cap 21 (No se me ocurrió un título)

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Acababa de llegar de la escuela, estaba cansada y sudada, había tenido un entrenamiento extra largo con los animadores, parece que ser la capitana era mucho más trabajo del que ya me imaginaba.

Honestamente, cada vez la sola idea de este trabajo me gustaba menos, tuve que abandonar el club de debate gracias a ser capitana animadora, y ni siquiera me gustaba, pero si lo dejaba, decepcionaría a mis padres, y a Buki... Y eso no puede pasar.

En fin, como estaba tan cansada y atareada decidí introducirme en un baño relajante por unos minutos, me lavé el cuerpo y el cabello, para después salir y ponerme algo de ropa cómoda.

Me puse un buzo de Wyatt, últimamente me ha estado dando algunas prendas de su ropa cotidiana, tanto que hasta me da pena que me los esté dando tan seguido, pero al menos son cómodos, me puse mi ropa interior y unos shorts.

Tomé un libro para poder entretenerme un rato, tenía muchísimo sueño, pero no quería que mi cabeza se quedará sin entretenimiento por ahora, porque haría de todo, menos dormir. Para mí suerte, ví a una figura borrosa saltar por mi ventana con agilidad, ni siquiera me asusté, esto estaba pasando tan a menudo, que ya sabía exactamente quien era.

Wyatt: Hola, conejita. -

Sip, era mi novio, el cuál usaba ese absurdo apodo para referirse a mi, había estado con él toda la mañana, pero él dice que eso no es suficiente, y honestamente a mí no me molesta en lo absoluto.

Isabel: Hola. - Le saludé con una sonrisa, bajando un poco el libro que sostenía para poder verlo bien.

Él se acercó hasta mi, me dió un casto beso en los labios, cuando se separó, puso su mano debajo de mi buzo intentando levantarlo, sabía que intentaba hacer, últimamente ha estado acostando su cabeza en mi panza, levantando mi ropa para poder, según él, estar más cerca de mí.

A mí no me molesta eso, de hecho se me hace muy tierno, pero ahora, no podía dejarlo estar bajo mi buzo, ya que si por algún motivo el descubría que no traigo brasier/corpiño estando cerca de ahí, pues, no desaprovecharía la oportunidad.

Antes de que pudiera levantar más la prenda, yo puse mis manos sobre esta evitandolo, pero causando que Wyatt me mirará enojado y confuso.

Wyatt: ¿Qué pasa?

Isabel: Nada es solo que, no traigo brasier. - Me sonroje un poco por decirlo, aunque sabía que no tenía nada de malo.

Wyatt: ¿Y? - Preguntó aún con confusión, yo le devolví la misma mirada que él me daba.

Isabel: Y que, me puedes ver sin nada si te pones como siempre.

Wyatt: ¿Y? - Volvió a preguntar.

Isabel: ¿Cómo que "y"? - Ahora yo soy la que estaba confundida.

Wyatt: Si, ¿Y? ¿Que tiene que te vea sin corpiño? - Se acercó a mi, empezaba a rosar nuestros labios, tentandonos a ambos. - Soy tu novio, ¿No? Tarde o temprano voy a verte sin ropa. - Concluyó con una voz un poco más ronca de lo normal.

Isabel: Pero... - Tragué seco, intentando concentrarme. - Yo, aún no estoy lista para que me veas así. - Comenté con una voz muy suave, casi inaudible, debido a la pena, mi cara ya estaba con un tono carmesí, y rogaba para que no parezca un tómate a sus ojos. 

Esto era algo extraño, Wyatt siempre había sido bastante pervertido conmigo, pero siempre paraba cuando se lo pedía, pero ahora, él seguía encima de mi, comiéndome con la mirada, intenté irme, pero él tomó mis manos y las retuvo a queda lado de mi cabeza.

