Capítulo 6

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Natasha no sabía qué hacer: su plan hasta ahora no estaba funcionando (o por lo menos no lo parecía); pero lo último que haría sería rendirse, por favor, ella es la letal Black Widow, Natasha Romanoff: si se lo proponía lo lograría, sólo que le llevaría un poco más de tiempo de lo esperado.

Pronto se encontró en la terraza de la torre Stark, el lugar dónde ella y Clint se sentaban a comer, conversar, observar las estrellas o sólo estar en un cómodo silencio, mirándose el uno al otro de vez en cuando.

Se recostó y miró hacia las nubes, ideando su siguiente movimiento, cuando escuchó algo mover el aire.

-No quiero escuchar otra vez tu discurso, Steve, déjame sola.

-Siento decepcionarte al no ser quién esperabas, Natasha.- dijo Clint sombrío.

Genial, simplemente genial pensó Natasha mientras rodaba los ojos. Clint caminó hacia ella y se sentó a su lado como tantas otras veces lo había hecho, sólo que ahora era distinto.

Ella seguía ahí recostada y él ahí sentado, sin dirigirse la palabra y por primera vez Natasha no lo soportó más.

Se enderezó violentamente y lo encaró con el ceño fruncido: -¿Me puedes decir cuál es tu maldito problema?

-¿Mi problema? Ninguno, Natasha, no sé por qué piensas que hay un problema.- le respondió con una tranquilidad que sólo la enfureció más.

-¿Es en serio, Barton? ¿Por qué tú y Hill nos tratan como escoria? ¿Por qué no entrenas conmigo? ¿Por qué ya no me llamas Nat o Tasha o uno de tus estúpidos apodos? O mejor aún ¿QUÉ. DEMONIOS. TE. PASA?

-Sí, es en serio. Pregunta número dos, yo no veo en qué sentido y a quienes los tratamos como escoria Hill y yo, según tú. Pregunta número tres, te dije que había quedado con Maria. Pregunta número cuatro, no sé porque eso te molesta: por una vez te hice caso, si son estúpidos no te llamaré más de esa forma. Y finalmente NADA, Natasha, no me pasa NADA.

El enojo en Clint afloró desde la segunda pregunta: no podía creer que Natasha fuera tan cínica, aunque si lo pensaba bien no tenía porque ponerse así, nunca le dijo nada de sus sentimientos pero ella lo sabía de todos modos, todo el mundo lo sabía, incluyendo Steve, por lo que su acto fue considerado traición mayor.

Natasha lo soltó y se levantó por completo.

-Bien ¿sabes qué? ¡Te odio! Odio que seamos compañeros, odio que seamos amigos, odio todo lo que pasó en Budapest, odio que me hayas perdonado, ¡ODIO HABERTE CONOCIDO!

El arquero también se levantó. – ¡Pues yo también te odio! Odio ser tu compañero, odio tu maldita recalibración cognitiva, odio no haber cumplido la misión de Fury, ¡ODIO HABERTE SALVADO! ¡Si tanto odias ser mi amiga bien, no lo seamos más y listo!

-¡De acuerdo!

-¡Bien!

-¡BIEN!

Los dos entraron a la torre casi al mismo tiempo, pues al parecer habían tenido la misma idea de una salida dramática; se miraron el uno al otro y una fugaz ráfaga de arrepentimiento cruzó sus ojos, pero pronto los dos estaban yéndose a su habitación. Sus puertas estaban una al lado de la otra, por lo que cuando llegaron se vieron nuevamente con furia y los dos azotaron la puerta.

Clint se tiró en el sofá mientras que Natasha se aventó en la cama, los dos ahogando sus gritos con una almohada.

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Porque sus peleas deben ser las más fuertes y las más dolorosas UnUr

Bueno ya, y ya sé con la otra historia *no me golpeen* pero es que no he tenido tiempo de nada* #MalditoEstadoDeMéxico

Anyway, ojalá les guste: por favor voten y comenten :D


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