Capítulo 17

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Así que esa fue la razón por la que Hwang Hyunjin se mantuvo desaparecido. Había viajado hasta Corea solo para decirle eso; para confesarse y pedirle de rodillas que no se fuera con el idiota de Lee Minho.

Todavía abajo de la lluvia, con las palabras recién sueltas, Felix lo mira con un puchero en sus labios, a nada de partir en llanto y simplemente no contesta. ¿Qué acaso no es esta la parte en la que también le dice que lo ama y viven felices para siempre o solo es la realidad distorsionada de Hyunjin por no comer bien estos últimos días?

—Estúpido.

Murmuró con su voz rota. Definitivamente, eso no se lo esperaba.

Felix se acercó a él, comenzando a golpearlo. Hyunjin lo miraba sorprendido, pensando que era un tonto por meterse abajo de la lluvia también.

—Eres tan estúpido —sollozó, golpeando su pecho—. ¿Sabías que no dormí por tu culpa? ¿Que he estado llorando demasiado por ti, estúpido? Eres tan... Hyunjin, eres tan estúpido y te amo incluso siendo así —se quejó, empujándolo.

El rubio sonrió, con sus ojos llenándose de lágrimas. Ya los dos estaban abajo de la lluvia, en medio de la entrada de la casa, obviamente iban a enfermarse así que le importó poco. Tomó las muñecas de Felix y cuando se encontró con su bonita mirada, esa de la que se había enamorado tanto, simplemente se inclinó un poco y lo besó.

Sí, eso es amor. Ese es el amor que él buscaba encontrar y hacer.

¿Viajar de un país para el otro solo para confesarte en su puerta? Hyunjin piensa que no hay que pedir menos.

Felix corresponde entre llanto, soltándose de él para pasar sus brazos por detrás de su cuello y pegarse a él, robándole una risa tonta al rubio, que llora porque es el más emocional de los dos.

Y no es el típico beso de película tierno, es algo rudo y necesitado. Felix es bruto en sí, así que lo besa con fuerza, tomando su nuca. Hyunjin se deja hacer, es débil después de todo.

Y cuando se separan, él tiene que hacer algún comentario para salvar la situación.

—¿Eso significa que tú también lo estás?

Felix solo se queda sin paciencia y lo golpea en el hombro, lloroso.

—¡Claro que sí!

—¿Pero me amas a mí o a mi yo ídolo?

Pregunta con un tono divertido para no incomodarlo. Felix lo mira y niega.

—Amo a todas tus versiones. ¡Y-y quiero conocer todas y cada una de ellas!

Hyunjin suelta una risa enternecido y asiente, tomando su cintura y atrayéndolo para besarlo. Esta vez, sí es el típico beso de película. Hyunjin es dulce con él y deja que Felix se relaje, temblando del frío.

—¿Podemos entrar?

Felix asiente, soltándose de él y haciendo una mueca ante tanta lluvia. Usualmente suele llover de manera torrencial y la noche en la que Hyunjin decidió confesarse, fue la que más llovió.

—No, espera...

Murmura divertido, tomándose el atrevimiento de cargarlo. Felix suelta una carcajada, enrollando sus brazos en su cuello con el temor de caerse.

Y claro que lo hacen si Hyunjin, en vez de concentrarse en dónde pisar, deja un beso en su mejilla.

Inútilmente pisa un charco de barro y se resbala, cayendo con el castaño. Felix grita y luego rompe en carcajadas, observando al rubio con una mueca sentado.

Y Hyunjin termina riendo porque la risa del chico es contagiosa.

—¡Nos vamos a enfermar! —dice levantando su cabello de su rostro. Felix sigue riendo.

Haven't Met You Yet | Hyunlix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora