Our Children • MLB, Adrinette (#3 Saga Familia)

Capítulo 26 ( editado )

" —Tú eres la única culpable de esto.

—Si mi hijo no hubiera llegado,
a Étienne le hubiera pasado lo mismo.

—No supiste cuidarlos.

—No sirves para ser madre.

—Contigo nunca estarán seguros.

—Eres una inútil.

—Tú provocaste todo esto.

—No mereces tenerlos a tu lado.

—El hombre que abusó de mi nieta eyaculó dentro de ella y dime, ¿cómo lo va a superar teniendo solo 5 años?

—¡NUNCA VOLVERÁS A VERLOS! "

—Marinette.

Le habla Alya al verla tan callada, ella no piensa decir nada, solo llora sin expresión y estando inmóvil únicamente respirando. Alya la acompaña y cuida en lo que Adrien habla con su padre para intentar exigirle que le devuelve a su hijo y termine con todo esto pero si no accede tendrá que tomar otras medidas en su contra.

Los segundos, los minutos, las horas pasan y Marinette no ha querido comer ni beber nada, a pesar de los intentos de Alya por ofrecerle comida. Todos los rechazó.

—Tienes que estar tranquila, Adrien va a solucionar todo. Pero tienes que ser fuerte
por tus hijos y por ti.

—¿Fuerte?—Pregunta sin verla.
—Ya me cansé de ser fuerte Alya.

Dice con una voz muy baja y que parece débil. Pero Alya no se rinde y continúa intentando hacer que coma, aunque la situación sigue igual hasta que al atardecer Adrien llega y saluda a Alya.
—¿Cómo ha estado todo?

—Marinette no quiso comer nada desde que te fuiste y tampoco tomó nada.

—Gracias por cuidarla Alya.

—¿Y cómo te fue?

—Te lo diré en otro momento, ahora me gustaría hablar con Marinette.

—Está bien, si necesitas algo sabes que puedes hablarme.

—Claro que sí, nos vemos que estés bien.

—Igualmente.

Antes de irse Alya besa la cabeza de Marinette,.

—Te quiero mucho..  adiós Adrien.

—Cuídate Alya.

Una vez que la puerta se cierra Adrien se sienta junto a Marinette mirando su rostro.

A cada palabra que le dice, a cada pregunta que le hace esta se queda sin respuesta. Marinette ya no es la misma, lo que el abuelo de sus hijos está haciendo ha secado la última gota de fuerza y paciencia que le quedaba y aquella noche Marinette no durmió.  A la mañana siguiente Adrien notó ojeras en su rostro y palidez en su piel.

—Amor por favor, necesito que comas algo no puedes pasar tantas horas con el estómago vacío, eso puede dañar tu salud. Aunque sea come un poco ¿Sí?

Adrien le prepara unos waffles lo más rápido posible para que pueda desayunar, los pone en un plato plano y lo deja sobre la mesa frente a Marinette, también le entrega un tenedor y un cuchillo los cuales ella recibe sin ganas y prácticamente por obligación.