Ingresa a la habitación cerrando la puerta tras él y luego de sentarla en la cama se para frente ella de brazos cruzados.
– Evi – la nombrada lo mira – ¿Sabes que problema me pudiste ocacinar en mi trabajo? ¿Que demonios hacías en la calle? – la castaña desvía la mirada.
– Yo... Me perdí – juega con sus manos.
– Mírame a los ojos y repitelo, no querrás que le hable a tu madre – los ojos de Evi se abren en grande.
Si su papá molesto le da miedo, mucho más miedo le da ver a su mamá molesto a tal grado de llorar cuando Levi le riñe o la castiga sin ir al parque durante un mes.
– Me perdí – lo mira a los ojos – Chabela nos llevó al parque, luego quiso ir a ver a su novio y fuimos a su casa pero nos dejó en el auto y cuando se bajó de fue y ya no la vimos. Tardó mucho y ya nos queríamos ir a casa con la abuela Carla. Me baje a buscarla pero me perdí.
– Isabel – suspira frustrado tallando su rostro – ¿La abuela sabe que estás perdida? – la pequeña encoge los hombros, el castaño suelta un gruñido.
Toma su celular marcando al número conocido y luego de varios timbres contestan.
– Hola Eren – ruega los ojos al oír la voz nerviosa en la otra línea – ¿A qué se debe tu llamada?
– Solo quiero saber cómo siguen mis cachorros, ya mañana los veré – escucha un ligero quejido al otro lado de la línea.
– Ellos están bien, muy bien cuidados
– ¿Están todos mis cachorros contigo? – su mirada no se aparta de su cachorra.
– Así es hermano mayor, no hay nada de que preocuparse. Están muy bien con la tía Isabel. Eithan, Lynn y... ¿Evi? – Eren suelta un bufido ante el titubeo de su hermana
– ¿Estás segura que están mis tres cachorros contigo?
– Así es hermanito ¿por qué desconfiarías de mí? soy una excelente tía cuidandolos.
– Isabel ¿Crees que soy idiota? – gruñe – se que has extraviado a Evi.
– ¡Eren lo siento! Solo me baje un momento del auto y cuándo volví ya no estaba! ¡Y ahora no aparece por ningún lugar! – se escuchan los sollozos de la omega. Eren suelta un bufido.
– Evi está bien. No sé cómo demonios ha llegado hasta mi trabajo pero ahora está aquí conmigo – escucha un suspiro de alivio – mañana hablaremos seriamente, así que vuelve a casa y explícale a mi madre que Evi llegará mañana – cuelga antes de oír una queja.
Sabe bien que su madre le dará un buen regaño a su hermana por descuidar a sus sobrinos.
– Esperas aquí dentro hasta que el día termine – Evi asiente – no quiero que salgas para nada, si estás aburrida ves la televisión, dibujas – le entrega un cuaderno y unos lápices – o lees – le entrega un libro – te traeré de cenar pronto.
– Si papá – mira sus manos con sus ojos húmedos.
Eren suelta un gran suspiro y se inclina hacia su cachorra rodeándola con sus brazos, la pequeña rompe en un ligero llanto.
– Lo siento papá – solloza.
– Tranquila cachorra, ya todo está bien pero esto no te salva de un castigo – la mira a los ojos – una semana sin dulces.
–¡Jump! – infla sus mejillas en queja.
– ¿O quieres que mamá te castigue? – niega rápidamente y Eren ríe – vuelvo en unas dos horas para traerte la cena.
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Eres Único - Ereri
Hayran KurguEl trabajo siempre le fue fácil, simplemente salvaguardar la vida de las personas que solicitan el apoyo a la empresa donde trabaja pero nunca se imaginó que el nuevo servicio al cual fue enviado le daría la vuelta por completo a su vida, trayendo n...