Después de cinco años de matrimonio, Sakura comienza a ser víctima de violencia doméstica por parte de su marido, quien le acusa de ser incapaz de darle descendencia. En medio del caos y la tristeza conoce a Kazuha quien se vuelve muy especial para...
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Sakura seguía sin saber que decir, temía que Kazuha se enterara de todo y la dejara de hablar o algo por el estilo.
ーNo me digas que fue por la caída del lunesー La menor habló prepcupada extendiendo su mano para intentar tocar el labio de Sakura.
ー¿Qué? ¡No! Claro que noー Sakura habló rápido tomando el dedo de Kazuha con su mano para que esta no tocara su herida.
No sabía por qué había reaccionado así, tenía la excusa perfecta para que no se supiera la verdad detrás de esas heridas, pero el ver a Kazuha tan preocupada por ser la posible causante de sus lesiones le impidió a Sakura dejarla con esa culpa.
ー¿Entonces?ー La pelinegra preguntó preocupada.
Y eso que aún no veía los moretones en sus ojos.
ーYo...ー Sakura no sabía que responder.
ーAquí está su desayuno, que lo disfrutenー Una mesera las interrumpió.
ーBueno, a comerー Sakura soltó una risita nerviosa mientras tomaba una porción del desayuno en su platito.
A lo cual Kazuha la siguió, le gustaba comer, pero si había algo más que le estuviera gustando en estos momentos era tener una idea más clara de como era el rostro de Sakura, podía ver un poco los ojos de la menor a través de esos oscuros lentes de sol, aunque no lo suficientemente como le gustaría y estaba viendo la bonita naríz y boca de la contraria, era demasiado linda a pesar de esa herida en su labio, la cual no tenía ni la menor idea de cómo la contraria se la habría hecho.
Continuaron desayunando de forma tranquila mientras se conocían un poco más, para Kazuha aquella chica era alguien muy interesante, se moría de ganas por saber si aquella linda mujer salía con alguien y si estaba soltera no perdería la oportunidad de intentar algo con la contraria, tal vez llevaba poco tiempo de haberla conocido, pero a decir verdad la coreana llamaba mucho su atención.
Hacía mucho que la comida se había gastado, sin embargo la conversación era demasiado entretenida como para acabarla.
Desafortunadamente una alarma interrumpió su agradable convivencia.
Y sí, Sakura había puesto aquella alarma para no arriesgarse a descuidar el tiempo y que Hyunjin la encontrara afuera de casa.
ーLo siento mucho, pero debo volver a casaー La mayor se disculpó comenzando a levantarse.
ーEspera...ー Kazuha la tomó de la mano para evitar que se fuera ーFue divertido charlar contigo hoy y me gustaría saber si podíamos vernos mañana también, claro, solo si quieres.
Sakura se sintió feliz por aquello, parecía que al menos una persona se interesaba en ella realmente, a pesar de ser una desconocida de cierta forma se sintió bien sentirse querida.
ーPor supuestoー Sakura asintió para intertar colocarse el cubrebocas.
Pero Kazuha no se lo permitió, tomó sus manos para apartarlas de su rostro y besó su mejilla en forma de despedida.
