‹The Reason Is You› [Guapoduo]

Capítulo 7

×All the demons cry 'cause you and I found love in a broken place×

✧*Kingdom Come – Demi Lovato*✧

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Después de algunas horas en las que los chicos estuvieron nadando y disfrutando de la piscina, decidieron salir e ir por toallas y ropa a alguna habitación. Roier conocía ya la casa de Vegetta y sabía dónde podía conseguirlas.

Así que tomó la mano de Cellbit para no perderlo entre toda la gente y lo guió al segundo piso de la casa, a una de las tantas habitaciones para las visitas.

Enseguida Roier se quitó su playera, quedando con el pecho descubierto y tomó dos toallas del armario.

—toma, sécate— le dijo a Cellbit dándole una de las toallas.

El brasileño pasó saliva y la tomó, apartando rápidamente la mirada del cuerpo semidesnudo del chico frente a él.

—eh yo... Olvidé una cosa abajo, tengo que ir por ella, ya vuelvo— dijo muy rápido y antes de que Roier pudiera preguntar algo, Cellbit ya había salido de la habitación.

El castaño no pudo evitar reír por lo que acababa de suceder. Pero ese momento de felicidad fue interrumpido a los pocos minutos, cuando la puerta volvió a abrirse y no era el brasileño quien había vuelto a entrar.

—¿Qué pedo wey? ¿Qué haces aquí?— dijo Roier a la vez que se ponía una playera seca que también había tomado del armario —¿Pasó algo?—

—estaba pensando...— empezó a hablar —tal vez podemos seguir viéndonos a escondidas ¿No?—

—¿Qué?— dijo Roier bastante confundido —neta que estás mal, Quackity, déjate de bromas, pensé que ya habíamos terminado con eso—

—esta vez no estoy bromeando— dijo el pelinegro acercándose un poco a él —te necesito de vuelta conmigo, Roier—

—¿Qué verga?— Roier soltó una risa —me vale madres lo que tú necesites, wey, ahora mismo solo me preocupo por mi y por mi estabilidad emocional—

—¿No extrañas estar conmigo?—

—la neta que no, wey, estar contigo y con Foolish a escondidas no me hacía bien— le dijo —además, ¿No se supone que estabas intentando algo con Luzu?—

—eso no impide que aún podamos vernos— dijo tomando su mano, pero Roier enseguida intentó soltarse de su agarre —nadie tiene porque enterarse—

—quiero estar con alguien que me ame, Quackity y no que solo sea algo pasajero—

El pelinegro se acercó muy precipitadamente al castaño y lo besó. Al momento en qué sus labios chocaron, Roier intentó empujarlo, pero Quackity lo tomó de los hombros y lo pegó a la pared.

—¡Ya sueltame, wey!— le gritó Roier aún batallando para apartar al chico del gorrito de él.

De pronto alguien le quitó al chico por la fuerza, tirándolo hacia la cama.

—¿Acaso no escuchaste, filho da puta?— le dijo Cellbit bastante molesto, Roier pudo distinguir un ligero cambio en su voz —no te le acerques, imbecil—

—¿Solo porque tu me lo dices?— dijo Quackity burlándose mientras se levantaba de la cama, quedando frente a Cellbit —¿Es una amenaza? ¿Qué harás si no lo hago?—

Cellbit soltó un risa, una que le dió un escalofrío a Roier.

—no tienes idea de lo miserable que puedo hacer tu vida— dijo acercándose aún más al pelinegro —no me conoces, queridinho, no sabes de lo que soy capaz—