||Maldito y sensual otaku|| 💮

Capítulo 26

⚠️Contenido +18⚠️

-¡Mierda!

Rubén rio al notar como Samuel gruñía por lo bajo al chocar con la puerta de su habitación. El beso había escalado demasiado, por lo que ahora caminaban apurados hacia la cama del chico

-¿Te dolió?

-No, estoy bien

Los besos de Sam bajaron de sus labios a su cuello, levantando la polera del contrario y acariciando su piel con sus dedos. El pelinegro ya no tenía la parte de arriba, por lo que Rub aprovechaba en pasar sus manos por su pecho y abdominales.

Chocó con la cama perdiendo el equilibrio y cayendo en ella soltando una risa por lo brusco que fue. Sam también le sonrió acercándose suavemente y dejando varios besos en su cara.

-Te quiero- susurro sobre sus labios

-Yo también te quiero- Rub tomo su rostro para alejarlo- Y quiero hacer el amor contigo

-No tienes que pedirlo dos veces

Sam volvió a unir sus labios, levanto la polera sacándosela para dejar su pecho libre y comenzar a besarlo. Rubius aprovecho en desabrochar el pantalón del contrario, rozando sus dedos provocativamente en su erección y causando algunos jadeos.

Tuvo que morderse los labios para no gemir al escuchar como Samuel maldecía en su oído cuando saco su miembro de sus pantalones y comenzó a mover su mano de arriba a abajo. Los jadeos de Sam eran adictivos para él, tanto que aumento la velocidad solo para escucharlos más fuertes.

Pero el pelinegro también quería escucharlo gemir, por lo que se apartó solo por un momento, desnudando al contrario y acariciando sus muslos y entrada. Rubén se contrajo cuando lo sintió tan cerca de él, pero aun así no quito la mirada de los ojos llenos de deseo que tenía Samuel

-Sam...¡Joder!- apretó las sábanas al sentir el primer dedo introducirse en él- Mmm...sigue

-¿Otro?- comenzó a besar su cuello, susurrando con voz ronca cerca de él

-Si por favor

Sam lo obedeció introduciendo otro dedo dentro de él y comenzando a moverlos. Rubén gimió fuerte al sentirlo moverse tan rápido y solo se dedicó a clavar las uñas en la espalda de Samuel mientras disfrutaba la sensación.

-Joder...si sigues haciendo esos ruidos no me voy a contener

-Para...¡Para!- Sam le hizo caso alejándose de un agitado Rub

-¿Qué pasa?

-La primera vez que lo hicimos me hiciste venir dos veces, está vez me toca a mi

-¿De qué...- Sam sintió como le dio la vuelta quedando con la espalda pegada a la cama- Oh, ya entiendo

-Cállate

Rubén comenzó a besar su cuello bajando por su pecho y deteniéndose unos minutos en sus pezones para jugar con ellos. Sam tiro la cabeza para atrás disfrutando la sensación, esperando que llegara a esa zona que ahora mismo pedía atención.

El castaño sonrió antes de darle una primera lamida, convirtiendo esa en otra y otra, hasta el punto que lamer toda su longitud y luego chupar la punta se convirtió en su único trabajo. Sam estaba en la gloria sintiendo como el chico lamía todo su miembro y como parecía disfrutarlo.

Movió su mano de arriba a abajo haciendo un vaivén que luego acompaño con su boca, logrando un ritmo perfecto en donde metía todo el miembro del pelinegro a su boca mientras también acariciaba desde la base hasta la punta con su mano. Cuando sintió a Sam jadear y contraer sus muslos sonrió aumentando el movimiento hasta que se vino en su boca.

-Oh joder- no pudo reaccionar antes de tener a Rubén posicionándose sobre él- Espera, espera, te vas a hacer daño

-Ya estoy listo- se agachó dejando un beso en sus labios- No te preocupes

-Es que...

-Sam, cállate y follame

El pelinegro sonrió tomando las caderas de Rubén para bajarlas de golpe y entrar por completo en él. Los dos jadearon a la par, comenzando a mover sus caderas para sentirse más profundo.

Sam se impulsó para dejar a Rubius en la cama, pero sin que sus caderas tocaran el colchón y aumento lo movimientos hasta el punto que el sonido de sus cuerpos chocando se podía escuchar en la habitación. Enrollo sus piernas alrededor de él, mientras sus manos buscaban un lugar donde aferrarse

-¡Mierda! ¡Mierda! - Rubén mordió su labio al sentir como chocaba con ese punto dentro de él- ¡Justo ahí! ¡Oh sí, ahí!

Siguió penetrándolo fuerte ganándose desde gritos pidiendo más hasta gemidos incomprensibles que a Sam le encantaban. Rubén parecía completamente ido disfrutando del placer y moviendo sus caderas.

-¡Sam!

-Un poco más...aguanta un poco más

-¡No puedo! ¡Joder! ¡Me vengo!

Las piernas del chico temblaron antes de venirse justo en su estómago manchando un poco el de Samuel que se seguía moviendo dentro de él. Le gustaba esa imagen de Rubén luego de venirse, por lo que solo tuvo que penetrarlo tres veces más antes de acabar dentro de él

Dejo caer su cuerpo en el pecho del contrario con cuidado de no aplastarlo, recibiendo las caricias cansadas de Rubén en su cabello. Eso le relajaba por lo que cerró los ojos regulando su respiración

-Fue increíble

-Como la primera vez

-Técnicamente cómo las primeras tres veces- Sam rio sin abrir los ojos

-Es que eres insaciable

-Tu demasiado deseable- Rub soltó una risita acariciando sus cabellos

-No te vayas está vez

-No lo haré

-Ni tampoco te arrepientas

-Nunca me arrepentí- levanto su cabeza mirándolo- Tenía miedo de dañarte

-¿Dañarme?

-No podía darte lo que te merecías, lo que querías

-¿Y por eso me dijiste que fue un error?- el pelinegro asintió- Eres un idiota De Luque

-Lo sé

-Pero así idiota, te quiero- dejo un beso en sus labios- Y ahora que estamos juntos no dejaré que nadie te haga daño

-Ni a ti-Sam dejo un beso en su pecho- Te quiero

-No vuelvas a alejarme ¿entendido? Estoy para ti en lo que sea, siempre- Sam le sonrió antes de impulsarse y dejar varios besos en su cara y cuello- ¡Para!

-Eres lo mejor que me ha pasado en la vida Rubén Doblas- susurro en su oído- Lo mejor

Se separaron mirándose directamente a los ojos y sonriéndole levemente antes de juntar sus labios. Rubén enrollo sus brazos alrededor del cuello del chico, mientras Sam pasaba las manos por su cintura, listo para posicionarlo para una segunda ronda