Fire and Water

Fuego: El legado

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[Fuego y Agua]

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Fuego: El legado

A sus trece años había comprendido de lo que es un legado y del modo que se transmite de padres a hijos, de generación en generación. Los padres dejarían dinero o algún inmueble, o materiales que trasmitan un cariño especial como herencia para su hijo o hija. Quizás las familias normales harían eso: porque el tema de su familia provenía ya de sus antes pasados por un pacto con un ente que al realizarse tenía sus consecuencias.

Su padre estaba destinado en pelear a muerte contra Saisyu Kusanagi, a pesar que su esposa ya estaba muerta por haber dado a luz al único hijo, Iori Yagami. No obstante, la situación se fue complicando a medida que el joven y único heredero del Clan Yagami fue creciendo solo, sin un padre quien le guie y sin una madre que lo acompañe: una madre que la conoce por viejas fotografías de su juventud y estando embarazada.

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En la actualidad, él tiene que cumplir ese legado arriesgando su propia vida para quitar el pacto que ha perjudicado a sus antes pasados incluyendo a cada primogénito con descendencia Yagami (Ex Yasakani) que se mantenía con la carga de una maldición en todo su ser, incluyendo su Tesoro Sagrado: cada madre fallecía al dar luz, en el caso de los padres mueren jóvenes sin ni siquiera llegar a la vejes. Existe una única manera de romper el legado que se creó en el pasado y es vigente en el nuevo descendiente; es pelear hasta la muerte contra el descendiente del Clan Kusanagi.

Los rayos del sol que entraba desde su ventana, daba una iluminación tenue y natural durante la lectura de un joven que se encontraba sentado en una de sus sillas, con su guitarra acústica apoyada a una esquina de la pared.

—Ojala, tuviera más opciones —murmuró, desviando su mirada hacia la ventana que estaba de su lado. El pelirrojo estaba leyendo un testamento sobre la mesa, donde su padre aclaraba algunas cosas; en su living tiene dos sillones negros, una mesa y dos sillas ubicadas cerca de la segunda ventana, no era tan grande su departamento pero es cómodo y nada llamativo con decoraciones incluido de más pero tenía la cocina, un baño y una habitación con una cama individual de dos plazas. Es lo justo y necesario. La pintura de las paredes era un color gris desgastado y al parecer necesitaban que sea pintado de nuevo porque el color parecía agrietarse un poco.

Él tenía que rebuscarse a pesar de obtener una herencia en inmuebles y dinero pero no es alguien que se conforma con solo efectivo y material. Necesita empezar de cero, teniendo en cuenta de encontrarse contra su objetivo, pelear a muerte como hizo su padre.

Todos podrán verlo como un insensible, gruñón, arrogante y violento pero nadie sabe de lo que fue realmente en su pasado, en su niñez. Y, la única persona que lo conocían de verdad ya estaba muerto. De otro tema que si estaba seguro es que no sería como su padre; no después de todo el entrenamiento esforzado y sobrehumano que hizo para tomar una postura fría y calculadora ante su enemigo, guardándole tanto rencor que ni siquiera sabe el motivo para odiar a un Kusanagi: Aunque quizás se debe al entrenamiento que estaba haciendo por la culpa del otro.

Pronto alguien golpea en la puerta de su pequeño departamento, cómodo pero lo suficiente para convivir con su música; levantándose de su silla se acerca para mirar desde el agujero de vidrio de su puerta pero no estaba nadie del otro lado. Esto lo dejaba desconcertado.

— ¿Una invitación? —estaba dubitativo al ver una carta con el sello "R" que lo cerraba. El objeto había pasado por debajo de su puerta.

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N/A: Este fanfic lo hago para reemplazar a uno que tuve hace mucho tiempo que se llama "Love at first glance"/ Amor a primera vista. No sé cuántos capítulos van hacer ahora...Puede que de la nada salga el final xD

Espero que les guste.

¡Saludos y Cuídense!

Atte. J.H ©