Capítulo #7

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Pasado más de una semana desde que entraron a la escuela, a los hermanos les iba relativamente bien, en especial a Cobalto, él al ser muy inteligente, su maestro le agarró especial cariño, convirtiéndose en su alumno favorito, pero siempre tratando de no hacerlo notar, para que los demás no le digan algo o le reclamen al respecto.

Durante la hora de clase...

Jantar: joven Phoenix, quiero hablar con usted afuera. —va hacia la puerta—

Cobalto: emm, si, claro. —se levanta de su asiento—

???: ojalá lo expulsen.

??: o que lo castiguen, jajaja.

Afuera del salón...

Jantar: Cobalto, llevas poco tiempo en esta escuela, y sinceramente eres de los mejores alumnos que he tenido en todos mis años de enseñanza. —sonríe— y quisiera proponerte algo.

Cobalto: oh, claro, dígame qué es...

Jantar:quisiera que seas el representante del grupo, haz mostrado ser alguien trabajador y responsable.

Cobalto: wow...¿yo como representante de grupo?, mm, no lo sé, déjeme pensar... —piensa por un segundo— ¡claro que si!. —da unos saltitos de emoción— le prometo que no voy a decepcionarlo.

Jantar: je, sé que me vas a enorgullecer como tu maestro. —abre la puerta del salón— ahora volvamos.

Cobalto: si, si, vamos. —vuelve a entrar—

Jantar: —igual entra— chicos, continuemos con la lección de hoy, pongan mucha atención, porque esto estará en el examen del final del semestre.

Las horas pasaron, y llegó el descanso, cuatro de los cinco hermanos se reunieron en donde siempre, el único que faltaba era Honey, lo esperaban pero al pasar los minutos y ver que no llegaba, empezaron a preocuparse.

Obsidian: ya debería haber salido, ¿lo habrán castigado?.

Cobalto: no tengo idea, vayamos a buscarlo.

Fueron al salón de Honey, adentro ya no había nadie, eso hizo que su preocupación incremente aún más. Caminaban por los pasillos, buscándolo en cada salón, llamándolo, pero no había ninguna respuesta.

Olivo: ok, ahora si ya me preocupa...

Moka: si está jugando al escondite, pues es bastante bueno, ¡Honey!, ¡el juego acabó!. —grita algo con la esperanza de que el mencionado lo escuche—

Aqua y Ocre iban entrando a la zona de los salones, ambas sonreían de una forma burlona mientras se acercaban a los cuatro hermanos.

Ocre: hey niños, creo que la bodega del conserje necesita una limpieza~

Aqua: si, tal vez encuentren algo que les pertenece~

Cobalto: ay no, ¡vamos!.

Corriendo hacia la salida, Aqua logró sostener del brazo a Obsidian, azotandolo contra los casilleros.

Obsidian: tch, ustedes vayan, me encargaré de esto.

Los demás se fueron...

Aqua: pero qué tenemos aquí, al chico nuevo, ¿qué se siente estar ciego?.

Obsidian: no estoy ciego, tarada. —le da un empujón—

Ocre: ¿entonces por qué usas esos feos lentes?, no debe ser por otra razón.

Las etapas del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora