Capítulo 22

629 90 14
                                    

—¡Felix!

Olivia gritó corriendo hacia él. El rubio la recibió en sus brazos, sonriendo entre lágrimas. No lloraría frente a ella pero estaba costando.

—¡Te extrañé, mierda!

Exclamó la mujer. Abrazándola, Felix notó que su madre, Rachel y el novio de Olivia lo miraban.

—Sí que cambiaron las cosas... —murmuró alejándose. Ella asintió—. Creciste.

—Solo pasaron seis meses.

—Fue una eternidad.

Su sonrisa es triste. Pareciera que su familia, excepto su madre, no lo notan.

Hyunjin bufó, dejando caer su lapiz sobre el escritorio. Pudo ver por el ventanal frente a él que estaba demasiado oscuro, ya era de noche. Y aún así, no podía escribir nada que no fuera sobre Felix.

Definitivamente todo era una mierda. No valía la pena hacer algo si no tenía al rubio con él. ¡Y no quería conformarse! No sería feliz con nadie más, pero tampoco podía ir a buscarlo por más que quisiera. Hyunjin mantendría la distancia, rogando porque Felix regrese a él. Era un poco tonto.

Bajó la vista a su cuaderno. Lo que empezaron siendo palabras sobre Felix, terminaron siendo garabatos de él. ¿Era normal? No podía hacer nada sin relacionarlo. Todo era peor así.

—¿Y si lo llamo...?

Murmuró observando su teléfono al lado de su botella.

—No. No debo... Él... él eligió su vida, Hyunjin —se quejó, tirando de su cabello—. ¿Por qué no sale de mi cabeza? Lo odio...

Hizo una mueca y negó.

—No, no lo odio. Lo amo. Qué molesto.

Solo quería que volviera.

—¿Está todo bien?

Sus hermanas lo llevaron por todos lados en su regreso a Australia, tratándolo como si fuera un turista. Solo que una semana después, cuando por fin pudo estar solo, su madre decidió acercarse. Se sentó frente a él y Felix supo que una charla de hace tiempo regresaría: Lina no era idiota, había notado la clara mirada triste de su hijo. Algo había pasado.

—¿Por qué lo dices?

—Hijo, tienes el rostro hinchado, los ojos también. Y no has dicho ni una sola palabra sobre Hyunjin desde que estás aquí.

Eso fue suficiente para que se rompiera. Automáticamente Felix partió en llanto, sollozando con fuerza y sorprendiéndose a sí mismo. ¿Tanto había aguantado?

Lina suspiró, observándolo desde el otro lado de la mesa con tristeza.

—¿Qué pasó, bebé?

—Él... É-él pasó —se quejó sintiendo su madre tomar su mano—. Nos peleamos y terminamos antes de que volviera.

—¿Por qué?

—Se enojó porque regresé a Australia —tiró de su cabello llorando como un niño—. Y-yo le dije que no las dejaría solas, mamá. Y él se molestó porque le dije que si me quería tanto, que viniera él y-

—¿Dejaste a Hyunjin por nosotras, Felix?

Interrumpió confundida. El rubio alzó la mirada destruida y asintió.

—Cariño... cielos, no —Se levantó, yendo rápidamente a su lado—. No debiste dejarlo por eso.

—No quiero que estén solas aquí —sollozó tirándose a sus brazos. Lina negó acunándolo—. No quiero dejarlas. No-

Haven't Met You Yet | Hyunlix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora