Capítulo Cinco

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Neteyam estaba siendo innecesariamente cruel.

Han pasado días desde que hablaron y no ha vuelto a contactar a Ao'nung, lo que solo ha generado más suspenso en torno al misterioso favor que le pediría. Lógicamente, eso significaba que Ao'nung no había podido relajarse desde entonces. Ha tenido a Neteyam Sully dando vueltas en su mente durante horas, más que su última pareja.

Si estas no son las consecuencias de mis propias acciones... Ao'nung podía admitir que lo había arruinado. Y mucho.

El único momento en el que pudo escapar de sus pensamientos perturbadores fue durante la práctica de natación, como de costumbre. Pero incluso eso no duraría porque cuando Ao'nung no estaba pensando en Neteyam, el hijo mayor de los Sully simplemente tenía que hacer acto de presencia, ¿no?

Estaban haciendo relevos cuando el na'vi del bosque entró en el edificio. Como es habitual, Ao'nung hizo relevos con Eko, Rotxo y Tingal, en ese orden. Rotxo era el más lento entre los cuatro (apenas), y Ao'nung el más rápido, así que él tenía que ser el último. El entrenador los estaba cronometrando, y cuando Ao'nung levantó la cabeza por encima del agua mientras su mano encontraba la pared, abrió los ojos y vio a Neteyam parado en el borde de la piscina.

"¿Y ahora qué?" Ao'nung preguntó con impaciencia. Los muros que siempre ha mantenido a su alrededor se levantaron rápidamente, demasiado rápido para poder fingir que no se había sorprendido. Que lo demandaran porque le desagradaba que lo tomaran con la guardia baja.

Además, Neteyam estaba sonriendo ampliamente mientras lo miraba y, a estas alturas, Ao'nung sabía que no era una buena señal. Neteyam podía engañar a cualquiera para que pensaran que solo era alguien con una inocente sed de ambición, pero Ao'nung ya había visto lo peligroso que podía ser cuando pensaba que estaba justificado.

Los ojos dorados de Neteyam brillaron, y si Ao'nung no lo conociera, estaría un poco más distraído por lo bonitos que se veían cuando se concentraban únicamente en él. "¿Qué días tienes libre, capitán?"

El hecho de que le gustara llamar a Ao'nung burlonamente por su título todavía le molestaba, por lo que fue suficiente para que este decidiera que no le gustaba levantar la vista para mirar a Neteyam. Salió de la piscina con un movimiento rápido, goteando de pies a cabeza y haciendo que Neteyam finalmente diera un paso atrás, con su sonrisa orgullosa todavía intacta.

"¿Entonces? ¿Cuándo estás disponible?"

"Supongo que esto es sobre nuestro acuerdo, ¿no es así?"

"Ciertamente, qué inteligente de tu parte recordarlo", se burló Neteyam.

"Iré directo al grano para no perder el tiempo. Uno de estos días iré a la playa con mis hermanos y quiero que Tsireya y tú estén allí. Podemos 'encontrarnos'", hizo comillas con los dedos, "y darle a ella y a Lo'ak tiempo para arreglar las cosas. Por eso necesito saber tu horario de la semana".

¿Él quería qué? "¿Quieres que voluntariamente pase tiempo contigo y tus hermanos? ¿Estás seguro de que es un buen plan?"

Porque, como Ao'nung lo veía, eso solo garantizaría un mal momento para los involucrados. Sin mencionar que siempre existía posibilidad de tener otra pelea. No se pondría a un puñado de criaturas acostumbradas a destrozarse unas a otras en el mismo lugar y se pensaría que daría resultados diferentes a los que han dado una y otra vez.

"Ao'nung, sin ofender, pero tu opinión en esto no me importa. Solo te estoy diciendo el plan, pero ya lo he decidido".

"Sí, pero ella no va a creerlo. ¿Por qué querría pasar mi tiempo libre contigo?"

Like stars in the night | Ao'nung x NeteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora