Fire and Water

Fuego: Fracaso

Fuego: Fracaso

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Chizuru Kagura fue quién investigó por su cuenta con respecto a la identidad de Leona Heidern, supo que es hija de un Hakkesshu, al principió pensaba que se trataba de Goenitz, pero no fue así.

Algo que Iori sí se había enterado sobre esta investigación es que, Leopold Goenitz solo la buscaba para cumplir un propósito, "Despertar a Orochi", con la idea de ir eliminando uno por uno a los poseedores de los Tesoros Sagrados que, para su desgracia, no pudo eliminarlos como lo planeaba desde el principio, aunque sí pudo eliminar a Maki Kagura, quien protegió con su propia vida el sello que encerraba a Orochi. Y sí, logró juntar a casi todos los Hakkesshu para acompañar a su Dios.

Con el enemigo eliminado, los nuevos poseedores de los Tesoros Sagrados sabían que era el principio del Caos.

Algo que le extrañaba a la sacerdotisa, se trataba de la existencia de otra sucesora a Reina Celestial, siendo una Hakkesshu del agua. Por la descripción que Yagami le había informado a ella, se trataba de un reflejo exacto de Leona, solo que su cabello era un poco más largo que la otra y el color de sus ojos eran cafés claros.

Chizuru recuerda partes de su visión, su plan era tener a la militar bajo su propia lupa, suponiendo que sí, Leona estaba siendo controlada podría evitar que algo malo se desarrollará a futuro, como el caso de la joven que está del lado enemigo. Sin embargo, nunca se imaginó que habían dos Hakkesshu del agua, quizás ni el enemigo sabía de una doble descendencia y fue un punto a favor para él.

Dos Hakkesshu del agua, gemelas, descendientes de Gaidel. Ella teorizaba que Goenitz se llevó a una, para después buscar a la otra gemela, con el fin de buscar algún sacrificio que otorgue y se le facilitara "el Despertar de Orochi".

Ella lo maldecía en voz alta, siendo observada por unos orbes carmesí que se mantenía con un aspecto débil y pálido, por la pérdida de sangre.

—Esa mujer, es igual a la chica Heidern —habló Iori, con una voz débil y ronca. Se quejaba en voz baja, en cada intento por querer levantarse.

—Debes recuperarte, Iori — le reprocha, al verlo intentar levantarse de la cama —. Falta poco para el torneo, la gran mayoría ha recibido la invitación.

A veces el pelirrojo no entendía todo esto, ¿Por qué tienen que hacer equipo con su rival? ¿Por qué la chica Heidern debe estar con ellos? ¿Acaso Chizuru no participa? ¡él no necesita tener compañeros! La observaba en silencio, con una mirada suave y melancólica hacia ella. Así como la enemiga le recordaba a Leona, así pasaba con Chizuru al ver la imagen de Maki.

Es complicado para Iori, explicarle a Chizuru que él se acuerda de Maki Kagura. Porque la conoció antes que a Kikuri, solo que no tuvo el valor suficiente para aclarar sus sentimientos hacia una y la otra. Cuando se estaba encariñando con una, nunca pensó que le diría a la otra. Sobre todo, al ver como la salud de Kikuri empeoraba con el tiempo, solo le hacía compañía y ella lo tomaba como algo más, con eso poco a poco se distanció de la otra.

Al momento de componer una canción adecuada para ella, solo para demostrar que sentía algo, pero que nunca llegó a entender lo que era exactamente... Viene alguien a borrarla de su existencia.

Porque Iori sabe que Maki sufría de pesadillas y visiones sobre su propia muerte, solo que él las pasaba por alto aquellas advertencias, trataba de buscar algún consuelo para ella, quizás mostrando el poco afecto que podría ofrecerle, la reconfortaba...Pero, nunca fue suficiente.