Empezó a besarme, pero ahora era muy notorio que algo raro estaba sucediendo, su beso era muy rápido y brusco, tanto que, aún que intentaba seguirle el ritmo, no podía, al punto que solo pude abrir la boca y dejarlo explorar todo lo que él quisiera, o eso hice hasta que ya no pude contener más la respiración, pero él no parecía querer parar, por lo que tuve que aguantar hasta que verdaderamente ya no quedaba nada de aire en mis pulmones, voltee la cabeza, dejándolo atrás, mientras yo volvía a recuperar el aliento, Wyatt tomó la oportunidad que tenía, empezó a besar mi cuello, ya que le había dejado un gran espacio para eso.

Sus besos húmedos que repartía por todo mi cuello y clavículas, estaban empezando a gustarme, logrando que soltará algunos suspiros incontrolables, ya había soltado mis manos, y empezó un recorrido por todo mi cuerpo hasta quedar en mis muslos, dónde nuevamente aprovechó, para separar mis piernas y ponerse entre estás.

Yo solo podía poner mis manos entre nosotros para asegurarme que no traspasara mucho, aunque era más que obvio que era en vano, su cuerpo y su fuerza era mucho más que la que yo tenía.

Pero, de un momento a otro, entre esos besos húmedos que tanto estaban gustandome, sentí un pinchazo doloroso en mi hombro cerca de mis clavículas, ¡Me estaba mordiendo!  Por instinto, me safe de Wyatt golpeándolo sin querer, aún que fue bueno, ya que gracias a eso reaccionó y dejo de morderme, soltandome y dejándome pararme, en cuanto se alejó un poco, yo lo quité para correr hasta mi espejo en la habitación.

Donde pude ver dos puntos rojos como si me hubiera chupado la sangre un vampiro, junto algunos dientes tambien marcados en mi piel, a su vez, podía contemplar a algunos chupones formándose cerca de está. Me giré furiosa a confrontar a mí novio.

Isabel: ¡Wyatt! ¡¿Por qué diablos hiciste eso!? - Le susurré muy enojada, tuve que contenerme de gritarle, ya que si lo hacía, toda mi familia se enteraría de que mi hombre lobo estaba en la casa conmigo.

Wyatt: Lo siento, lo siento, lo siento. - Llevó su mano hasta su cabello, empezando a removerlo nervioso. Se notaba algo culpable. - No te preocupes, en unos días desaparecerá.

Isabel: ¡¿Unos días?! Yo no tengo unos días, ¿Conocés a mi familia? - Le reclamé, el estaba aún más nervioso. Me daba algo de lastima verlo así, pero, eso en serio me dolió.

Wyatt: Pero… puedes taparlo con maquillaje. - Intentó solucionarlo.

Isabel: El maquillaje no cubre una mordedura. - Le expliqué con cara de pocos amigos.

Wyatt: Pero si usas una camisa larga, no se verá, creeme pronto sanará. - Contestó con miedo, se notaba su arrepentimiento.

Yo solo giré los ojos chasqueando la lengua, ví por última vez al espejo antes de caminar hasta mi cama, me puse debajo de las sábanas, aún estaba muy enojada con él, pero también seguía muy cansada, estaba esperando que se fuera, pero eso no sucedió.

En su lugar, escuché como si un cachorro llorara al lado de mi cama, cuando me quité las sábanas y me giré para poder ver de dónde provenía el sonido, me di cuanta de que solo era Wyatt, con cara de perro mojado, hacía pucheros mientras seguía llorando como cachorrito. Yo solo voltee la cabeza haciendome la desinteresada, pero enseguida me traicione a mi misma y volví a verlo, moví la tela que cubría mi cama para que se acostase en está conmigo, al notar lo que hacía, él sonrió como un niño en dulceria, no esperó un minuto más y saltó sobre mi cama para abrazarme y pegarme a él.

Otra vez volvía a apretarme de más, pero esto pasaba tan seguido, que ya estaba empezando a acostumbrarme a sentir que mis costillas se rompían por su abrazo, no sé que le hubiera pasado a Wyatt hoy, pero, se que estaba muy cansada como para ponerme a pensar en eso ahora.

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La Hermana De Bucky (Wyatt Lekensey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora