Enamorada de un Psicópata

Capítulo 4

Victoria

Salí del hospital lo más rápido posible, tuve suficiente por el día de hoy.

Escuché unos pasos que venían detrás de mi, pero decidí ignorarlos.
Salí a tomar un taxi y este paró, cuando voltee para ver quien me seguía, ahí estaba él, sonriéndome y despidiéndose de mi.
No devolví el gesto y sólo me subí y le dije mi dirección al chofer.
Tras unos momentos de relajación comencé a sentir un escalofrío recorrer mi cuerpo tras recordar el contacto de su piel con la mía, el sonido de su voz tan penetrante.
Abrí mis ojos y vi que ya estábamos cerca de casa. Miré el reloj y eran las 18:00. Pedí al chofer que parará y cancele la deuda.

Caminé a casa y todos los momentos de la consulta venían a mi cabeza.

-Victoria-dijo mi madre en forma de saludo
-Hola-dije casi para mi
-¿Todo bien?-preguntó preocupada
-Sí, sólo estoy cansada-dije sin ánimos
-Ya casi cenaremos. Prepárate para cenar
-¿Qué es lo que pasa?
-Tú padre quiere hablar con todos

No dije nada y me subí a mi habitación. Me senté un momento en mi cama y analicé la situación. ¿De qué quiere hablar? Esto pasa en cuestiones de mucha importancia, esto no puede ser bueno.

Deje de pensar en eso y me metí a la ducha, cuando me meto en ella, dejo caer el agua caliente, esto ayuda a relajar mis músculos.
Cerré mis ojos y solo escuché "Vamos Vic"

-Fuera-susurré
-Vamos Vic-lo oí más fuerte
-Fuera-dije más alto

Pero era inútil, cada vez su voz inundaba la habitación y eran gritos muy fuertes y me empezaron a doler los oídos y abrí los ojos de golpe y grite...

-¡FUERA!

Con ese último grito todo el ruido desapareció, me senté en el piso y comencé a llorar, el agua seguía corriendo y yo estaba tirada llorando...

Me paré para cerrar la llave, apoye mis brazos en el suelo para ayudarme a levantar, era inútil.
Mis piernas no reaccionaban así que las revise y tenía un gran moretón; justo donde el me había tocado y comencé a gritar.

Sentí como mi voz se iba apagando poco a poco. Comencé a gritar más pero la voz no me salía. Comencé a pegar a la puerta de la regadera pero no pasaba nada, mis manos eran tan delicadas que me dolía de tan solo apoyarlas.

Intenté pararme de nuevo pero no podía y ya no tenía voz. El pánico me invadió y no sabia que hacer.

Intente quitar la puerta pero era inútil, todo lo que hacia era perdida de tiempo. Cerré mis ojos pero sentía como alguien me tocaba y su rostro inundo mis pensamientos.

Grite con más fuerza pero no podía, lo seguí intentando hasta que tosí y salió sangre, demasiada sangre. ¿Qué está pasando? ¿Qué hago?

Comencé a pegar en la puerta hasta que mis manos no pudieron más y caí rendida en un sueño profundo...

......

Abrí mis ojos y estaba en mi cama y mi hermana me estaba observando.

-¿Estas bien?-preguntó preocupada
-¿Qué fue lo que paso?
-Te quedaste dormida en la regadera-dijo viendo mis piernas
-¿Esta grave?
-¿El qué?-dice confundida
-El golpe-dije con el corazón en la garganta
-No tienes nada
-Entonces ¿Qué tanto ves?-dije con más angustia
-Nada en especial. Revisaba que no te hubieses hecho daño.

No sabía que estaba pasando. Todo es tan confuso, todo tan raro.
Quería llorar y gritar
Me revise las piernas y no tenía nada, las comencé a mover y como si nada

-¿Por qué no me ayudaron?
-¡VICTORIA! ¡¿QUÉ TE PASA?! Solo estabas tirada ahí y llame a mamá. Cálmate ¿quieres?

¿Qué me está pasando? Si no me escuchó ¿Por qué entro a la habitación?
Nada de esto es normal. Creo que me afecto demasiado lo que paso hoy... Pero la pregunta es ¿Por qué me está pasando esto?
Jamás me había pasado, en estos 2 años que llevo trabajando, nadie me había puesto así o hecho esta reacción.

Mañana es domingo y descansare y analizaré lo que me pasó.

La noche continuo aburrida. Bueno para mi no, seguía preguntándome que me habrá pasado.

No se me ocurre nada.
Esto no es bueno ¿qué tal si lo soñé?
Bueno eso es una opción ya que dijeron que me encontraron en el baño dormida o ¿me abre desmayado? ¿En verdad paso?
¿Cómo no me escucharon?
Nada de esto es bueno.

El domingo por la mañana me desperté y baje a desayunar y Mel estaba sentada viendo la TV. Ignore a todo mundo ya que sentía todo mi cuerpo diferente, como si no fuera mío.

-¿Victoria?-dijo mi papá sacándome de mis pensamientos
-Papá
-¿Qué es lo que te pasa? Ayer tenía algo muy importante que decirles.
-Nada. Solo que estoy agotada por ayer
-Te lo dije
-¡YA BASTA!-grite y apresuré mi paso

Subí las escaleras y volví a mi cuarto.
Prendí la computadora y puse Netflix. Me puse a ver mis series y así pasó todo mi maldito día.

Mis piernas ya las sentía como antes...

El lunes por la mañana, me paré de la cama y le metí a la bañera. Después de darme un baño rápido me arregle y era 10 para las 11:00 A.M, salí y tome un taxi y le dije la dirección al chofer.

En el camino estaba pensando en comprar un auto. Algún día me quedare sin dinero gracias a los taxis.

Dirijo mi vista al tráfico de siempre. Cuando llegamos bajo y cancelo la deuda y me dirijo a la entrada y me dicen que tengo paciente nuevo y que esta en la sala de espera junto con Charles.