💌↪Fotografías↪📷 ▶Yuzuru Nishimiya y Tú◀

Capítulo 11~Enchanted~

Nota: He arreglado y cambiado algunos datos del capitulo anterior porque no me gusto como lo escribí. Para evitar confusiones, les aconsejo volver a leerlo.

  Es lindo volver a escribir para ustedes. Me ayudarían comentando para saber lo que les va gustando o disgustando de la historia, además de votar dándole estrella a los capítulos, gracias y disfruten <3

Yuzuru

   Desperté por unos leves movimientos de sacudida en mi hombro izquierdo, y supe en ese momento que me había quedado dormida sobre ___ durante quien sabe cuanto. 

   ¿Debería de sentirme avergonzada por aquella acción que había hecho anoche? Las amigas comúnmente son así de cercanas, pero creo que lo nuestro no es igual, nunca se podría igualar por la razón de que yo no solo siento aprecio hacia aquella chica.

   Realmente me importa un carajo la manera en la que debería de sentirme ahora dictada por personas externas. Se que tal vez la manera en la que me estoy encariñando con ___ me podría terminar lastimando, lastimando tanto que con solo imaginarla con otra chica me derrumba, pero ¿debería ya empezar a sobre pensar sobre aquello? Realmente prefiero disfrutar estos momentos, en vez de mancharlos.

—Niñas, despierten—dijo una mujer adulta en un tono bajo para despertarnos de una buena manera.

  Me intente levantar, pero note que algo me lo impedía, y al mirar hacia mi derecha vi como ___ había apoyado su torso contra la pared que teníamos detrás nuestro y a su cabeza la había posado sobre la mía, ¿hay algo mas lindo?

  Levante mi cabeza con suavidad, lo que hizo que ella se despertara de un bostezo.

—Buenos días, Yuzuru

—Buenas noches—le aclare, intentando contener una sonrisa en los labios al ver como claramente enfrente nuestro hay una ventana en las que nos muestra el cielo de color azul marino, señal de que el sol aun no ha salido.

—Hmm, estoy muy dormida—confesó mientras cerraba los ojos y posaba una de sus manos sobre su frente, mientras bajaba la cabeza.

—Lo se, yo también—admití mientras mejoraba mi postura y miraba hacia mis costados para ver como reaccionaban los demás alumnos al tener que despertar en medio de la madrugada para volver a las cabañas y descansar mejor, ya que la tormenta había cesado—.Hmm, nos hubiesen dejado durmiendo

—No lo se, creo que estaremos más cómodas en nuestras calentitas bolsas de dormir, ¿o acaso mi hombro es así de cómodo?—preguntó bromeando, mientras levantaba su cabeza y a la vez dirigía su mirada hacia mí. A lo cual yo solo pude notar la manera en la que mi mano deseaba tomar aquel mechón que ahora estaba tapando una parte de su rostro, y acomodarlo detrás de su oreja.

    Solo me limite a responderle con una sonrisa de labios a su pregunta y desvié la mirada.

[...]

  Fuimos caminando a oscuras hacia las cabañas ya que la luz se había cortado, esto ocasionó varios tropiezos divertidos de los demás al no lograr ver algunos charcos de barro que dejo la fuerte lluvia en aquellos caminos de tierra.

  Una vez que llegamos, todas dejamos nuestros zapatos afuera para no ensuciar adentro, y mientras muchas fueron a hacer fila para el pequeño baño que máximo aguantaba tres personas dentro, ___ y yo fuimos directamente hacia nuestras bolsas de dormir.

  Ella se había acostado mientras yo me quede sentada, con la espalda apoyada en la pared de madera que había detrás nuestro.

  Al parecer estuve enfocada en otros pensamientos durante mucho tiempo, ya que ___ me llamó la atención.

—¿En que tanto piensas?—preguntó mientras me miraba con aquellos brillantes ojos que no importaba si la habitación estuviera oscura, siempre lograría localizarlos.

