PROFUGOS

iniciando proyecto final

Un hombre tosía en una cama, logro ver por su ventana, un gato tricolor – volviste a venir

- Miau – respondió el gato

- ¿tú sabes dónde están mis pequeños? – pregunto al gato. Este lamio sus orejas – extraño al más pequeño. Su nombre es Atsushi, seguramente te cuidaría bien y a Ranpo con sus dulces y trayéndome té, Osamu y sus ruidos y Akiko con sus diagnósticos... los extraño

Osamu, Akiko, Ranpo y Atsushi tenían una reunión importante en su hogar – Ahora que Atsushi-kun se ha recuperado, debemos dar el último golpe. Hay que regresar con papá – dijo Osamu

- Atsushi todavía no puede correr o hacer sus piruetas, ¿sabes lo que eso implica?

- Puedo hacerlo Akiko, no quiero que nos retrasemos más, quiero ver a papá

- Esta dicho – anuncio Ranpo – será mejor que comencemos la planeación. Se despiden de sus no novios y nos apuramos a irnos

- Lo dice el que salió con Edgar la otra noche

- No salí, me acompaño a la dulcería porque si no me pierdo

- Vamos Ranpo – dijo Akiko – te gusta ese detective

- Es lo peor que nos ha pasado, no solo casi nos atrapan – menciono Osamu – nos enamoramos de detectives

Los tres chicos suspiraron, Akiko lo sabía, debía ayudar a sus hermanos.

Esa tarde, Akiko estaba en la clínica, había escuchado sobre un hombre rico que guardaría parte de su fortuna en un banco próximamente, era un excelente momento, robarle lo que iba a guardar y simplemente enviarlo al banco fuera del país. La doctora puso algo de atención mientras llenaba su registro en la recepción, se acerco un joven chico, - hola disculpe – le dijo a Akiko

- Si ¿dime?

- ¿será que me lo puedo llevar o estará hospitalizado?

El chico de cabellos anaranjados ciertamente se veía ansioso, Akiko lo miro un poco más, su camisa estaba algo desarreglada y tenía rastros de timidez o más bien miedo – podrá irse, pero si tu necesitas algo

- No, yo

- Tanizaki – hablo aquel hombre rico – vámonos, me dieron el alta

- S-si

Akiko sonrió, ahora podía realizar el robo sin remordimientos.

Akiko uso sus contactos, es decir, el amigo de Ranpo, Mushitaro. Siempre sabia a quien contactar sin dejar rastro alguno, recibía su paga siempre por sus servicios y al final del día, era amigo de Ranpo así que la lealtad era parte de todo. Akiko fue a la cafetería esa tarde, Atsushi atendía a unos clientes, así que fue directo a la cocina – heey Akiko

- Hola Osamu, sabes, tengo nuestro ultimo golpe antes de volver con papa

- ¿en verdad? Te escucho.

Akiko y Osamu platicaron por un buen rato, Atsushi y Ranpo vieron a Chuuya y Edgar aparecer en la cafetería mientras – Hola Atsushi – saludo Chuuya - ¿esta tu lindo hermano?

Atsushi le sonrió como si de una travesura se tratará - ¿cuñito quieres saber de mi hermano? – pregunto, pero Chuuya solo se puso totalmente rojo

- Oye niño, respeta a las autoridades – se quejo haciendo a Atsushi reír más