Flechados

Capítulo 5

“Primer acto, segundo acto, Teseracto”

–Por aquí están las habitaciones –dijo el Capitán América mientras nos conducía por los pasillos del edificio. –Todas tienen aislante de ruido, como también la sala de operaciones y dónde entrenamos pero supongo que eso ya se los mostrará Tony o quién sea que vaya a darlos el recorrido.

Abrió la puerta de al final de pasillo mostrando una habitación decorada con tonos neutros de blanco y gris, con una cama queen en medio junto a mesitas auxiliares a los lados, en una se hallaba una lámpara con base negra mientras que en la otra un reloj moderno del mismo color. Al lado izquierdo se encontraba una puerta (supongo yo era el baño) mientras que la derecha un enorme armario gris con un espejo de cuerpo completo.

–Hay cinco disponibles como está, pero pueden tomar una para ambos si gustan –ofreció el rubio.

–Compartiremos una –sentenció Loki mientras miraba la habitación.

Le lancé una mirada que decía: »¿Qué dices?« Sin embargo me ignoró por completo.

–Bueno, pues espero que estén cómodos, en una hora alguien los llamará para que se reúnan con nosotros –el capitán se dio la vuelta para salir.

–Gracias –le dije antes de que salga, él solo asintió y cerró la puerta. –¿Por qué vas a compartir una habitación conmigo? –encare a Loki.

–Para mantenerte vigilada –respondió como si fuera obvio.

–Si, no se me vaya a escapar el secretito –dije con sarcasmo, cruzando mis brazos sobre el pecho.

–No me hagas dudar de tu inteligencia, midgardiana. Se que llegaste a la correcta conclusión desde que acepte venir contigo aquí.

Así que era cierto.

–Planeas vengarte de ellos –rebele para confirmar mis sospechas.

Loki mantuvo su rostro neutral, sin llegar a poder leer su expresión o lo que pensaba. Pero me di cuenta que tampoco lo negaba.

–¿Por qué quieres vengarte de personas que ni siquiera te hicieron nada? Por lo que se tu mencionaste que intentabas escapar con el triple acto y después desapareciste y llegaste aquí –mientras explotaba mi frustración caminé hacia la cama para dejar mi arco y carcaj sobre ella. –Y que yo recuerde eso pasó hace 13 años.

Podía sentir la peda mirada de Loki detrás de mí. Ante su silencio me giré, notando que ya caminaba hacia mi dirección, dando pasos lentos pero largos, como si me estuviese acechando.

Quise retroceder, sin embargo me negué a mostrarme vulnerable ante él.

–Se llama Teseracto –habló por fin, corrigiendo el cómo había llamado esa cosa. En su rostro había aparecido la duda –Me dices que fue hace 13 años, pero en lo que a mí respecta eso pasó hace menos de dos días ¿Cómo explicas eso?

La verdad es que no tenía ni idea.

–A lo mejor fue esa cosa con la que te esfumaste –sugerí.

–El cubo no viaja en el tiempo, solo entre espacios –me explico algo nada paciente, aún esperando una respuesta coherente de mi parte.

Claro, como si yo supiera todo sobre aquello. Y que ahora ya solo nos dividiera un metro de distancia -que él iba acortando poco a poco- no me ayudaba a pensar.

–Pues de alguna forma lo hiciste, viajaste en el tiempo.

–O tal vez… –se paró de repente, tanto lo que iba a decir cómo sus pasos.