Ghost (Jotaro x tú)

Capítulo 38

POV Omnisciente

El día había sido perfecto para ti, o bueno, en su mayoría. Habías logrado relajarte un poco y dejar de sobrepensar sobre tu vida y situación por lo menos hasta que regresaste a casa, incluso comiste, si no bien, pues con mejor disposición, porque, claro, un chico no iba a sacarte de tus problemas y sabías que Allen no era la solución a tus problemas.

O a los problemas que iban a surgir a partir de ello.

Ese día fue agradable, habías descubierto un pueblo nuevo y relativamente cerca de tu localidad...

Pero no contabas con que alguien te iba a ver en ese lugar...

Eran cerca de las 11 AM cuando Kakyoin se encontraba ingresando al museo de arte que Allen te mencionó que estaba en el pueblo.

De no ser porque estabas hablando con Allen, Kakyoin hubiera ignorado por completo tu presencia por la gran cantidad de personas que se encontraban transitando por las calles empedradas a esa hora en el centro del pueblo.

Kakyoin estaba dentro del museo porque su facultad le había dejado un trabajo, ni siquiera él sabía que existía ese pueblo, aunando de que era aún un chico de intercambio, pero, aun así, por ser un chico naturalmente interesado por conocer los lugares por los cuales él ha pasado, no supo de la existencia de este pueblo.

Fue entonces que a media visita, escuchó tu voz, al inicio creyó que fue su imaginación, pero, cuando el timbre de tu voz resonó una y otra vez, por fin se decidió a ir a ver a la calle.

Dicen que los usuarios de Stand se atraen los unos a los otros, ¿no?

Te vio en la calle, bajando de una moto con un... ¿chico?

Sí, un chico que él no reconoció como Jotaro u otro al que él conociera, era un chico completamente desconocido con cabello negro, piel pálida y ojos rojizos.

Se extrañó al verte con alguien extraño y, al saber que Jotaro estaba tratando de ganarse tu amistad de nuevo, decidió observar se forma discreta.

Tan discreta que ni siquiera te diste cuenta.

Usando incluso a Hierophant Green, con el pretexto mental de cuidarte de ese extraño, pero, al notar que realmente estabas cómoda con él, o por lo menos, no reaccionaste de forma tan negativa a su cercanía, decidió entonces sólo observar un poco más para después dirigirse de regreso hacia la ciudad e informarle a cierto azabache oji-celeste de la situación.

Ya que, bueno, al parecer tú no tenías derecho de pedirle ayuda a él para que te ayudase a conquistar a Jotaro, pero él si tenía derecho de decirle a Jotaro sobre lo que vio.

Llegó aproximadamente a las 4 PM a la ciudad y 4:30 a la casa de Jotaro. Cabe recalcar que se notaba que no llevaba urgencia, ya que, incluso, con un calmo movimiento, llamó a la puerta.

Fue recibido, como siempre, por Holly, una grata sorpresa para ambos, ya que Kakyoin ya no frecuentaba la casa de Jotaro desde que entraron a la facultad e igualmente porque Kakyoin disfrutaba mucho de la compañía de la madre de Jojo. Pero, claro, él no estaba ahí por Holly, no, inmediatamente preguntó el pelirrojo por Jotaro, quien estaba en su cuarto.

Holly dejó pasar a Kakyoin a la pieza de su hijo, el pelirrojo, reitero, no llevaba prisa. Al llegar a la recámara del pelinegro, llamó a la puerta, Jotaro abrió, se notaba un poco cansado, con ojeras y el cuarto olía a cigarro.

Jotaro: ¿Qué pasa? - su voz se escuchaba ronca y llena de hartazgo.

Kakyoin: ¿Volviste a fumar? Creí que desde lo que pasó con ____ ya no fumabas.