Unnecesary Therapy ||ChanSoo [Terminada]

19

No era un buen día, Chanyeol se la había permanecido mirando por la ventana contando mentalmente los segundos que pasaban. Hacía un par de días atrás que con Kyungsoo celebraron juntos el cumpleaños del mayor, fue una bonita fiesta en la que los dos fueron los únicos invitados. Y, debía darse créditos por el increíble regalo que le dio a su prometido.

¿Prometido? Era bonito ser llamado de esa manera, pero se le hacía demasiado rápido. Tal vez todo era ocasionado por los recuerdos de sus padres y como su madre se quejaba día tras noche diciendo 'si nos hubiéramos conocido mejor'. ¿Su relación terminaría como la de sus padres? Él no quería eso, y aunque Kyungsoo le mostraba con pequeños detalles lo feliz que le hacía no dejaba de sentirse inseguro.

Estar solo le daba el tiempo suficiente para imaginarse escenarios catastróficos en los que al llegar de un viaje de negocios Kyungsoo le abandonaba o que al quitarle la corbata notaría marcas de chupones. ¿Cabello de mujer? Ni siquiera sabía si su ahora prometido era gay, bisexual o simplemente él era un capricho. Estaba inseguro, lo sabía. Sabía que estaba haciendo un retroceso en su mejoría, pero así es la vida. Hay subidas, hay bajadas.

Ahora estaba en el fondo, se sentía mal.

—Vivir es doloroso. — Susurró mientras su aliento chocaba con la ventana. — No me gusta vivir. Kyungsoo me va a dejar. Kyungsoo se va cansar de mi pesimismo y se irá con ese amigo del cual pasa hablando, ¿cómo se llama? Junmyeon. Me dejará por él.

Las manos de Chanyeol limpiaron el inexistente polvo de algún lugar imaginario, se levantó para luego caminar hacia la cocina. Kyungsoo había guardado en un cajón con llave todos los instrumentos filosos, los desinfectantes y líquidos corrosivos también e incluso había una cámara que vigilaba sus movimientos instalado en la sala.

Eso no le enojaba, tenía un largo historial de intentos de suicidio que respaldaba tantas medidas preventivas de Kyungsoo. ¿Odiaba vivir? No del todo, lo que odiaba era a las personas que le hacían sentir miserable y se odiaba por no apreciar lo bonito del mundo. Se odiaba por estar bien un día y al otro no querer dejar ir a Kyungsoo por tener pánico a perderlo.

¿Era amor o codependencia? Él creía que era amor. Amaba la voz de Kyungsoo, su risa, su respiración, como se sentía al ser abrazado o acariciado. Lo amaba tanto que daba miedo. Lo amaba tanto, que al estar solo comprendía que Kyungsoo era su única razón por la cual estar vivo ¿qué pasaría cuando ya no estuviera Kyungsoo?

—Jamás te dejaré. — Repitió Chanyeol las palabras que su prometido le decía cada noche. — Jamás te dejaré porque tú, Park Chanyeol, eres la casualidad más preciosa de mi vida. Te amo.

Sonrió con nostalgia, caminó hasta la nevera sacando un pequeño pastel de chocolate. Cuando tomo la cuchara en su mano y probó el primer bocado le sorprendió notar que en vez de dulce era salado.

—¿Enserio no me dejarás? Porque soy un asco.

"Oh... son mis lágrimas"