Fuego: ¿Alianza?

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T-Tengo que llegar al Templo —habló con voz ronca y haciendo presión en el lado izquierdo de su pecho, le dolía mucho y más porque su cuerpo había chocado contra vehículos estacionados durante batalla.

"¿Quién es esa mujer? ¿Por qué se parece mucho a Leona? ¿Por qué dijo que "debo ir a buscarla"?" varias preguntas surgían por su mente, sintió la necesidad de por lo menos poder llegar al templo, algo malo iba ocurrir con Leona o también con Chizuru ¿Quién sabe?

Débilmente se arrastraba por los callejones oscuros, su pierna izquierda le dolía o más bien, todo su cuerpo lo sentía débil y adolorido, suponiendo de cuando llegue al Templo o a su departamento, se encontraría con varios moretones una vez que se mire al espejo. De repente, su cuerpo se cae boca abajo hacia el suelo; haciendo un golpe seco y algo brusco tras haberse chocado con un pequeño contenedor de basura, ahora no sentía la fuerza necesaria para levantar su pesado, débil y adolorido cuerpo, con dificultad su cuerpo se gira para quedar boca arriba para observar el cielo estrellado, desde su perspectiva no logra localizar la luna llena, sus ojos se cierran y su respiración mantenía un ritmo calmado, como si hubiera encontrado un solo momento de paz y soledad.

¡Yagami, Yagami! —una voz masculina lo llamaba. Una silueta se asomaba, mientras que estacionaba una motocicleta contra la pared del callejón.

Sus parpados se abrían con lentitud, de a poco su vista se hacía más clara al notar la presencia de ese sujeto que lo llamaba por su nombre. Cuando reconoció su rostro y al ver como el joven de cabello castaño le ofrecía su mano para ayudarlo, él miraba la mano y a la vez hacia contacto visual con el individuo que le extendía su mano. Se sentía ¿incomodo? No, esa sensación para Iori no se trataba de eso justamente, sino de orgullo, que lo ha experimentado en diversas ocasiones pero en esta situación se debía una vez más y junto a su rival, una alianza. Las excepciones tenían como relación a la única heredera viva del Clan Yata, Kagura Chizuru y otra vez, ella era quien los reunía para hacer equipo con la princesa de los Ikari Warriors, Leona Heidern; una idea descabellada y de poca empatía entre ellos tres.

—Kyo, Kusanagi —mencionó su nombre, manteniendo su actitud de pocos amigos y mirándolo fríamente — ¿Qué haces aquí?

—Te encontré de casualidad —contestó al reír entre dientes, viendo como el pelirrojo estrechaban su mano para ser ayudado. "Eso es un avance" pensó.

Kyo frunció entre cejas, le parecía curioso ver como su rival tenía sus hombros tensos, como si se tratara de algún gato en estado de alerta, tras ver a un perro rondar por las calles. Con la palma de su mano derecha tapa su boca para contener una pequeña risita al parecerle curioso esa ridícula mezcla de situaciones. ¿Yagami un gatito en alerta? No era el momento para imaginarlo pero no podía evitar reírse un poco, después de todo necesitaba romper con la típica tensión de rivalidades que existe entre ellos, porque ahora son aliados. Y, deben obedecer a la única razón por la cual Chizuru los había reunido. Controlar tanto a Leona Heidern y a Iori Yagami con respecto a su disturbio de la sangre, o esa fue la idea que tenía en mente la descendiente del Clan Yata. No obstante, las malas noticias de enterarse que Saisyu Kusanagi había desaparecido, sin dejar rastro alguno... A diferencia del comandante Heidern, que según por reporte del equipo Ikari Warriors es que Rugal Bernstein estaba detrás de todo esto pero como si alguien más lo estuviera ayudando...

Eso fue lo sospechoso de enterarse del nuevo torneo de King Of Fighters, en donde Rugal estaba organizando otra vez, ya que el resto de los participantes lo daban por muerto. Y, por lo que tenía entendido, Chizuru dedujo sobre los planes que había iniciado Leopold Goenitz y que solo sería el comienzo con la idea de despertar a Orochi, aunque lo hayan continuado Yashiro, Shermie y Chris; porque podía existir la posibilidad que haya más Hakkeshu en el mundo y no solo Leona o Yamzaki, también atrae a personas adineradas con hambre de poder, en el caso de Rugal Bernstein, en cometer un terrible error en el caso de despertar a Orochi.

Kusanagi estaba ayudando en cargar a Iori y guiarlo hasta subirlo en la motocicleta, a su vez estaba dudando que su rival pueda mantenerse equilibrado en su transporte de dos ruedas.

—Tengo una mala noticia, Yagami — habló Kyo, tratando de que sus palabras sonaran lo más serio y preocupante posible.

El pelirrojo levanta su mirada hacia él, su confusión estaba siendo reflejada en su propio rostro, no quería aparentar preocupado ante su rival; capaz se había enterado algo sobre Leona o quizás, Chizuru ya que el enemigo le avisó en que irá detrás de la princesa Ikari, o "chica Heidern" como la habían apodado él mismo.

— ¿Es sobre Leona? —interrogó Yagami, frunciendo el ceño.

— ¿Eh? No te iba a decir que deberías sostenerte fuerte cuando viajemos —respondió Kusanagi, riendo en frente de Yagami, quien se puso molesto por enterarse de esa mala noticia.

— ¡Cierra la boca, Kyo! —masculló entre dientes.

—Aunque...— interrumpió su propia risa y miró en dirección hacia el pelirrojo —No me esperaba que mencionarías a Leona.

Kusanagi se rió a carcajadas, de nuevo.

Iori se paralizó y desvió su mirada para esconder un pequeño rubor que se hacía notar, la idea no era aparentar estar preocupado o que le importara alguien, pero al fin y al cabo lo hizo.

— ¡Cállate, solo conduce que alguien irá tras ella! —Avisó, levantando el tono de su voz — ¡La próxima vez, te voy a cerrar la boca de un puñetazo!

Una amenaza, por solo mencionar que se preocupó por la ahijada de Heidern, no entendía que había entre ellos pero se nota el pequeño avance que estaba surgiendo en esta triple empatía. Eso hizo que el joven de cabellos castaños sonriera por lo bajo a menos, que hubiera o exista algo entre esos dos.

—Entiendo, pero Yagami es normal preocuparte por alguien —habló, cuando se sentaba en el asiento de su motocicleta —Después de todo, ella es nuestra compañera.

Kyo lo miró de reojo y Iori parecía mirar hacia otro lado, ignorando completamente su comentario.

"Me equivoqué en confundirla con el enemigo, quizás si me preocupé por ella... Al saber que alguien quería lastimarla" dijo Yagami, en sus pensamientos.

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N/A: Espero que les guste este capítulo, muchísimas gracias por sus comentarios y en agregar a sus favoritos esta pequeña historia. La pregunta es... ¿Leona y Chizuru estarán bien?

¡Saludos y cuídense!

Atte.J.H ©

Fire and WaterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora