One-shots Robby x Miguel

Un Omega pt7

Disfruten. No olviden seguir comentando y darle apoyo al ficc, me motiva a seguir escribiendo ❤️🌹
Sin más, continuemos.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Habían pasado ya cinco días.

Robby había despertado esa mañana bastante temprano ya que iría a entrenar al dojo.

Traía puesto un par de shorts y una camisa sin mangas mostrando los músculos de sus brazos.

Una vez ahí, estuvo unas dos horas. Al parecer todos estaban muy ocupados para venir hoy. Suerte para el, le gusta la compañía de los otros, pero le gustaba más relajarse y pensar claro sin interrupciones.

Aunque quizá no haya nadie puesto que apenas eran las cinco de la mañana cuando despertó y se le ocurrió venir al Dojo un sábado. Cualquiera estaría dormido o con resaca después de un viernes de salida.

-Maldición, es muy temprano, ¿Qué puedo hacer ahora?- Estaba tirado en el suelo mirando el techo. Suspira frustrado- Que asco, tengo sudor en todo el cuerpo- Se estira un poco antes de levantarse e irse con sus cosas del Dojo.

-'Mm, Miguel no pudo venir en estos días debido a su celo, pero ya pasaron cinco días. Ya debe haber terminado'- Piensa positivo mirando a ningún lado en específico- 'Aunque me gustaría estar con el en esos momentos...'- Suspira y niega- 'Aún no es el momento, ni siquiera hemos aclarado que tipo de relación tenemos. Me pregunto cómo se encontrará en este momento'.

Mira su teléfono, ya eran casi las 7:20 am. De repente está sonando y atiene la llamada.

-¿Qué sucede, papá?

-Ire con Carmen al hospital para una revisión, tardaremos unas horas en volver.

-De acuerdo, iré con Miguel- Dice sin pensarlo dos veces.

Siempre pasaban tiempo juntos, así que no le sorprendió a Johnny escuchar eso.

-Esta bien. Por cierto, la abuela vino con nosotros así que estarán solos, cuídense.

-Papa, no tenemos cinco años, podemos cuidarnos un par de horas. Adiós.

Se corta la llamada y sigue caminando.

Cuando llega saca las llaves que tenía en el bolsillo.

-'Me alegra tener estás llaves en este momento'- Alzo las llaves y abrió la puerta del departamento.

Entro al departamento y camino hasta la habitación de Miguel, sentía un pequeño cosquilleo en la nariz mientras se le erizaba la piel y sus colmillos picaban, el solo ignoro todo eso.

En el momento en el que intento abrir la puerta sintió una gran bofetada en su rostro, pero no fue un golpe sino más bien feromonas y no cualquier tipo, eran de pura excitación. Rápidamente cerro la puerta y comienza a inhalar aire fresco de la sala, estaba sintiendo demaciado calor en su cuerpo con solo dos segundos y ni siquiera estaba en su rut. De repente, la comprensión cruzo por sus ojos, Miguel aún seguía en celo. Rápidamente saco la tableta que le había dado Sam días atrás, el intento devolvérselas aunque al final ella insistio en que se las quedará y el lo hizo.
.
.
.
.
.
.
.
.
Miguel había despertado esa misma mañana sintiendo algo de calor en su cuerpo todavía. Lo ignoro e hizo algo de ejercicio en su habitación en cambio creyendo que ya había pasado su periodo.

-Que extraño, debería estar bien, ya pasaron seis días- Se estiro un poco la camisa de mangas cortas para obtener algo de aire. Sus piernas empezaban a flaquear. Estaba transpirando como los anteriores días.

Miro a su alrededor buscando algo, camino hacia un lado de su pared y miro el calendario pegado con unos días tachados.

-¿Cómo es posible que aún no se vaya? Este ya es el sexto día- Exhala con pesadez mientras cae al piso- No puedo ser...Robby iba a venir hoy. Debo avisarle que no venga. Quería aclarar nuestras relación hoy- Dice preocupado mientras respiraba con dificultad.