anónimamente tuyo | geminifourth

04

Anoche quise anular mi participación en el viaje, e incluso estuve a punto de no ir, pero Phuwin me presionó y me amenazó con golpearme si no asistía. Aunque vine un poco forzado, debo decir que ahora que estoy aquí, no parece que nada de lo que imaginé anoche vaya a suceder. En lugar de sentirme incómodo y enojado como pensaba, me encuentro tranquilo y todo parece normal.

Las mochilas de todos, con la ropa, productos y cosas necesarias para los cuatro días allí, ya estaban en el camión. Solo faltaba que Milk y su amiga llegaran, y que el entrenador nos diera luz verde para entrar. Éramos doce estudiantes en total, y para estar al tanto, estarían el entrenador, el director y una profesora que se ofreció a acompañarnos también.

Al fin, el entrenador se acercó y nos reunió para asignar los grupos. Nos organizó en parejas, que viajarían juntas en el camión tanto en la ida como en la vuelta y compartirían habitación. Según el profesor, las cabañas son pequeñas pero acogedoras y funcionales.

Espero llevarme bien con mi compañero de viaje, prefiero evitar a personas como Winny, que resulta insoportable, o como Dunk y Gemini, que son arrogantes. Creo que estaré cómodo con Pond, a pesar de su mal genio, o también con Mark, que es un poco más amigable que los demás.

Después, no me importa sentarme con ninguno de los chicos de mi grupo. Aunque Phuwin ronca y Ford vomita, no quiero terminar babeado o, peor aún, con vómito.

──Joong va con Dunk, Gemini con Winny, Phuwin con Pond, Mark con Ford y Satang con Fourth ──anunció el entrenador, y sentí alivio al escuchar que estaría con Satang.

──Entrenador ──escuché la voz de Ford y lo miré──. Se supone que el viaje es para conocernos, y no es por nada, pero Gemini y Fourth, junto con Winny y Satang, son los que peor se llevan. ¿No cree que sería justo ponerlos juntos?

Resoplé al oír a Ford quejarse, mientras él echaba un vistazo a Gemini y Satang, quienes miraban en direcciones opuestas, evitando cruzar miradas con nosotros. Estaban tranquilos, a diferencia de Winny y yo, cuyas expresiones reflejaban claramente nuestra incomodidad.

──Ford tiene razón, ¿no estamos aquí para conocernos? ──interrumpió Satang.

──¿A ti te importa? Si estás conmigo, idiota ──me quejé.

Satang me miró con un gesto de disculpa, pero luego se giró hacia el entrenador sin prestarme atención. El entrenador nos observó a todos y hizo un gesto con las manos visiblemente agobiado.

──Está bien, aquí no mando yo ──se quejó el entrenador──. Winny y Satang, está bien. Demonios, suban al auto, malcriados.

El entrenador se fue y todos subieron al camión con sus parejas. Pero a mí me habían asignado con Satang, y si lo cambian, ¿con quién debería ir ahora? Podría esperar a Milk y ir con ella.

Miré a mi derecha, donde estaba Gemini, sin moverse. Fruncí el ceño al ver que no apartaba la mirada de mí, y en cambio, señalaba discretamente hacia el camión.

──¿Qué me miras? ──dije de mal humor, y Gemini rodó los ojos.

──Estamos juntos ──respondió con obviedad en su tono de voz.

──¿Juntos de que? Si el entrenador no nos mencionó juntos.

──¿No es obvio? ¡Cambió los grupos! ──chilló sin paciencia.

Crucé los brazos y me erguí. No me subiré al auto con Gemini, esperaré a Milk. Y si llega con una chica guapa, sería un favor para Gemini sentarse con ella de todos modos. No es el fin del mundo esperar a que lleguen.