  Ni en mil años le diría sobre la manera en la que me entristecía la forma en la que ella me había dicho sobre su enamoramiento ante otra chica. Aun que, ¿hubiera dolido más si ella me hubiera dicho que quien le gusta es un chico? Creo que el simple hecho de que ella este enamorada de una persona, me lastima de igual forma.

  Se que no debería de quitar el hecho de que yo podría ser aquella chica de la que ella habló hace unas horas, pero ¿debería de fiarme de aquella forma? No recuerdo que ella me haya dado alguna señal clara, y lo ultimo que quiero es tomar por hecho algo de lo que podría estar equivocada.

—A veces el amor puede llegar a ser muy complejo—le respondí mientras seguía con la mirada hacia el frente.

—¿El amor?—preguntó ella confundida por la manera en la que había metido ese tema sin ningún aviso.

Se quedo callada unos segundos, lo cual me hizo arrepentirme de la manera tan impulsiva que había dicho esas tontas palabras.

—Creo que el amor ya es complejo de por sí—confesó ella mientras se acomodaba mejor en su bolsa de dormir.—He tenido tantos encuentros con ese sentimiento, que he perdido la cuenta—admitió.

—¿Qué? ¿Tantas veces te has enamorado?—pregunte y gire mi cabeza para verla mejor, pero ella anteriormente se había girado hacia la derecha, a lo que solo podía ver su cabello.

—Nooo—dijo ella, riendo un poco

—Tonta, si lo dices de esa manera, das a entender eso—dije aun mirándola, aun que no pudiera encontrar sus ojos con los míos.

—Lo se, pero hay tantos tipos de amor, tantas formas de sentir, ¿puedo decir claramente si me gusta una persona o solo la aprecio mucho? o al contrario, ¿puedo decir que solo quiero a alguien muy cerca mío sin tener que entender que la amo?—dijo ella mientras se giraba hacia mi lado.

—Lo que dices no tiene sentido—le dije mientras mis ojos enloquecían por ver los suyos.

—No lo se—dijo ella mientras cerraba sus parpados—. Lo que si se es que hay varias personas que solo quiero para pasar un rato, pero tú... tú eres diferente. Siento que te he amado desde que te conocí...—dijo sin modularlo bien, pues ya había empezado a caer en un sueño profundo.

  Mis ojos se abrieron un poco, pero luego de unos segundos de continuar mirándola, volví a tener mi expresión neutra. Ella es la persona con la que siempre estaré encantada de haber conocido...

—Pero tal vez nunca me ames como yo lo hago—le respondí, una vez que supe que ella ya no estaba consiente de escucharme.

  Me recosté en mi bolsa de dormir, frente a ella.

  Era reconfortante saber que tenia una amistad tan llena de vida, tenerla a ___ me hacia tan feliz que no podía recordar mi ultima amistad. Tal vez por la manera en la que en lugar de enfocarme en mí, siempre estuve detrás de mi hermana, protegiéndola desde siempre de nuestros problemas familiares. Pero las cosas ya cambiaron, las situaciones ya no son tan caóticas y mi hermana ahora tiene a Ishida como otra distracción.

  Supongo que en ese momento me quede a la deriva conmigo misma, tanto que ya no recordaba como se sentía no tener ninguna otra persona con la que estar que no sean mi hermana o mi abuela.

  Solo quiero que mi amistad con ___ no se arruine por un capricho mío que surgió de la nada, y aun que ella no llegue a amarme tanto como yo a ella, siempre estaré para ella como ella lo ha estado para mí.

—¿Uh?

  En aquel momento que estaba por apagar la lampara que teníamos al lado, note como en su muñeca estaba aquella pulsera que con tanto esfuerzo ella había hecho en el comedor hace unas pocas horas. Baje un poco la mirada y note que en la mano que yo había levantado para apagar la luz, estaba la otra pulsera con el mismo diseño.

  Acerque mi muñeca para verla mejor, y me sorprendí por lo linda que nos quedaba a ambas. Con solo pensar en como ella me la había puesto mientras estaba dormida en su hombro, hace que en mi rostro se forme una tonta sonrisa.

—Yo también siento que te he amado desde que te conocí...