VI - Recuerdos

40 5 2
                                    

LUNES 6 AM

 Hunter volvía a despertarse temprano, y otra vez tuvo problemas para dormir.

   Solo que esta vez no era el primero y unico en despertar, como era lunes Luz tenia escuela e iba de mañana.

    La escuela comenzaba a las 7 y le queda a 15 minutos volando, pero como la niña siempre tuvo problemas para levantarse y hace las cosas lento se ve obligada a levantarse mas temprano. Era asi ahora en las islas hirvientes y en el reino humano, por lo que Luz ya estaba acostumbrada (Aunque sigue enojada porque en ninguno de los libros que leyó Azura fue al colegio)

  Cuando Luz estaba cambiada y terminando de desayunar, Eda la esperaba junto a king arriba de owlbert. Entonces la morena aprovechó para agarrar algo de lo que ella desayunó y llevárselo a Hunter.

  -Ya voy Eda, deja que primero voy al baño-

-Ok pero no tardes niña- La dama buho estaba notablemente de mal humor, odia levantarse temprano.

  Aprovechando la distracción, Luz juntò comida rápido para llevársela a Hunter, si este resultaba estar dormido, se la dejaría en un lugar visible con una nota.                                                         Para su sorpresa este estaba despierto, estaba muy concentrado leyendo un libro de magia salvaje viejo de Eda, casi ni notò la presencia de la humana.

    -Buenos días ¿Que lees?- Preguntò emocionada.

   El único problema es que Hunter ya había presenciado ese evento en el pasado, solo que estaban en el cuarto de Hunter y Luz era Belos.

  -¡N- no no hago nada, perdón!-

 Luego de ver la cara de confusión de la humana el niño se calmo y pidió disculpas algo avergonzado. A Luz le estaba incomodando un poco las reacciones repentinas del chico y su curiosidad crecía cada vez mas, pero era obvio que eso le incomodaría a el rubio y no respondería nada, por lo que solo decidió irse.

 - No, yo lo siento... disfruta el desayuno adios-

 Y lo único que quedo en la habitación fue un Hunter solitario pensando.
   
Cuando todos se fueron, Hunter se puso a pensar en lo que acababa de ocurrir con Luz y el recuerdo que tuvo.

  Un par de años atras

El tío de Hunter empieza a enfermarse si no hay taliamigos, pero un oscuro pensamiento rondaba en la cabeza del pequeño Hunter ¿Y si se llegan a acabar?
  Esto perturbada al pequeño, así que preocupado por su tío y con la clara intención de ayudar decide investigar. Era claro que los conocimientos del aquelarre no ayudarían en nada, por lo que decidió que cuando nadie lo viera iría a la biblioteca del pueblo y buscaría un libro de magia salvaje, ya que su tío le contó que de eso estaban hechos los taliamigos.
     Ya en la casa, y con el libro en sus manos, se acomoda en su escritorio para leerlo detalladamente y tomar nota si llega a hacer falta. Su tío le advirtió en repetidas ocaciones que esa magia era peligrosa y acabo con su familia, pero el rubio estaba dispuesto a correr el riesgo para ayudar a su tío. Ya era de noche y detrás de una pila de libros y una mesa desordenada con papeles esparcidos, se encontraba Hunter, quien no quería descansar hasta ayudar a su tío.

   En los pasillos caminaba Belos, cada guardia con el que se le cruzaba lo reverenciaba con respeto. El emperador buscaba a su sobrino, ya que le pareció raro no haberlo visto en toda la tarde.
   Cuando llegó a la habitación de este, no pudo creer la "traición" que presenciaba.

Advertencia: Puede que esto se considere algo fuerte para algunos, por favor discreción

  -¿Hunter, que lees?-

  Al escuchar la voz Hunter se puso tenso y le daba algo de miedo desviar la mirada de los libros y dirigirla hacia la cara enfadada de si tío.

  -Hunter, lo preguntaré otra vez ¿Que carajos lees?- Dijo al mismo tiempo que tomaba del pelo del menor para que este lo vea a la cara.

  -E-es un libro d-de magia salvaje... ¡Pero juro que no es lo que pien-

Antes de que pudiera terminar de explicar ya había recibido un fuerte golpe en la cara de parte de su tío.

  -¡¿¡Cuantas veces debo decir que no te involucres en esos peligros!?!?- Belos parecía cada vez más enojado.

  -¡¡Perdón perdón, solo quería ayudarte!!- Hunter estaba en un rincón de su pieza, sus manos temblaban un poco y tartamudeaba un poco al hablar.

  -¡¿¡¿Crees que esto ayuda?!?!- Luego de esto pasó a agarrar el libro y tirarlo por la ventana

-¡No, no es mío, debo devolverlo!-

  Hunter estaba por dirigirse hacia la ventana pero su tío lo empujó y le dio una patada en la panza que lo termino llevando al piso causando que el niño escupiera un poco. Hunter se quedó mirando como su tío agarraba enojado todos los papeles con sus notas y los tiraba por la ventana al igual que el libro.

  -Esta noche te quedas aquí, más vale pensar sobre todo lo que hiciste... quiero que sepas que esto lo hago por tu bien- Y después cerró fuertemente la puerta causando gran ruido, afortunadamente no había nadie cerca.

  Entonces lo único que quedó en la habitación era un Hunter con unas lágrimas en las mejillas tratando de levantarse.

  Lo único que pensaba el niño era en las últimas palabras del adulto, seguro lo merecía, no tuvo porque leer esas cosas sabiendo que no debía... ¿Verdad?.

  Todo esto pasó antes de conocer a sus amigos, o a Flapjack, no tenía a nadie salvo a Darius, aunque este apenas estaba comenzando a saber del asunto que Hubter tenía con Belos.
Si Hunter hubiera conocido a los chicos del Derby antes, hubiera hablado con ellos, cada que se sentía mal hablaba con ellos (obviamente sin decir que se sentía mal)
  Con quien más se emocionaba al hablar era con la capitana, Willow, ella siempre fue muy amable, aunque al principio Hunter se había comportado algo mal ella le dio otra oportunidad, cosa que este admiró.
    Flapjack siempre lo escuchaba hablar sobre ella
-Es muy amable, y linda y no le da miedo luchar por lo que cree, es una gran capitana y amiga-
   Siempre que escuchaba la última palabra Flapjack hacia una cara de decepción que Hunter nunca entendió.

  Su burbuja de recuerdos explotó cuando recordó que no había nadie en la casa, y el demonio de la casa estaba concentrado en otra cosa, así que aprovechó para bañarse. Fue rápido, así que en un abrir y cerrar de ojos ya salió y se puso ropa que Luz le dijo que había en una caja del sótano.

Querer ser feliz fue un crimen (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora