tuve que esperar nada por él, ya que ya se encontraba esperándome en el muro que solía dividir Seabrook, se veía extrañamente arreglado, pero no quise decirle nada, solo por si había sido casualidad, lo cual era lo más probable.

Pero, ambos emprendimos viaje, cuando llegamos, su madre se apuró a saludarme aparentando mis cachetes de forma tierna, y aunque Wyatt empezó a soltar una pequeña risa por eso, su madre no tardó en hacerle lo mismo defendiéndome, al igual que los cachorros de la manada, quienes después de saludarme empezaron a pelear en juego contra el lobo adolescente, quien se dejó vencer por éstos.

Willa y Wynter también se acercaron a saludarme cuando vieron como mi anfitrión jugaba con sus hermanos, como había empezado a juntarme más con mi enamorado, las lobas y yo empezamos a dialogar un poco más, incluso consideraría a Wynter como una amiga, Willa... Bueno, aún seguía dándome un poco de miedo, no voy a mentir.

Wanda: Hoy si te quedaras a comer con nosotros, ¿No es cierto, dulzura? - Me preguntó con un tono amable.

Isabel: Claro, si no es molestia.

Wanda: Oh no, linda, claro que no es molestia. Solo dime una cosa, no eres vegetariana ¿O si?

Isabel: Nop, no se preocupe.

Wanda: ¡Genial! Y... ¿Te desmayas al ver sangre? - Me preguntó curiosa, pero yo me quedé ciertamente desconcertada sin saber que contestar.

Wyatt: Mamá... - Habló como reproche.

Wanda: Lo siento, lo siento, tenía que preguntar... - Se retiró, levantando los brazos en forma de inocencia.

Wyatt me llevo hasta su habitación para dejar mis cosas, pero yo aproveché la ocasión para preguntar.

Isabel: ¿Por qué tú mamá quería saber eso? - Pregunté muerta de curiosidad.

Wyatt: Por nada, es solo que, los lobos solemos comer lo que cazamos. - Lo miré sin entender. - ... Crudo. - Abrí los ojos como platos, debido a la sorpresa, mientras notaba que él bajaba la mirada con pena.

Isabel: Está bien, es decir no me molesta, son sus costumbres y está bien. - Hablé algo rápido, no quería que piense que lo estaba juzgado.

Wyatt: Creeme, no querrás ver cómo cena mi familia. - Contesto de un modo algo humorístico, lo que hizo que soltará una pequeña risa por lo bajo, causando que él levantará la mirada hacia mi.

Por desgracia yo no pude verlo, ya que me había girado para poder dejar mi mochila sobre su cama, lo que noté, es que solo había una cama, y él no tiene habitación de huéspedes.

Isabel: Oye... ¿Yo dónde dormiré? - Pregunté inocentemente.

Wyatt: En mi cama. - Habló en mi oído, mientras sostenía mi cintura detrás mío.

Eso me causo un escalofrío satisfactorio, pero en seguida me gire, lo cual fue una mala idea, ya que quedamos demasiado cerca el uno del otro.

Isabel: No voy a quitarte tu cama. ¿Tu dónde dormirás? - Pregunté estúpidamente, pero él soltó una risa grave que erizó todos los pelos de mi cuerpo.

Wyatt: No, conejita, ambos dormiremos juntos. - Eso provocó que me pusiera roja como un tómate, ocasionando una risa burlesca y baja de él.

Isabel: ¿Juntos? ¿Cómo... juntos, juntos? ¿En la misma cama? - Hablé nerviosa, tartamudeando un poco entre palabras.

Wyatt: Sip, ¿No te agrada la idea?

Isabel: No, es decir si, si no tienes otra cama, supongo que está bien, aún que podría dormir en el sofá, yo no tengo problema, te sorprendería la cantidad de veces que he dormido en el mío. - Empecé a hablar rápido otra vez, estaba sumamente nerviosa, y el plan de que no lo notará ya se había ido al carajo, era imposible ocultar lo que me estaba haciendo sentir, ¿Cómo puede pasar de ser la persona más tierna del planeta a la más horny, en menos de 5 minutos?