Capítulo 5

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—Tomad asiento, por favor —dice Kincaid señalando las dos sillas que hay frente a la mesa—. Mirad, voy a intentar quitaros el menor tiempo posible. Sé que en especial tú, Sam, debes estar muy ocupada.

Una vez que las dos jóvenes se sientan, se dan cuenta de que el detective y ellas no son los únicos en la sala. Un hombre de unos cincuenta años aproximadamente se encuentra de pie a la derecha de la mesa con una libreta y un bolígrafo en las manos. En cuanto Sam se fija en él, no puede evitar ver al mismísimo Billy Loomis. Sin embargo, sabe perfectamente que en realidad se trata de aquel hombre que conoció en un parque con Tatum y posteriormente irrumpió en la casa de Hank junto a Kirby para salvarlos de Ghostface, Killiam.

—Sí, así que si no le importa, le agradecería que fuera al grano, por favor —responde Sam—. ¿Para qué nos necesitaba?

La albina, al ver al otro detective, su cara adopta una mueca de desconcierto. En su cabeza se esconde un pensamiento muy similar al que tuvo Sam en su momento. ¿Está viendo realmente al que fue el mejor amigo de su padre? ¿Pero cómo puede ser posible si él está muerto? Parece tener una fantasía hecha realidad ante sus ojos, así que, llegados a este punto se cuestiona si se está pasando demasiado con las drogas.

—Antes que nada —se dirige hacia Bridgett—. Sam, ya conoces a mi compañero aquí presente. Sin embargo me parece que hacer las previas presentaciones es lo que corresponde. Killiam será mi ayudante en lo que dure esta investigación y estará aquí para tomar notas de todo lo que nos contéis.

Bridgett se queda algo más tranquila sabiendo que no está teniendo ningún tipo de alucinación, sino que se trata solamente de un policía que se parece muchísimo al asesino en serie, Billy Loomis Ironías de la vida.

—Bueno —prosigue Kincaid—. Estamos aquí para hablar sobre el ataque producido anoche a la señorita Lauren. Estoy seguro de que habéis oído sobre ello. Hoy en día las noticias vuelan con esto de las redes sociales —coge aire antes de lanzar la pregunta—. ¿Dónde estabais en el momento del incidente?

—Yo estaba en la universidad porque mi hermana necesitaba ayuda con sus cosas para dejarlas en su habitación —cuenta la morena—. Me quedé con ella hasta tarde y le empezó a dar un ataque de asma. Las dos estuvimos buscando su inhalador por todas partes pero no lo encontramos, así que salí de la residencia para ir al coche y buscarlo ahí.

—Yo estuve en una fiesta con unos nuevos conocidos en la planta de los chicos—. Bridgett se contiene de decir nombres para no delatar a nadie—. Cuando la cosa estaba en su auge, me vi obligada a escapar por la ventana cuando el recepcionista cara de mocho se presentó para cortarnos el rollo.

—¿Y después qué? —pregunta Kincaid muy seriamente pero realmente interesado en su historia.

El acompañante a su lado apunta toda la información con la mayor rapidez posible. Sam lo observa como si se tratara de un viejo conocido. Si no fuera por la memoria de su padre, se atrevería a decir que Billy Loomis está ahora mismo vivo y junto a ellas.

—Observé cómo Sam tenía una confrontación con Ivar y Ava, los hijos del tío de recepción. La cosa pintaba interesante pero una vez acabó la cosa tenía cosas que hacer.

—¿Qué clase de cosas? —interviene Billy 2.0

—Oye, ¿qué pasa? ¿Voy a ser la única interrogada aquí? —responde Bridgett de mala leche.

El detective siente que es mejor no seguir presionando, pues cree que no va a obtener nada. Si por él fuera, seguiría todos los datos de cerca. Kincaid y Killiam se dedican una mirada interrogativa, como si se estuvieran preguntando telepáticamente cómo seguir con la conversación. A ambos les interesa mucho esa historia de Bridgett, la fiesta de anoche y su escapada por la ventana. No obstante, también tienen presente que no pueden dejar a Sam al margen y centrarse solo en la albina.

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⏰ Última actualización: Feb 10 ⏰

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